El mecanismo de Cambio de Régimen
es una práctica militar con fines políticos estudiada desde hace
décadas. En el caso de Venezuela Nina Cross rastrea las maniobras
realizadas por el Gobierno Británico hasta encontrarse con escenarios
similares a los sirios. UK no actúa solo, los intereses corporativos son
trasnacionesles. Los países occidentales han aprendido mucho sobre
subterfugios. Trabajan en enjambre cuidándose muy mucho de no poner
todos los huevos en la misma cesta, que no se note mucho su presencia.
Los actores locales forman parte de una élite deslocalizada, altos
funcionarios, millonarios, mafiosos u hombres de paja desechables, a
caballo entre continentes, Davos
y al servicio de las corporaciones, para quienes su propia población no
son más que carne de cañón. Este es el breve análisis del apoyo oficial
del Gobierno Británico y lo que suelen hacer con el famoso 0’7% de
ayuda humanitaria.
Cuando un país no se doblega ante la voluntad de otro y es militarmente
fuerte como para no ceder ante las amenazas de las armas, el denominado
poder duro, poder bruto, o hard power, es necesario un proceso de
erosión que proporcione la correlación de fuerzas favorable para el
agresor. Se pone en marcha una serie de mecanismos y actores capaces de
transformar la situación mediante el llamado soft power, poder blando o
inteligente. Una mezcla de medidas políticas, sanciones económicas,
propagandas antisociales, operaciones psicológicas y presión
internacional, dirigidas por las centrales de inteligencia, en concreto
el pentágono, y los ministerios de exteriores en nombre de las
oligarquías. Entre las herramientas de soft power se incluye
financiación a la oposición, corrupción de funcionarios, sanciones a
terceros países, asfixia económica, guerra de divisas, intoxicación
mediática o sabotajes. Una técnica cara y a largo plazo, pero ni de
lejos tanto como una operación militar a gran escala.
El gobierno de Maduro apoltronado en el clientelismo sigue sin permitir
el empoderamiento de la población, tolera el cáncer corporativo que lo
está pudriendo, evita las expropiaciones a millonarios y terratenientes,
y huye de la autoproducción. Se refugia en el petróleo e hipoteca los
recursos. Rechaza movilizar a la izquierda latinoamericana y crear un
frente internacional. Queda mucho para que el pueblo venezolano sea
libre pero lo conseguirán. Ánimo al Pueblo Venenzolano en Lucha!
Salud! PHkl/tctca
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Traducción tarcoteca – British Aid to Venezuela: A Soft Power Tool Kit – Global Research 2.3.2019 por Nina Cross
Con Jeremy Hunt y Alan Duncan
dispuestos a derrocar al democráticamente elegido líder de Venezuela
Nicolás Maduro, para instalar a un neoliberal compatible, es buen
momento para ver la ayuda que el Foreign Office
FOC, Ministerio de Exteriores Británico, ha estado enviando a
organizaciones [de la oposición de ultraderecha] bajo las narices del
gobierno de Venezuela.
Idealmente, el público esperaría que los recursos destinados a la ayuda
se distribuyeran de manera no partidista y neutral. Sin embargo, a
través de exposición pública del apoyo de los gobiernos de
EEUU, el Reino Unido y la Unión Europea a la «oposición» en Siria,
comprendimos la determinación de los gobiernos occidentales en respaldar
lo que esencialmente era un frente de organizaciones no gubernamentales
ONGs que atendían a las necesidades de los actores extremistas, e
incluso terroristas, cuyos objetivos concordaban perfectamente con los
de los patrocinadores en la búsqueda del ‘cambio de régimen‘.
Teniendo esto en cuenta, debería ser gran motivo de preocupación que gran parte de los Fondos de Asistencia exterior del Reino Unido van a organizaciones antichavistas, mientras que el Gobierno del Reino Unido
apoya simultáneamente un intento de golpe de Estado contra el gobierno
de Maduro. Esta concurrencia de eventos no es una mera coincidencia, es
una práctica estándar. Los gobiernos del Reino Unido han estado haciendo
esto durante años, y con frecuencia en concierto con los EEUU y la UE.
En ciertos casos, la «Ayuda» se ha dirigido a la clase neoliberal
materialmente más acomodada para permitir la difusión de su influencia e
ideas.
La siguiente lista de organizaciones ha sido proporcionada por la Oficina Británica de Asuntos Exteriores y Commonwealth FOC
y forma parte de lo que se espera que sea una visión más amplia de toda
la ayuda extranjera reciente del Reino Unido a Venezuela.
