Agencias
Tres de los estados más poblados de Estados Unidos, Florida, Texas y Arizona, registraron esta semana récords en el número de contagios diarios de coronavirus, pero sus líderes no contemplan cambios por ahora en sus planes de reapertura, que se ajustan al guion acelerado respaldado por la Casa Blanca. Reseñó el canal de TV latino Telemundo.
Los casos de coronavirus se dispararon el miércoles, un día después de que esos estados estadounidenses y otros cuatro del mismo país reportaron aumentos diarios récord de nuevas infecciones. Informó la agencia Reuters.
Además, otros tres territorios -Alabama, Carolina del Norte y Carolina del Sur- experimentaron esta semana récords en su media de contagios de los últimos siete días, según un análisis del diario The Washington Post.
En Florida, la tendencia al alza continuó este miércoles con otros 2,610
nuevos contagios, pero el gobernador, Ron DeSantis, dejó claro el
martes que el estado «no echará marcha atrás» en el proceso de
reapertura económica, una postura criticada por la oposición.
«Está reabriendo Florida de manera imprudente, a pesar de que los datos
están gritando ‘Precaución'», opinó este miércoles la demócrata Nikki
Fried, comisionada de Agricultura de Florida.
DeSantis insiste en que el ascenso de los casos entra dentro de lo
esperado por el aumento del número de pruebas diagnósticas, como
defienden también los líderes de Texas y Arizona.
Las hospitalizaciones por COVID-19 también están aumentando o se ubican
en niveles récord. A diferencia de los picos reportados en nuevos
contagios, las hospitalizaciones no pueden atribuirse simplemente a un
aumento de las pruebas.
En Arizona, el 83% de las camas de cuidados intensivos están ocupadas,
un récord, según un sitio de internet estatal. En Florida, parte del
aumento se ha relacionado con la reapertura de bares, donde las personas
se apiñan, lo que facilita la transmisión del virus.
En Texas, el gobernador Greg Abbott ha pedido no alarmarse por el auge
sin precedentes en el número de contagios, e insiste en que el estado
está ahora «mejor preparado» para enfrentar el coronavirus que en marzo o
abril.
Abbott atribuye parte del aumento a «personas menores de 30 años» que
están acudiendo a los bares recién reabiertos, una tendencia que las
autoridades sanitarias de Florida también relacionan con el récord en
ese estado. En Texas, algunos de esos locales están cerrando por su
cuenta debido a brotes de coronavirus.
El vicepresidente Mike Pence dijo el martes que las autoridades estaban
considerando otros lugares, posiblemente al aire libre, para el evento
de Tulsa. Pence rechazó hablar de una segunda ola de infecciones,
citando un aumento en las pruebas.
Otros de los estados más afectados en el país son: Nueva Jersey (170,780
contagios; 12,767 muertes), California (159,962 casos; 5,226 muertes),
Illinois (134,185 contagios; 6,485 muertes), Massachusetts (106,151
infectados; 7,734 muertes), Texas (95,931 contagios; 2,055 muertes) y
Michigan (66,497 contagios; 6,036 muertes).
En Nueva York, que había sido el epicentro y la zona más afectada por la
epidemia en territorio estadounidense, el gobernador Andrew Cuomo
promocionó la historia de éxito de su estado el miércoles.
Más de 2,1 millones de personas se han contagiado con el virus en
Estados Unidos y más de 116.000 han muerto por COVID-19, la cifra más
alta en el mundo.