Agencias
El presidente de China, Xi Jinping, destacó hoy, durante la celebración del centenario del partido que rige sus destinos desde hace casi 72 años, que su país, ya «moderadamente próspero», «nunca» volverá a «ser sometido» ni permitirá que ninguna fuerza extranjera le intimide.
Fue uno de los momentos de su intervención que desataron más aplausos entre las decenas de miles de personas que llenaban las gradas instaladas en la plaza de Tiananmen, en un momento en que China se siente especialmente atacada por Occidente y acusa a Estados Unidos de intentar impedir su progreso.
Pero Xi también aprovechó la ocasión para declarar que el país ha logrado convertirse en «una sociedad moderadamente próspera a todos los niveles», el principal objetivo fijado en 2012 para el centenario del partido.
«Esto significa que hemos logrado una resolución histórica al problema de la pobreza extrema en China, y ahora avanzamos con paso decidido hacia el objetivo del segundo centenario: convertir a China en un gran país socialista y moderno a todos los niveles», dijo.