Este mismo tribunal debe decidir ahora si autoriza a Assange a elevar su caso a la Corte Suprema, última instancia judicial británica. Para ser escuchado por esta instancia, el australiano debe fundamentar por qué su caso es de gran relevancia jurídica en el país, y esto acontecerá el próximo 5 de diciembre.
Por su parte, la defensa de Assange mantiene que su extradición a Suecia sería «injusta e ilegítima» y que el proceso judicial es parte de una conspiración política para silenciarlo.
Assange, cuyo portal ha revelado los detalles de miles de informaciones confidenciales de embajadas de EEUU en todo el mundo, fue detenido en Londres el 7 de diciembre de 2010 después de que las autoridades británicas recibieran la petición de arresto y extradición de las autoridades suecas.
Antes del último juicio, Wikileaks anunció que dejaría de divulgar secretos oficiales por falta de financiación.