Agencias

La aerolínea Latam, la mayor de Latinoamérica, se ha declarado en bancarrota en su país de origen, Chile, así como en Perú, Colombia, Ecuador y Estados Unidos, lo que en la práctica equivale a declarar el concurso de acreedores, por el «impacto sin precedentes» del covid-19.

Las filiales de Argentina, Paraguay y Brasil no están incluidas en la solicitud de bancarrota, y en este último país mantiene conversaciones con el Gobierno para buscar apoyo financiero, al igual que en Chile, Colombia y Ecuador, para «en la medida de lo posible», proteger el empleo y minimizar la caída de sus operaciones.

En un comunicado, la aerolínea explica que se ha acogido a la ley 11 de bancarrota en los Estados Unidos, una semana después de haberse desvinculado de 1.400 de sus trabajadores como resultado de las consecuencias económicas de la pandemia.

Antes de la pandemia, LATAM volaba a 145 destinos en 26 países y efectuaba alrededor de 1,400 vuelos diarios.

El Capítulo 11 permite a una empresa que no está en condiciones de pagar sus deudas reestructurarse sin la presión de los acreedores.

El mes pasado, la compañía chileno-brasileña dijo que había reducido sus operaciones en un 95% debido a la crisis sanitaria global y a principios de mayo anunció cientos de despidos.