Pese a la fiesta del Año Nuevo judío, la réplica oficial israelí fue inmediata: “Respetamos la soberanía egipcia sobre el Sinaí, que es un factor estratégico importante para ambos países”.
Othman agregó, según Maan, que los dirigentes israelíes quisieran mostrar al mundo que Egipto no está en condiciones de controlar sus propias fronteras.
Pero Egipto, subrayó el ministro, reforzó su presencia militar en la península del Sinaí y mantendrá el control sin que sea necesaria ninguna intervención israelí. “Debemos de todos modos estar listos (para afrontar) un plan israelí de tomar el Sinaí en el futuro próximo”, advirtió.
Las relaciones entre ambos países han sufrido duros golpes en las últimas semanas. El 18 de agosto pasado tropas israelíes mataron a cinco policías egipcios en un incidente en la frontera. El 7 de este mes miles de egipcios atacaron la sede de la embajada israelí en El Cairo.