El primer ministro británico, Keir Starmer, nombró el viernes a un nuevo viceministro y a los ministros de Asuntos Exteriores e Interior, en una profunda reorganización que busca restaurar su autoridad tras la renuncia de su viceministra, Angela Rayner. Starmer designó al ministro de Asuntos Exteriores, David Lammy, como viceprimer ministro y lo reemplazó por la ministra del Interior, Yvette Cooper. Esta, a su vez, fue reemplazada por la secretaria de Justicia, Shabana Mahmood. Todos son personas leales y de confianza, informó Reuters.com.
Tras reestructurar su equipo en Downing Street la semana pasada para reforzar su asesoramiento económico, se esperaba una reorganización ministerial. La salida de Rayner significó que la reorganización fue mucho más profunda de lo previsto, obligando a Starmer a poner fin a más de una semana de especulaciones que distraían sobre sus asuntos fiscales.
Starmer poco pudo hacer para proteger a Rayner después de que el asesor independiente británico dictaminara que había infringido el código ministerial al no pagar los impuestos correctos.
«Angela es una ‘bestia enorme’ y difícil de reemplazar», dijo un legislador laborista, añadiendo que los tres nuevos nombramientos eran «sensatos», aunque no excesivamente emocionantes.
Si bien Lammy ha recibido el cargo de viceprimer ministro, también se ha visto obligado a ceder el tan codiciado puesto de ministro de Asuntos Exteriores y reemplazar a Mahmood en el Ministerio de Justicia.
Cooper es una de las figuras más importantes del Partido Laborista tras trabajar para el ex primer ministro Gordon Brown. Su nombramiento se interpretará como una especie de ascenso tras supervisar la a menudo criticada política del gobierno para combatir la inmigración ilegal.
Mahmood, de 44 años, también es considerado un aliado seguro en el Partido Laborista, un político sensato que no ha temido tomar medidas contundentes al frente del sistema judicial.
Starmer considera vital la lealtad, ya que ha sufrido la mayor cantidad de renuncias ministeriales —salvo reorganizaciones gubernamentales— que cualquier primer ministro al comienzo de su mandato en casi 50 años.
«Actualmente, existe la sensación de que no saben lo que hacen ni lo que representan», declaró a Reuters Chris Hopkins, director de investigación política de la encuestadora Savanta.