La patética condición en la que el narco paramilitar Álvaro Uribe Vélez ha colocado a Colombia, es el típico pago de una factura que contra natura, debe hacerse para saldar una deuda que pesa mas que la traición. A estas alturas de la realidad, no es desconocido que el señor Uribe, tiene un expediente, mas largo que los propios crímenes que se han realizado bajos sus órdenes y tutela en la sufrida Colombia, levantado por los órganos de investigación e inteligencia del imperio. Con ese prontuario es que el presidente colombiano, es tenido como rehén por parte de la nación del norte y de la familia Santos.
Entregarle al comando sur del ejercito Norteamericano; todo el territorio colombiano. A cambio de no ser juzgado como criminal y jefe del narco tráfico, es la condición que le impusieron. Ese historial se lo tenían a buen resguardo a “varito”, pero no se le dejaban olvidar. Siempre se lo recordaban, cuando se quiere salir del carril, lo llaman a Washington y le releen la cartilla. Por eso es que “varito” siempre hace de las de otros, aparentando ser suyas. Así se prestó con el ministro Santos para atacar el territorio Ecuatoriano, por eso juega a la provocación y al desafío a Venezuela, tal es la razón para acosar a Nicaragua y pretender apoderarse de las islas de San Andrés.
El pueblo colombiano ha sido tomado como rehén de los Estados Unidos por intermedio de Avaro Uribe. La sociedad de Colombia es blanco de las mafias narco paramilitares, gracias al compromiso del presidente y la oligarquía, con los Santos a la cabeza. Los mercenarios del ejercito privado Norteamericano, se surten de los asesinos entrenados en Colombia, destrozando los cuerpos de los campesinos, indígenas y el resto de población pobre. Son miles los cementerios privados que por la gracia de “varito” adornan los suelos neogranadinos. Millones las familias desmembradas que lloran su pesar sin que ninguna justicia actué. Muchos los núcleos humanos viviendo en la desesperanza de ver a sus hijos enterrados en la perdición del submundo de la droga y el sicariato.
No es cierta la comparación de que Colombia quiere ser convertida en el Israel de América. Israel es quien controla y ordena en Estados Unidos. Los capos que gobiernan a esas dos naciones, han convertido a Colombia en una neo palestina. Ya el pueblo Colombiano vive en una especie de Campo de Concentración a cielo abierto; solo tienen que abrir los ojos y ver la realidad. Tal como en palestina, en Colombia hay mas de seis millones de ciudadanos inocentes desplazados de su habitad. Tal como en palestina, los paramilitares, el ejército colombiano, y los mercenarios del ejercito privado yanqui, arrasan los pueblos y caseríos, asesinan a los lideres populares, cazan a los dirigentes sindicales. Es mas la táctica de segregación y terrorismo impuesta al pueblo colombiano, es dirigida por especialistas Israelíes. Poco a poco las zonas más ricas de Colombia son ocupadas por personas extrañas a su pueblo. Las empresas transnacionales de capital Israelita y sus socios, toman más terreno y expulsan a los nativos. Al igual que en gaza y Cisjordania, las fronteras amazónicas están siendo ocupadas por tropas y productores al servicio del imperio. En el mismo Brasil, los grandes productores agrícolas y pecuarios, son de origen extranjero; muchos Norteamericanos y de otras nacionalidades relacionadas. Son éllos los que le hacen la guerra como en el viejo oeste Norteamericano Los indígenas de la región, los sacan de sus tierras originarias, los masacran y hasta matan a quienes los defienden (Chico Méndez)
El interés de USA en posesionarse en Colombia y en Perú, prácticamente dentro de la amazonia, no es casual, es parte de un plan; un plan que concibieron antes de los años setenta, y que empezaron a fortalecer dentro de su población, enseñando a sus estudiantes de básica desde los años ochenta, presentando la amazonia como territorio bajo protección gringa. Éllos ya se habían posicionado en Ecuador y Bolivia, pero tuvieron que salir, gracias a la dignidad de esos pueblos y sus presidentes. Pero están muy bien ubicados en Paraguay, cerca de una de las mayores reservas de agua dulce del planeta ¿Qué harán Argentina y Brasil al respecto?
El pueblo Colombiano tiene una responsabilidad para consigo mismo, de suma importancia. O éllos acaban con la oligarquía que los negoció al imperio, o el imperio acabará con éllos. A los intereses imperiales, solo les importa el territorio, no las personas. Todo lo contrario, serán exterminadas y tal como lo están haciendo en palestina y en eso no se les agua el ojo. O pelean o pelan bolas. Pero algo es cierto. Tal como el bravo pueblo palestino, los colombianos no están solos ni hoy ni mañana, los pueblos libres del mundo los acompañaremos en su cruzada. Pero el de la casa ha de dar el primer escobazo. Las FARC solas, el ELN solos no bastan. Tiene que unirse el pueblo Colombiano y dejar de permitir que los aniquilen por separados y desunidos. Es necesario aniquilar la oligarquía Colombiana traidora y vende gente. Solo así se acabará la rabia
“MAS VALE MORIR DE PIE, QUE VIVIR DE RODILLAS”