Sebastián Premici / El Destape
El Departamento de Estado norteamericano ideó un nuevo mecanismo de intervención e injerencia sobre los países de Latinoamérica: la Alianza para la Seguridad de los Minerales Críticos. El pasado 22 de agosto, la canciller Diana Mondino firmó un “Memorándum de Cooperación para la Gobernanza, la Inversión y la Seguridad de las cadenas de suministro a nivel mundial” junto a José Fernández, subsecretario de Crecimiento Económico, Energía y Medio Ambiente de los Estados Unidos. La funcionaria argentina se comprometió a establecer una suerte de canal de información privilegiada para favorecer a las empresas estadounidenses en los negocios detrás del litio, tierras raras y otros minerales críticos.
“El Gobierno nacional de la República Argentina tiene la intención de proveer información a los Estados Unidos respecto de potenciales licitaciones y proyectos en el país tan pronto como dicha información se encuentre disponible. El Gobierno Nacional hará todo lo que se encuentre a su alcance para alentar a los gobiernos subnacionales (las provincias) a proporcionar esta información lo antes posible para garantizar que las empresas con sede en los Estados Unidos y los socios de la Asociación para la Seguridad de los Minerales tengan suficiente tiempo para participar”, puede leerse en el documento rubricado por Mondino y Fernández al que accedió El Destape luego de formular dos pedidos de acceso a la información pública.
Todo servido
Los movimientos vinculados a la Alianza de Seguridad por los Minerales Críticos (MSP, por sus siglas en inglés) ocurren en simultáneo. La narrativa oficial camufla este avance sobre la soberanía de los países de la región como “proyectos de inversión de litio”, que traducido al idioma del MSP implica profundizar el enfrentamiento norteamericano con China, Rusia y otros países.
“Tenemos el pie en el acelerador. Y tenemos que acelerar los procesos para que la seguridad económica sea la seguridad nacional en el hemisferio”, manifestó recientemente la generala del Comando Sur Laura Richardson, durante un panel de la Conferencia Anual de Seguridad Hemisférica (HSC) organizada en Miami por la Universidad Internacional de Florida (FIU).
Esta semana, Richardson estuvo en Mendoza, al mismo tiempo en que se realizaba en Buenos Aires una reunión de la Agencia Internacional de Energía, organizada por el Wilson Center, con la mirada puesta en el desarrollo de los minerales críticos.
Ya nadie disimula nada. Ni la administración Milei – entusiasta en la entrega de los recursos naturales y territoriales-, ni la norteamericana, sorprendida por la devoción de la casta mileista hacia sus recomendaciones.
“La Argentina es un país clave para asegurar la estabilidad en la región”, advertía Marc Stanley, embajador de Estados Unidos en Argentina, durante su disertación en el evento anual de la cámara que nuclea los intereses de las empresas norteamericanas en Argentina (AmCham), llevado adelante en marzo de este año.
“No recuerdo otros momentos donde hayamos estado tan concentrados en Argentina como en los últimos dos meses – agregaba para luego concluir -. La cooperación vinculada a los minerales críticos es clave. De hecho, (Antony), Blinken -secretario de Estado norteamericano- estuvo abocado a la supervisión de este tema durante las últimas dos semanas”.
Estados Unidos observa con detenimiento las cuencas de cobre, litio y uranio que existen en el país. Con la excusa de la transición energética, avanzan en la nueva doctrina de seguridad nacional. En simultáneo, actúan la Embajada, la cuarta flota del Comando Sur, la Cancillería y la ministra Patricia Bullrich, quien les ofrecerá a las empresas una suerte de blindaje cuasi militar a través del denominado Comando Unificado Productivo.
Preguntas
¿Cuáles son los alcances de la Alianza para la Seguridad de los Minerales Críticos (MSP) en el país?, preguntó El Destape a través de dos pedidos de acceso a la información pública.
“La Secretaría de Minería informa que no se tiene registros en esa dependencia de avances en el país relacionados a la Asociación de Seguridad de Minerales Críticos. Así también, mencionan que no cuentan con un registro de empresas que tengan dichos vínculos con el MSP dado que Argentina no ha propuesto aun proyectos ni empresas ante ese foro. En caso de haberlos, se han producido a través de los países donde esas empresas están radicadas”. La respuesta fue totalmente elusiva. Sin embargo, El Destape pudo avanzar en la reconstrucción de algunos movimientos asociados a esta iniciativa.
