En una rueda de prensa ofrecida en Santiago (capital), el jurista indicó que a su juicio, “el informe de autopsia del SML no deja establecido de manera indubitada las circunstancias en que perdió la vida el presidente Allende».
Ávila, que representa a un grupo de militantes del Partido Socialista en el caso, señaló que el documento «por sí mismo no puede probar nada” y que sólo podía servir como una “ base para una presunción judicial”.
Esta semana, la senadora Isabel Allende, hija del ex mandatario, confirmó que los restos del ex gobernante, exhumados el 23 de mayo pasado, volverán a ser inhumados en un funeral público el 4 de septiembre.
Los familiares de Allende sí calificaron como cierto el informe entregado por el SML el pasado 19 de julio, en el que el organismo indicó que el ex jefe de Estado se suicidó el 11 de septiembre de 1973 mientras las fuerzas del golpista Augusto Pinochet bombardeaban el Palacio de La Moneda (sede del Ejecutivo).
El director del SML, Patricio Bustos, explicó que se «verificó la identidad del presidente a través de métodos de odontología forense y de genética», y se determinó que la causa de muerte fue «por herida de proyectil» y «la forma de muerte corresponde a suicidio».
El pasado 25 de mayo, el Servicio Médico Legal (SML) de Chile efectuó las primeras pericias a los restos del ex presidente Allende luego de que la Justicia de ese país suramericano ordenara el mes anterior la exhumación de los restos del ex jefe de Estado.
El SML afirmó que el proceso ayudaría a esclarecer si éste se suicidó o si fue asesinado durante el golpe militar de septiembre de 1973.
En ese momento, el organismo afirmó que los restos óseos de Allende estaban íntegros y que no había pérdida de piezas pese a las inhumaciones y exhumaciones realizada en 1973 y 1990. Esto permitiría a los especialistas trabajar sin dificultades en las indagaciones de la causa de muerte.
El cadáver de Allende, que gobernó Chile entre 1970 y 1973, fue sacado de La Moneda por las fuerzas militares que dieron el golpe de Estado y se le practicó una autopsia en el Hospital Militar, tras lo cual su ataúd fue sellado.
Pese a que su viuda, Hortensia Bussi, insistió en ver el cadáver de su esposo, los militares se negaron y la condujeron a Viña del Mar, 120 kilómetros de Santiago (capital), en cuyo cementerio fue enterrado el dignatario.
El pasado 27 de enero la Justicia chilena ordenó investigar por primera vez la muerte del fallecido presidente de Chile.
En el marco de las investigaciones sobre su deceso, también se ha entrevistado a generales retirados y se ordenó la incautación de dos fusiles rusos tipo AK-47 a fin de determinar si alguno de ellos estuvo en poder el ex gobernante suramericano.