Agencias
China cumplió su amenaza y respondió hoy a Estados Unidos exigiendo el
cierre de su consulado en la ciudad de Chengdu como represalia a la
orden de clausura de su oficina diplomática en Houston (Texas),
desatando una de sus peores crisis políticas desde que los dos países
establecieron relaciones en 1979.
Tras un impase de un día, la Cancillería china finalmente anunció en la
mañana de este viernes su decisión de «revocar el consentimiento» para
establecer el Consulado de Chengdu -capital de la provincia
suroccidental de Sichuan-, y exigir «el cese de todas sus operaciones».
24-07-20.-El Ministerio de Asuntos Exteriores afirmó que se trata de
«una respuesta legítima y necesaria contra la acción injustificada de
EEUU» de ordenar el cierre de su consulado en Houston, que Washington
defiende asegurando que busca «proteger la propiedad intelectual
estadounidense y la información privada de sus ciudadanos», aunque China
niega que la oficina haya robado propiedad intelectual.
«La relación entre ambos países no es la que China desearía, pero
Washington es responsable de ello», se exculpó la Cancillería en un
comunicado, y agregó que su respuesta está «en línea con la ley
internacional, las normas básicas que rigen las relaciones
internacionales y las prácticas diplomáticas» dado que, a sus ojos, la
medida que tomó Washington rompió todas estas reglas.
Por la tarde, el portavoz de Exteriores, Wang Wenbin, fue un paso más
allá y señaló que los diplomáticos estadounidenses enviados a Chengdu
participan en actividades que no son coherentes con su misión, y que
China ha presentado en el pasado múltiples quejas al respecto.
Wang aseguró que «el consulado chino en Houston sigue operativo», y volvió a pedir a Washington que reconsidere su decisión.
El ministerio chino no especifica cuándo cerrará la representación
diplomática. En el caso de Houston, el gobierno de Donald Trump dio 72
horas a los diplomáticos chinos para desalojar.
La tensión entre China y Estados Unidos, ya alimentada por las disputas
comerciales y las acusaciones mutuas sobre el origen de la pandemia de
la covid-19, ha aumentado en las últimas semanas con la imposición por
parte de Pekín de una ley de seguridad nacional en Hong Kong.
Señal de la desconfianza en el ambiente, autoridades estadounidenses
sospechan que una ciudadana china, acusada de ocultar sus vínculos con
el ejército de su país para obtener una visa, se encuentra refugiada en
el consulado chino en San Francisco para evitar ser arrestada.
La respuesta de Pekín de este viernes provocó la caída de las bolsas
chinas: Hong Kong cedió un 2,19%, Shanghái un 3,9% y Shenzhen un 5%.
Además de la embajada en Pekín, Estados Unidos tiene cinco consulados en
China continental (Cantón, Shanghái, Shenyang, Chengdu, Wuhan) y uno en
Hong Kong.
El de Chengdu, inaugurado en 1985, cubre el suroeste de China, incluida
la región autónoma del Tíbet. Según su página web, posee 200 empleados,
de los cuales 150 tienen estatus local.