Debkafile, Traducción por Ivana Cardinale

Oficiales militares de la OTAN y de naciones del Golfo Pérsico, han establecido silenciosamente un comando operacional mixto en Iskenderun en la provincia de Hatay, Turquía en la frontera del norte de Siria, informaron fuentes militares a Debkafile.
Procedentes de EE.UU., Francia, Canadá, Qatar, Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos con oficiales turcos proporcionando enlaces, no representan a la OTAN pero se auto-designan “monitores”.

Su misión es establecer “corredores humanitarios” dentro de Siria para atender a víctimas de la supuesta represión de Bashar al-Assad. Comandados por oficiales las fuerzas terrestres, navales, aéreos e ingenieros,el grupo de trabajo tiene como objetivo avanzar en la mayor parte del norte de Siria.

Sentando las bases para la legitimidad de la intervención combinada entre la OTAN y países árabes en Siria, la Comisión Independiente Internacional de la ONU creada para evaluar la situación en Siria publicó un informe horrendo el lunes 28 de noviembre sobre las supuestas brutalidades del gobierno de Assad. La comisión documentó supuestas “graves violaciones de los derechos humanos” y patrones de ejecuciones sumarias, arrestos arbitrarios, desaparición forzosa, tortura incluyendo violencia sexual como también violaciones de los derechos de niños”.

El ministro de Relaciones Exteriores de Siria,Walid al-Moallem, se defendió mostrando en una conferencia de prensa el lunes fotos de cuerpos desmembrados de soldados sirios como prueba de las atrocidades que fueron perpetradas por la oposición de Siria.