“El Presidente creó un nuevo grupo, el Grupo de Interrogatorio de Detenidos de Alto Valor (HIG, por sus siglas en inglés), que tendrá su base en el FBI”, agregó Burton en rueda de prensa y confirmó la información que este lunes temprano había adelantado el periódico The Washington Post.
El nacimiento de la unidad constituye un importante giro en la política de espionaje estadounidense, pues estará formado por agentes de varias agencias de seguridad y cuerpos policiales, y dependerá directamente de la Presidencia a través del Consejo de Seguridad Nacional.
El equipo “unirá todos los diferentes elementos de la comunidad de Inteligencia para tener la mejor información posible basada en métodos científicamente probados y de acuerdo con el Manual de Campo del Ejército”, agregó Burton.
El objetivo principal del HIG será recopilar inteligencia para prevenir “ataques terroristas y proteger la seguridad nacional”, añadió el funcionario, según informó la agencia de noticias DPA.
Paralelamente, deberá elaborar una lista de “buenas prácticas” y promoverlas entre las agencias que realizan interrogatorios, además de desarrollar un “programa de investigación científica” para comparar la “efectividad” de los sistemas actuales de interrogatorios y desplegar nuevas técnicas legales.
La creación de esta unidad de élite fue una de las recomendaciones de una comisión encargada de revisar las prácticas de interrogatorios, que Obama creó a su llegada a la Presidencia.
La decisión del mandatario se enmarca en su intento de replantear las políticas de tortura para tratar a los sospechosos de terrorismo (fuertemente criticadas durante la administración de George W. Bush), y coincide con la recomendación, por parte del fiscal general estadounidense, Eric Holder, de reabrir cerca de una docena de casos de abusos a prisioneros ligados con la llamada “guerra global contra el terrorismo”.
La investigación propuesta por Holder puede implicar el juzgamiento de empleados y contratistas de la CIA por trato cruel a sospechosos de terrorismo, según informó ayer el diario The New York Times.