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El Gobierno nacional decidió relevar a parte de la custodia de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner luego del intento de asesinato del jueves pasado frente a su domicilio ubicado en el barrio porteño de Recoleta. Según señalaron desde Casa Rosada, la medida se llevó adelante luego de que agentes de la Policía Federal «no tuvieron el nivel» esperado al momento de defender a la ex mandatario según informó Agencia Télam.

Fuentes del Poder Ejecutivo explicaron a Télam que, de todas maneras, no se tomó la determinación de aumentar la cantidad de los miembros de la custodia para proteger a la Vicepresidenta sino que hubo «algunos relevos e incorporaciones de personal» tras el atentado contra su vida. El objetivo, según detallaron, es fortalecer el protocolo de seguridad y asegurar que se esté cumpliendo al pie de la letra.

Desde Casa Rosada, en relación al ataque perpetrado el pasado jueves, explicaron que el operativo de seguridad «no falló» ya que se mantuvo una «cadena de protección» alrededor de la titular del Senado, que se respetó en todo momento -antes, durante y después del intento de magnicidio-. Lo que ocurrió fue que «alguien metió la mano» (el atacante, Sabag Montiel) entre la multitud y puso en jaque la seguridad.

Entre los funcionarios más cuestionados, luego de lo ocurrido en Recoleta, aparece el nombre del ministro de Seguridad, Aníbal Fernández, quien puso su renuncia a disposición pero fue rechazada por el presidente Alberto Fernández.

Por otro lado, sobre el intento de magnicidio contra CFK, funcionarios manifestaron a Télam que, en un episodio como el ocurrido, el atacante «no es un lobo solitario» sino que «hay gente detrás».  Además sostuvieron que la información borrada en el teléfono celular de Sabag Montiel «se puede recuperar» y que se cumplió con «la cadena de custodia» porque el aparato fue entregado al Juzgado con sobre cerrado y «en bolsa de Faraday».

Por último, en relación a la seguridad del resto de los miembros del Gabinete, desde el Gobierno confirmaron que se mantiene de la misma manera aunque se le pidió a ministros y ministras que tengan cuidados y se sometan a los protocolos establecidos por miedo a «efectos de contagio».