El presupuesto total para este grupo de programas asciende
aproximadamente a £ 560,000 en aproximadamente 18-24 meses. Aunque las
sumas puedan parecer modestas, vale la pena señalar que el Reino Unido
canaliza su financiación a través de sociedades abiertas para las cuales
hay muy poca o ninguna transparencia para el público. Si bien las
cantidades pueden parecer pequeñas cuando se dan a grupos subsidiarios,
normalmente son mucho más grandes cuando se dirigen al cuerpo principal.
La contribución del Reino Unido también debe verse como una simple
rúbrica en una estructura más amplia de fondos occidentales. Dondequiera
que el Reino Unido envíe dinero, también hay una gran cantidad de
dinero de la UE y de los Estados Unidos, con fondos canalizados a los
mismos grupos venezolanos para «influir», pero también para dividir a la
sociedad venezolana en varias líneas sociales y políticas.
1) Fundación Westminster para la Democracia
La Fundación Westminster para la Democracia WFD ya ha sido identificada como una organización involucrada en actividades al interno del parlamento venezolano [un
lobby]. Incrustando su propósito en la retórica de democracia y de
derechos humanos, y afirmando que trabaja «a través de la brecha
política», de hecho, ha trabajado en su totalidad con la plataforma de
la oposición Mesa de Unidad Democrática (MUD), que consiste
principalmente en partidos de derecha, entre ellos la Voluntad Popular,
cuyo líder Juan Guaido se ha autoproclamado presidente interino de Venezuela.
A pesar de que la Oficina de Relaciones Exteriores del Reino Unido impuso sanciones
contra los líderes venezolanos y los acusó de comportamiento represivo e
ilegal, la Fundación para la Democracia de Westminster nos quiere hacer
creer que se le ha dado el privilegiado trabajo de instruir a la
división política, incluido el gobierno socialista, sobre cómo legislar.
Lo más probable es que haya colaborado con la oposición de derecha de
la Asamblea Nacional para socavar al gobierno. Dado que la legislación
es uno de sus objetivos declarados al trabajar con la Asamblea Nacional,
es muy posible que la Fundación para la Democracia de Westminster haya
ayudado a construir parte de la documentación antigubernamental
presentada con vehemencia en los últimos años.
-Transparencia Venezuela
Pero la Fundación Westminster para la Democracia no es la única «Ayuda» del Reino Unido que va a Transparencia Venezuela para impulsar la agenda del Ministerio de Asuntos Exteriores. Transparencia Venezuela es una rama de Transparency International, una ONG dedicada a «descubrir la corrupción en todas partes», y que recibe respaldo financiero de numerosos gobiernos, ONGs, Organizaciones Internacionales y fundaciones filantrópicas multimillonarias, entre ellas las fundaciones Open Society Foundationsde George Soros y Omidyar Network de Pierre Omidyar. La literatura de la organización afirma:
“Trabajamos junto con los gobiernos, las empresas y los ciudadanos para detener el abuso de poder, el soborno y los acuerdos secretos. Como movimiento global con una visión, queremos un mundo libre de corrupción «.
🔴 OUT NOW! We analysed 180 countries to see how they scored in the fight against #corruption. Check out your country’s score now! #CPI2018
— Transparency Int’l (@anticorruption) 29 de enero de 2019
Esta es una ONG muy bien financiada, que ha recibido grandes sumas del
Departamento de Desarrollo Internacional a lo largo de los años. Casi todos sus fondos provienen de la UE y Estados Unidos. Es interesante porque, al igual que otras herramientas de los gobiernos occidentales como Freedom House, que tiene un índice de libertad al que el Secretario de Relaciones Exteriores Jeremy Hunt hace referencia con frecuencia, proporcionan datos manipulados que los gobiernos occidentales pueden usar para justificar sus acciones. Si bien Transparencia Internacional tiene un índice de corrupción del país, no hay un índice de fondos de gobiernos occidentales liberales para armar a los yihadistas,
o que realizan ‘cambios de régimen’, o que interfieren en los asuntos
internos de otras naciones, o que abogan abiertamente por las dictaduras del Estado del Golfo que
cometen genocidio con la esperanza de aumentar las ventas de armas. Sin
embargo, Transparency International puede usarse para proporcionar munición política a los gobiernos occidentales. Promueve el uso de las Sanciones Magnitsky, creados por los EEUU pero que pronto estarán disponibles para su uso tanto para la UE como para el Reino Unido,
que probablemente se utilice contra objetivos mutuos. Como parte de su
función anticorrupción, el trabajo de Transparencia Venezuela está
diseñado para desacreditar a la Corte Suprema de Justicia, que denomina
«Injusticia Suprema», así como a las elecciones y al gobierno:
«Los juicios de la corte suprema, dominados por los intereses del partido gobernante, han golpeado la democracia de Venezuela y socavan los derechos de todos los ciudadanos. Por este motivo, un grupo de asociaciones civiles decidió lanzar este proyecto digital llamado «Suprema injusticia», con el propósito de visualizar las desviaciones del Poder Judicial y promover un debate que contribuya a mejorar la justicia en Venezuela.»
