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Técnicos de Sismología Chile realizaron un informe sobre los movimientos sísmicos en las fallas de la Dorsal Huincul ocurridos entre los años 2015-2019. La zona se encuentra en pleno corazón de la explotación hidrocarburífera no convencional. Si bien aún no se pudo probar relación entre sismos y fracking por falta de estudios en el lugar recomiendan que se realice un seguimiento de campo. Autoridades de Neuquén anunciaron esta semana la instalación de dos sismógrafos para analizar la situación.
El grupo de Sismología Chile se ha transformado en la referencia de los análisis de los movimientos sísmicos en la zona de Sauzal Bonito, cercana al epicentro de la explotación de hidrocarburos no convencionales en Vaca Muerta. La organización no gubernamental que fue creada después del terremoto de Chile en 2010, para advertir a la población sobre cómo afrontar una situación de esa naturaleza, acaba de publicar el «Informe técnico N°2: Análisis de la sismicidad en la dorsal de Huincul durante el periodo 2015-2019» , en el que sistematiza los datos obtenidos hasta la fecha para que sirvan de base a estudios futuros. «Es necesario que esta situación se estudie, sobre todo por la población, la zona no está preparada para movimientos», explicó Joaquín Vásquez uno de los integrantes del departamento de analistas que firma el informe publicado la misma semana en que el gobierno neuquino anunciaba la instalación de los primeros dos sismógrafos.
El estudio se basa en la dorsal de Huincul que según los autores «es un sistema de fallas activas en un escenario tectónico transpressional, que es capaz de registrar sismos de pequeña y mediana magnitud». El informe destaca que los movimientos sísmicos registrados «pueden tener un impacto negativo en la población considerando el tipo de estructura que poseen algunas viviendas en localidades aisladas en la zona y otros factores sismológicos como la reducida distancia epicentral y la superficialidad de los focos que juegan un rol importante en el nivel de sacudimiento del suelo». También subraya que «los sismos evaluados presentan diferentes ubicaciones y orígenes, por lo que no toda la sismicidad presente se asocia a una misma falla, sino que son varias las fallas involucradas».
Los analistas buscaron calcular los parámetros de todos los eventos sísmicos ocurridos desde 2015 hasta la actualidad, determinar su origen y su relación con las fallas geológicas presentes en el área y su cercanía con los lugares donde se desarrolla fracking. Entre las conclusiones sostienen que hasta la fecha no es posible determinar que el fracking es el origen de la activación o reactivación de fallas, producto de que no existen estaciones de monitoreo, ni tampoco hay estudios en terreno que permitan establecer esa correlación. No obstante, el informe destaca que es posible evidenciar la cercanía de los epicentros sísmicos a los lugares donde se explotan hidrocarburos no convencionales. Según la publicación «el incremento de la actividad sísmica coincidió con el inicio y la intensificación de fracking en la zona, ambos fenómenos pueden relacionarse, hay casos comprobados de que la explotación o extracción de gas o petróleo puede causar aumento de tensión en segmentos de fallas lo que puede ocasionar su reactivación, sin embargo, aquellos casos documentados han presentado vigilancia, estudios en terreno, estaciones de monitoreo en tiempo real y GPS. Por lo tanto, para poder descartar o confirmar la relación entre estos fenómenos se necesitan más datos, y varios de ellos específicos».
Durante los primeros seis meses del 2019 registraron 120 sismos en el área de estudio, estos se concentraron en cercanías a Sauzal Bonito. En enero de 2019, un enjambre sísmico se presentó en la dorsal de Huincul con 37 movimientos en 30 horas.
Una de las apreciaciones preocupantes de los analistas es la existencia de un sistema de fallas normales en la zona de Sierra Barrosa y Sierra Barrosa Norte, ubicadas al sur del embalse Los Barreales. «Dentro de esta zona se ubican algunos sismos como el ML=3.1 ocurrido el 04/06/2018 o el ML=3.0 del 07/03/2019, sin embargo, tampoco existe mecanismo focal para relacionar estos sismos con el sistema de fallas», sostiene la investigación.
En el caso de Sauzal Bonito, el informe señala la preocupación por la situación de las construcciones. «La calidad de las viviendas o estructuras de este lugar no están preparadas ante eventos de esta naturaleza, las edificaciones están hechas de materiales no sismorresistentes, algunas de ellas de adobe, por lo que es esperable que, ante sismos de magnitud moderada o fuerte, cercanos a esta localidad y superficiales, se presenten daños en la infraestructura», precisa.
Controversias
Sismología Chile ha publicado regularmente registros de sismos en sintonía con las denuncias de la población de Sauzal Bonito, que se ubica a pocos kilómetros de varios desarrollo no convencionales, entre ellos, el que fuera estrella en 2018: Fortín de Piedra. Hace dos semanas, el miércoles 18 de junio a las 2 am, Sismología Chile detectó un sismo de 3,1 puntos que tuvo una profundidad de 13 kilómetros en el yacimiento El Mangrullo, quienes viven en Sauzal Bonito ratificaron el movimiento, pero la noticia fue desmentida por el titular de Defensa Civil de Neuquén Martín Giusti.
La organización le respondió Giusti subrayando la carencia de información oficial. «Consideramos que, sin registros instrumentales, no se puede desmentir fácilmente la ocurrencia de un sismo», señalaron desde Sismología Chile en un comunicado.
A mediados de 2018 comenzaron las denuncias de habitantes de Sauzal Bonito. Hasta el momento, el movimiento más fuerte se constató a principios de marzo y alcanzó los 4,8 grados. Esta semana comenzaron los análisis para instalar los primeros sismógrafos.