TeleSur
Las autoridades de México encontraron en 390 fosas clandestinas mil 418
cuerpos humanos y cinco mil 786 restos en el periodo comprendido de
2009 a 2014, de acuerdo con la investigación “Estudio Violencia y
Terror:
Con base en el informe, elaborado por el Programa de Derechos Humanos de
la Universidad Iberoamericana Ciudad de México y la Comisión Mexicana
de Defensa y Promoción de los Derechos Humanos, las fosas fueron
ubicadas en 23 de los 32 estados en los que se divide el país
latinoamericano.
El estudio concluyó que el hallazgo de las fosas clandestinas es una de
las evidencias más claras de la crisis de derechos humanos que prevalece
en México, donde la mayoría de casos quedan en la impunidad.
Cinco estados mexicanos (Guerrero, Jalisco, Chihuahua, Coahuila y
Tamaulipas) concentraron el mayor número de fosas, con el 62.66 por
ciento de las fosas registradas durante el periodo señalado.
La Secretaría de Gobernación reconoce que no se sabe el paradero de más
de 37 mil personas registradas como desaparecidas desde el año 2006
hasta finales de 2018.
En junio pasado, el Gobierno del presidente mexicano Andrés Manuel López
Obrador anunció un programa, dotado con 21 millones de dólares, para
identificar decenas de miles de restos humanos que son el resultado de
dos sexenios de violencia.
El dinero de destinará a homologar las bases de datos forenses en el
país y a crear cinco nuevos institutos forenses, entre otras acciones.
El subsecretario mexicano de Derechos Humanos de la Secretaría de
Gobernación, Alejandro Encinas, dijo al presentar el plan que «hay que
replantear el rumbo (…) que nos garantice el trato digno y la
identificación de los cuerpos que en este momento se encuentran en los
servicios forenses del país, en fosas comunes e incluso en fosas
clandestinas».
De acuerdo con el presidente López Obrador, los cuerpos y restos
hallados en las fosas son “la peor herencia que nos dejaron los
gobiernos anteriores».