Agencias
Varios de los mayores sindicatos de Francia convocaron para este 19 de enero un paro con movilizaciones para manifestar su rechazo a la reforma al régimen de jubilaciones que impulsa el gobierno de Emmanuel Macron. Está previsto que ese día se detenga el sector de los trabajadores estatales, los ferrocarriles de todo el país, el transporte de la región de París, la educación, la Policía y el sector energético, entre otros. Las movilizaciones cuentan además con el apoyo de los partidos de izquierda franceses.
La reforma aumenta de 62 a 64 años la edad mínima para retirarse con una jubilación parcial para 2030. Por otra parte, adelanta de 2035 a 2027 la exigencia de contar con 43 años de aportes, en lugar de 42, para poder contar con la jubilación máxima. El ministro de Trabajo, Olivier Dussopt, aclaró que quienes cuenten con esa cantidad de años de aportes podrán jubilarse a los 60 años con su jubilación completa.
A su vez, la primera ministra, Élisabeth Borne, se mostró abierta a que la reforma sea modificada durante el trámite en el Parlamento. “Habrá un debate parlamentario, que es un marco en el que el proyecto podrá variar. Buscamos compromisos y acuerdos”, dijo a France Inter, según citó Efe.
Consultada sobre la jornada de movilizaciones prevista para el jueves, Borne dijo que entiende que la reforma causa “inquietud” entre los franceses, pero respondió que “un sistema deficitario también genera inquietud”. La primera ministra reiteró el argumento del gobierno de que la reforma busca “asegurar la supervivencia” del “sistema de reparto” y que sin reforma la situación se dirigiría a “una reducción de las jubilaciones o una suba de impuestos, o bien al final del sistema de reparto y a uno de capitalización”.
Una encuesta de la consultora Elabe, citada por France 24, concluyó que 58% de los franceses considera que la reforma es injusta, más de 60% cree que no se debe reformar las jubilaciones en un momento como este, en el que aumentó el costo de vida, y sólo 18% apoya la medida.