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Chelsea Manning, la exsoldado y ex agente de inteligencia del Ejército de EE.UU. que suminitró miles de documentos secretos de las guerras de Afganistán e Irak a WikiLeaks, ha sido encarcelada este viernes por negarse a declarar ante un gran jurado en el caso que investiga al portal de filtraciones.

El juez de distrito Claude Hilton tomó la decisión después de una breve audiencia en la que Manning confirmó que no tiene intención de declarar sobre su divulgación de secretos militares en 2010. 

«Los procedimientos secretos favorecen al Gobierno»

La exsoldado sostiene que se opone al secreto del proceso del gran jurado, y que ya reveló todo lo que sabía ante la corte marcial en 2013. «Estos procedimientos secretos tienden a favorecer al Gobierno», declaró a la prensa antes de la audiencia. «Siempre estoy dispuesta a explicar las cosas públicamente«, añadió.

El juez dictaminó que la primera gran fuente de WikiLeaks permanezca encarcelada hasta que preste testimonio o hasta que el gran jurado finalice su investigación.

La abogada de Manning, Moira Meltzer-Cohen, calificó de «acto de tremenda crueldad» enviar a una exsoldado transexual a prisión debido a preocupaciones médicas y de seguridad. Sin embargo, la fiscal Tracy McCormick argumentó que la cárcel tiene experiencia en el manejo de presos transgénero y figuras públicas.

Manning confirmó que la investigación versa sobre la publicación por parte de WikiLeaks de documentos clasificados relacionados con las guerras en Irak y Afganistán en 2010. Medios estadounidenses también indicaron que la pesquisa se centra en Assange, asilado desde agosto en la Embajada de Ecuador en Londres desde 2012. Sin embargo, el juzgado de Alexandria no ha confirmado que WikiLeaks y Assange sean objeto de la investigación del gran jurado. 

  • En 2013 Manning fue condenada por un tribunal militar a 35 años de prisión por haber filtrado a WikiLeaks más de 700.000 documentos clasificados sobre la actuación estadounidense en las guerras de Irak y Afganistán.
  • Sin embargo, solo estuvo en la cárcel hasta el 17 de mayo de 2017, cuando recuperó su libertad gracias a una conmutación de pena firmada por el entonces presidente Barack Obama en su último acto al frente de la Casa Blanca.