Agencias

Los investigadores, los tres basados en Estados Unidos, fueron galardonados «por sus estudios sobre cómo se forman las instituciones y cómo afectan a la prosperidad», señaló el jurado en su comunicado.

«Reducir las enormes diferencias de renta entre países es uno de los mayores retos de nuestro tiempo. Los ganadores mostraron la importancia de las instituciones para lograrlo», declaró Jakob Svensson, presidente del Comité del Premio en Ciencias Económicas, citado en un comunicado.

Mediante el estudio de los diferentes sistemas políticos y económicos introducidos por los colonizadores europeos en todo el mundo, los tres académicos demostraron una relación entre instituciones y prosperidad, subrayó el comité.

Acemoglu, de 57 años, es profesor del prestigioso Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), al igual que Johnson, de 61 años. Robinson, de 64 años, es catedrático de la Universidad de Chicago.

«¡Sorprendente e increíble!»

«Estoy encantado. ¡Es una noticia sorprendente e increíble!», declaró Acemoglu a la prensa por teléfono.

El Premio Nobel de Economía –como se conoce al Premio de Ciencias Económicas del Banco de Suecia en Memoria de Alfred Nobel, otorgado por primera vez en 1969– es el único de los premios que no fue previsto en el testamento del filántropo.

Se añadió mucho más tarde a los cinco premios tradicionales –Medicina, Física, Química, Literatura y Paz–, lo que le ha valido el sobrenombre de «falso Nobel».

En 1968, con motivo de su tricentenario, el banco central de Suecia, el más antiguo del mundo, creó un premio de ciencias económicas en memoria de Alfred Nobel, y puso a disposición de la Fundación Nobel una suma anual equivalente al montante de los demás galardones.