Agencias

Con la mirada puesta en la renovación y extensión de los inéditos compromisos alcanzados en el Acuerdo de París hace siete años, inició este domingo la COP27, en Sharm el-Sheij, Egipto.

La cumbre, que se extenderá hasta el próximo 18 de noviembre, comenzó con un acuerdo para discutir la compensación económica a países vulnerables. Este encuentro supone un punto de inflexión para frenar el cambio climático luego de que la COP26 certificara que el mundo se encuentra ante una década crítica.

Implementación, financiación, mitigación, adaptación, pérdidas y daños y cooperación son el eje central de la COP27.

La desierta ciudad de Sharm el Sheij, a orillas del mar Rojo, acoge la cumbre climática bajo el lema “Juntos por la implementación”. Un mensaje que urge a la necesidad de pasar de las promesas y anuncios a las acciones concretas, en momentos en que el cambio climático se hace más evidente.

El encuentro en el que participan cerca de 200 países supone un punto crucial en la mitigación del calentamiento global. En la apertura de la cumbre, el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, advirtió que el planeta se dirige de forma irreversible a un desastre climático.

«A medida que se pone en marcha la COP27, nuestro planeta está enviando una señal de socorro (…) El estado del clima mundial es una crónica del caos climático», alertó Guterres este domingo, al inicio de la conferencia climática internacional.