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La Fiscalía General (FGE) de Bolivia anunció que una comisión de
fiscales de La Paz pidió la detención preventiva del expresidente Evo
Morales (2006-2019), al imputarlo formalmente por presuntos delitos de
terrorismo y financiamiento al terrorismo.
«La comisión de fiscales (…) emitió la imputación formal en contra del
expresidente Evo Morales Ayma, sobre la base de todos los elementos de
convicción colectados durante la etapa preliminar; además en la
resolución de imputación se solicita la detención preventiva», dijo la
FGE en un comunicado.
Ésta era la primera resolución de una autoridad judicial contra Morales,
quien está exiliado en Argentina tras resultar forzado a renunciar en
noviembre del año pasado y pasar luego por un breve refugio en México.
Morales fue acusado de sedición y terrorismo por el Gobierno transitorio
instalado tras su caída, que tomó como base la grabación de una llamada
telefónica en la que el exgobernante supuestamente instruía acciones de
bloqueo de carreteras durante las protestas que siguieron al golpe de
noviembre.
Varias denuncias
La administración transitoria de Jeanine Áñez —quien es también
candidata presidencial para las elecciones de septiembre próximo— ha
acusado además a Morales de varios delitos económicos, fraude electoral y
hasta de haber montado desde su exilio un reciente caso de corrupción
en la compra de respiradores hospitalarios.
La imputación por terrorismo anunciada este 6 de julio, luego de una
serie de presiones del Gobierno sobre la Fiscalía, incluye al dirigente
campesino Faustino Yucra, con quien supuestamente conversó Morales en el
audio que sustenta la denuncia.
«Se evidenció que el exjefe de Estado y el coimputado Faustino Y.Y.
mantuvieron comunicación mediante llamadas telefónicas el 14 de
noviembre de 2019, desde la ciudad de México hasta El Torno – Santa
Cruz. Aparentemente, en esa conversación, Morales habría instruido al
dirigente cocalero cometer actos ilícitos durante los hechos violentos
registrados en el país a partir del 10 de noviembre de 2019», señaló la
FGE.
Añadió que la imputación se basaba, entre otros análisis técnicos, en
una pericia del Ministerio Público de Colombia, hecha a pedido de
Bolivia, que estableció «una alta probabilidad» de que una de las voces
del audio sea la de Morales.
En la conversación telefónica divulgada por el Gobierno de Áñez cuando
lanzó la acusación, se escuchaba a la supuesta voz de Morales instruir:
«Hermano, que no entre comida a las ciudades. Vamos a bloquear, cerco de
verdad».
El Gobierno transitorio ha recrudecido en las dos últimas semanas sus
ataques contra Morales, su partido Movimiento Al Socialismo (MAS) y al
candidato presidencial de esa organización, Luis Arce, favorito para
ganar las elecciones según las primeras encuestas de intención de voto.
Morales niega acusaciones
«De manera ilegal e inconstitucional, la Fiscalía de La Paz pretende
imputarme por terrorismo con un audio alterado y sin ser notificado, una
prueba más de la sistemática persecución política del Gobierno de
facto», expresó Morales desde las redes sociales.
Desde su refugio en la capital argentina, adonde llegó el pasado 12 de
diciembre, el exjefe de Estado aseguró en su escueto mensaje que «pronto
volverá la democracia y el Estado de Derecho a Bolivia».