Hasta el próximo 2 de octubre, en 12 audiencias de tres horas cada, el tribunal de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) considerará una los alegatos finales de cada nación, aunque se espera que el veredicto final solo esté listo hacia marzo o abril del próximo año 2010.
Acotó empero que respecto a la principal demanda argentina -en su momento impedir la construcción de la pastera, ahora su funcionamiento- la CIJ emitirá «un fallo contundente a favor de Uruguay».
En mayo de 2006, Argentina demandó a Uruguay ante esa instancia por considerar que había autorizado unilateralmente la construcción de dos fábricas de celulosa a orillas del río Uruguay, el cual se encuentra bajo administración compartida según lo dispuesto en un tratado bilateral que data de 1975.
Una de esas industrias nunca vio la luz, pues la española ENCE vendió el proyecto a la finlandesa Stora Enso y la chilena Arauca, que planean edificarla más al sur, en el departamento de Colonia.
Pero la finlandesa Botnia construyó la otra planta de celulosa cerca de la localidad de Fray Bentos, unos 310 kilómetros al noroeste de Montevideo, la capital uruguaya, y frente a la provincia argentina de Entre Ríos.
La planta entró en servicio en noviembre del 2007 y según diversas instituciones uruguayas, internacionales e incluso argentinas, no ha afectado la calidad del aire ni de las aguas del limítrofe río Uruguay.
En desacuerdo con tales veredictos, grupos ambientalistas de la ciudad argentina de Gualeguaychú mantienen cortado desde noviembre de 2006 un puente internacional que une a las dos orillas.