Agencias

El parlamento de Irak aprobó este domingo la resolución en la que se exige al Gobierno de ese país romper el acuerdo que tiene con Estados Unidos (EEUU) y expulsar a sus tropas de la nación árabe, decisión que se toma luego del ataque perpetrado por Washington, en el que asesinó al general iraní Qassem Soleimani, junto con otras personas.

En este sentido, el jefe del Gobierno de transición de Irak, Adel Abdul Mahdi, en un discurso ante el Parlamento del país declaró que EEUU ha violado las condiciones para la presencia de sus tropas en el territorio iraquí, ya que estas se limitan a entrenar a los militares iraquíes, reseñó Rusia Today (RT).

Igualmente, ha sugerido que el Parlamento establezca un calendario para la salida de las fuerzas extranjeras del país, y exhortó a los diputados a «estudiar todas las consecuencias antes de tomar cualquier decisión con respecto a la presencia estadounidense».

El primer ministro agregó que su Gobierno rechazó el asesinato del comandante Qassem Soleimani, cuando fue informado de la decisión de perpetrar el ataque aéreo minutos antes de que se llevara a cabo. «Estados Unidos nos avisó sobre los planes de asesinar a Soleimani minutos antes del ataque y lo efectuó sin nuestro permiso», expresó.

Por otro lado, el ministerio de Relaciones Exteriores de Irak presentó una queja oficial ante el Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas contra EEUU por el ataque en el que fue asesinado el general Soleimani.

La Cancillería catalogó el ataque como «una violación peligrosa» de la soberanía iraquí y de los términos de la presencia estadounidense en el país, por lo cual ha pedido al Consejo de Seguridad que condene los bombardeos y asesinatos.

El Pentágono confirmó la autoría del ataque, perpetrado con misiles, el cual fue efectuado «bajo la dirección» del presidente de EEUU, Donald Trump, y «tenía como objetivo disuadir futuros planes de ataque iraníes».

Por su parte, el presidente de Irán, Hasán Rohaní, declaró que Teherán y otras naciones de la región «vengarán» el asesinato de Soleimani y ratificó que esta acción hará que Teherán esté «más decidido» en su resistencia contra EEUU.