Una de las empresas que estuvo indagando sobre los avances del MSP en el país fue Lake Resources, en la que confluyen varios fondos de inversión de Australia y los Estados Unidos.
El pasado 4 de junio, Mondino estuvo reunida con David Dickson, CEO y gerente general de Lake Resources Argentina. Del encuentro también formó parte Amalia Liliana Sáenz, senior VP de Asuntos Corporativos y Country Manager de la minera. Al día siguiente, los mismos empresarios fueron recibidos por el jefe de Gabinete, Guillermo Francos.
“En la reunión se conversó sobre el Proyecto Kachi y la industria del litio. Asimismo, conversaron sobre los avances del MSP”, puede leerse en la minuta de la reunión difundida a través del Registro Único de Audiencias.
Otra de las empresas que juegan en esta línea es Rio Tinto, la sociedad anglo australiana que acaba de comprar por 6700 millones de dólares a Arcadium Lithium, la otrora compañía que había surgido tras la fusión de Allkem y Livent (proyectos Olaroz en Jujuy y Fenix en Catamarca).
“Tomamos la tabla de los elementos, los miramos todos y también los cambios que están ocurriendo en el mundo con la transición energética, cuáles son los minerales críticos que van a importar para nosotros”, sostuvo Dominic Barton, chairman del directorio de Rio Tinto.
La operación se concretó durante la primera semana de octubre, tras la cual Barton – ex embajador de Canadá en China y durante décadas la persona clave detrás de la consultora McKinsey – fue recibido en los Estados Unidos por el embajador argentino Gerardo Werthein.
Detrás de Rio Tinto se encuentra BlackRock, el gran fondo de Larry Fink que posee un tentáculo en cada uno de los proyectos literos del país.
Nueva entrega
El DNU 70/2023, la Ley de Bases y el Régimen de Incentivos a las Grandes Inversiones constituyen parte de la estructura jurídica para que las empresas norteamericanas avancen sobre los recursos del país, en el marco del proyecto de seguridad de los Estados Unidos camuflado bajo el pomposo nombre de Alianza para la Seguridad de los Minerales Críticos.
Dicha entrega de soberanía quedó un poco más explícita luego de la firma del “Memorándum de Cooperación para Gobernanza, la Inversión y la Seguridad de las cadenas de suministro a nivel mundial de los Minerales Críticos”.
“Reconociendo…que los Estados Unidos es miembro fundador de la Asociación para la Seguridad de los Minerales (MSP, por sus siglas en inglés) la cual preside para asegurar y diversificar las cadenas de suministros de minerales críticos y que la República Argentina se ha unido al Foro de la MSP para ampliar y formalizar su compromiso con los socios de la MSP”, puede leerse en el documento firmado por Mondino y José Fernández, subsecretario de Crecimiento Económico, Energía y Medio Ambiente de los Estados Unidos.
El Memorándum le garantizará a los Estados Unidos una suerte de canal de información privilegiada, garantiza por la Cancillería argentina:
* El Gobierno nacional de la República Argentina tiene la intención de proveer información a los Estados Unidos respecto de potenciales licitaciones y proyectos en la República Argentina tan pronto como dicha información se encuentre disponible.
* El Gobierno Nacional de la República Argentina hará todo lo que se encuentre a su alcance para alentar a los gobiernos subnacionales a proporcionar esta información lo antes posible para garantizar que las empresas con sede en los Estados Unidos y los socios de la Asociación para la Seguridad de los Minerales tengan suficiente tiempo para participar.
* Los participantes tienen la intención de reunirse anualmente a través de un Diálogo bilateral sobre Seguridad Energética. Se coordinarán de forma periódica a nivel operativo para debatir el desarrollo de proyectos y oportunidades de inversión en las cadenas de suministro de minerales críticos o de forma ad hoc si surgiera algún asunto urgente.
Con la complicidad de la casta mileista, el Gobierno de los Estados Unidos coloca al país dentro de un tablero geopolítico que nada tiene que ver con “el desarrollo de inversiones” y el bienestar general, como tampoco lo fue la otrora Alianza para el Progreso de la década de 1960.