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La Organización de Estados Americanos (OEA) «tal como está, no sirve», declaró este viernes el presidente de Argentina, Alberto Fernández, durante su discurso en la cumbre virtual por el segundo aniversario del Grupo de Puebla. Afirmó que, mientras Donald Trump estaba en el poder en EE.UU., el principal foro regional para el diálogo se convirtió en «una suerte de escuadrón de gendarmería» del país norteamericano para «avanzar sobre los gobiernos populares en América Latina».
Fernández señaló que el exmandatario estadounidense «imponía su política» sobre los Estados de la región, creando los mecanismos que no servían «a la unidad de América Latina, ni al desarrollo ni al progreso de los latinoamericanos», sino a los intereses de Estados Unidos. «Y eso explica muchas cosas que pasaron: eso explica la OEA que tenemos, el BID [Banco Interamericano de Desarrollo] que tenemos, la división que tenemos, el nacimiento del Grupo de Lima, del Foro Prosur», dijo.
Refiriéndose el golpe de Estado en Bolivia, apuntó que las acciones de la organización en ese país latinoamericano «necesariamente deben ser investigadas y necesariamente deben ser juzgadas, porque ahora no caben dudas de lo que pasó».
La OEA es «un lugar que nos disocia»
Según el mandatario argentino, la OEA dejó de ser «un lugar de encuentro para América Latina». «Ya no es un lugar que nos convoca, es un lugar que nos disocia. Solo nos desencontramos en ese ámbito», agregó. Además, subrayó que «el primero que tiene que hacer su mea culpa es su secretario general, Luis Almagro, por la cantidad de cosas que ha hecho» y «la institucionalidad de EE.UU. por haber propuesto y sostenido a un hombre como Almagro».
«América Latina tiene un triste estigma, somos el continente más desigual del mundo», explicó Fernández, añadiendo que «las políticas de los últimos años solo profundizaron esa desigualdad» y «la pandemia la dejo más en evidencia».
«Los bloqueos deberían avergonzar a quienes los promueven»
El presidente tampoco pasó por alto el tema de los bloqueos. «Hay sociedades, además en América Latina, que padecen bloqueos económicos en medio de una pandemia» y agregó que estos no afectan tanto a un gobierno, sino a una sociedad.
«Los bloqueos deberían avergonzar a quienes los promueven», declaró, instando a la región a «alzarse contra los bloqueos», ya que «tiene la obligación moral, el deber ético de hacerlo». «Vamos por el mundo explicándole a Europa, EE.UU., que esos bloqueos que se han lanzado no sirvieron para nada», dijo y aseguró que «la mejor forma no es intervenir los gobiernos, sino dejar que los gobiernos los elija la gente».