Mientras tanto, puede estar entre sus informes, pero no hay una
referencia significativa a la piratería del Banco de Inglaterra con el
oro venezolano, posiblemente debido a que Transparencia Venezuela recibe
fondos del Reino Unido. El hecho de que este grupo haya aceptado fondos
del Reino Unido durante la preparación de la postura intervencionista
del Reino Unido sobre el gobierno venezolano suscita preocupación, no
solo por el comportamiento ético de las sociedades civiles financiadas
por los gobiernos occidentales, sino por el comportamiento explotador
del Ministerio de Asuntos Exteriores británico. Transparencia Venezuela
ha recibido fondos de un gobierno hostil a los suyos y ha proporcionado
narrativas de corrupción y represión que ahora son útiles para sus
financiadores con fines de cambio de régimen.
Por qué se debe rechazar el apoyo de Gran Bretaña al presidente autoproclamado de Venezuela
2) Consejo Nacional de Promoción de Inversiones CONAPRI
– Ron Santa Teresa
Uno de los miembros de Transparencia Venezuela es Alberto Vollmer, millonario propietario de Ron Santa Teresa, una destilería de ron en Venezuela que ha logrado «prosperar» a pesar de la crisis económica.
Es miembro de The Interamerican Dialogue, una organización que una vez fue calificada como uno de los mejores think tanks de los Estados Unidos.
Está compuesto por neoconservadores estadounidenses e intervencionistas liberales como Richard Haass, jefe del Consejo de Relaciones ExterioresCFR y
asesor de los dos presidentes de Bush durante las guerras de Irak. El
año pasado, Haass expresó sus opiniones sobre Venezuela:
“América Latina ha evitado en gran medida la geopolítica y las guerras que han plagado a otras partes del mundo. Pero estas vacaciones de la historia han terminado».
Otro miembro es el ex político venezolano Moises Naim, ministro de industria y comercio en 1989. Presentó el paquete de reformas económicas del FMI que
condujo a las protestas del «caracazo» contra las políticas de libre
mercado. Durante las protestas se cree que murieron sobre 3,000 personas
bajo el gobierno de derecha. En una de sus publicaciones recientes, el Diálogo Interamericano deja muy claro que está completamente detrás de la eliminación de Maduro:
«La mediación ha sido utilizada repetidamente en los últimos años por el régimen de Maduro, cuando se enfrenta a un desafío serio, para ganar tiempo, dividir a la oposición y dispersar a los manifestantes. El gobierno de Guaidó constitucionalmente legítimo ha demostrado que no entretendrá tales tácticas en esta ocasión.»
Vollmer también es jefe del Consejo Venezolano para la Promoción de Inversiones (CONAPRI), ente receptor de «ayuda» del Reino Unido en los últimos años. Financiado por la Oficina de Relaciones Exteriores FCO para generar oportunidades económicas en Venezuela, su membresía está formada por multinacionales, como Shell, Nestlé e IBM.
-Empresas Polar-PepsiCo- Lorenzo Mendoza
El conglomerado de alimentos y bebidas Empresas Polar, una subsidiaria
de PepsiCo, también es miembro. Es la empresa privada más grande de
Venezuela y se ha descrita como «ostentadora de una hegemonía» sobre la producción de harina de maíz. Es propiedad del multimillonario Lorenzo Mendoza y ha estado implicada durante años en acumular productos y venderlos al mercado negro, una estafa llamada bachaqueo. El sistema ha generado una escasez generalizada y una crisis para los pobres, mientras que los mayoristas corruptos han obtenido enormes ganancias. Pero no es solo el acaparamiento en el que está implicado Mendoza: en 2015, se escuchó en una conversación filtrada con un ex político, Ricardo Hausman, discutiendo una posible intervención en la economía de Venezuela por parte del FMI.
