El fiscal federal Eduardo Taiano imputó formalmente la mañana de este sábado al presidente de extrema derecha de Argentina, Javier Milei, por sus vinculaciones con el escándalo conocido como la criptoestafa o el criptogate.

Los delitos por los cuales se acusa al mandatario son los de abuso de autoridad, tráfico de influencias, estafa y negociaciones incompatibles con la función pública.

El inicio de la investigación se produjo a petición de la jueza federal María Servini y alcanza a los impulsores a nivel internacional del token $Libra Hayden Mark Davis y Julian Peh; a los organizadores del evento Tech Forum 2024 en el cual se habría dado el vínculo con Milei; también a Mauricio Gaspar Novelli y Manuel Terrones Godoy y al asesor del directorio de la Comisión Nacional de Valores Sergio Morales.

La denuncia fue hecha inicialmente por el abogado y dirigente Juan Grabois y el diputado Itai Hagman.

El fiscal no descarta la intervención de organismos internacionales como el FBI y Homeland Security, si se comprueba que los fondos de la estafa circularon por activos vinculados a Estados Unidos.

Escándalo

El origen del escándalo se produjo el 14 de febrero, cuando Milei compartió en su cuenta en X un enlace al contrato de $Libra en la blockchain Solabna. Esto causó un alza explosiva del criptoactivo, para caerse abruptamente horas más tarde, lo cual afectó a miles de inversores.