El FMI fue rechazado por Venezuela en 2007. Mendoza también consideró
su posición frente a Maduro como un forastero en las elecciones del año
pasado.
Los miembros de CONAPRI, beneficiarios de la ayuda del Reino Unido,
forman un grupo que se beneficiaría enormemente de la destitución del
gobierno de Maduro.
CONAPRI es un ‘cheque de realidad’ para aquellos que compraron la
propaganda occidental de que Venezuela está colapsando por el fracaso
del socialismo. Muestra que la economía de Venezuela es básicamente una
economía capitalista vinculada e influenciada por corporaciones y
mercados globales a pesar de su programa socialista. Este es un problema
para la revolución bolivariana y un incentivo para que los gobiernos
occidentales impulsen su agenda neoliberal hambrienta de los recursos en
Venezuela, una agenda que ahora es flagrantemente intervencionista.
Otro firme favorito del Ministerio de Relaciones Exteriores de Venezuela
son los medios antigubernamentales. De esos muchos medios de prensa
antigubernamentales en Venezuela, la Oficina de Relaciones Exteriores ha
otorgado fondos a tres, todos los cuales promueven narrativas que
apoyan los pretextos estadounidenses para la intervención y el cambio de
régimen.
3) Efecto Cocuyo
Este es un medio creado por la periodista Luz Mely Reyes,
quien ganó el Premio Internacional a la Libertad de Prensa 2018.
Durante su discurso de aceptación, habló del miedo que sintió en 1992
cuando hubo un intento de golpe contra el gobierno de la época. Este
intento de golpe fue dirigido por Hugo Chávez. Su posición es
abiertamente partidista en virtud del hecho de que no mencionó sentir el
mismo temor durante la masacre de venezolanos asesinados a tiros bajo
el gobierno de derecha en 1998. Entonces no debería sorprender a nadie
que una periodista de la ‘sociedad civil’, al menos en parte financiada
por los gobiernos occidentales, ganara un premio mientras afirma que
Maduro es un dictador, dado que el premio es brindado por los mismos
gobiernos occidentales que están intentando activamente derrocar a ese
gobierno.
#SepaQue El vicepresidente de #EEUU, Mike Pence, propuso ante el Grupo de Lima:
– Congelar los activos de Pdvsa en los países de la región
– Transferir los activos al Gobierno de Guaidó
– Restringir la entrega de visas al círculo cercano de Maduro https://t.co/QEbn0VodJIpic.twitter.com/syCDRiy11L
— Efecto Cocuyo (@EfectoCocuyo) 26 de febrero de 2019
La postura pro-Guaido de Efecto Cocuyo es evidente, y se asemeja a los
esfuerzos de «medios de oposición» similares montados por las potencias
occidentales en zonas de guerra como el Aleppo Media Center en Siria, respaldado por el Ministerio de Relaciones Exteriores francés. Estas sucursales aparentemente ‘independientes’ actuaron como la principal fuente de imágenes y propaganda
para los medios de comunicación occidentales, y circularon reclamos de
brutalidad y represión por parte de las autoridades gubernamentales
durante la violencia que estalló en la frontera entre Colombia y
Venezuela cuando Guaido y sus partidarios se propusieron transportar lo
que se suponía era ayuda humanitaria a Venezuela el 23 de febrero.
Efecto Cocuyo informó:
«.. Fuerzas armadas leales a Maduro atacaron e hirieron a manifestantes desarmados que exigieron la entrada de suministros médicos y de alimentos en el país en las fronteras con Brasil y Colombia».
Pero pronto salieron a la luz pruebas que demuestran que los partidarios
de Juan Guaido intentaron forzar a los camiones a cruzar la frontera
hacia Venezuela, y que los activistas de derecha iniciaron actos de
violencia relacionados con cócteles Molotov.
Everyone from @marcorubio to @senfeinstein to Colombian President @IvanDuque claimed without evidence that Venezuelan national guard burned US aid on the Santander bridge.
But as I explain, all evidence suggests opposition guarimberos torched the aid: https://t.co/clwyxHPJEC
— Max Blumenthal (@MaxBlumenthal) 24 de febrero de 2019
The Empire’s shock troops: violent guarimberos who apparently torched US
aid trucks in a staged provocation yesterday are preparing more attacks
under the watch of Colombian police https://t.co/ZymRe2PXzi
— Max Blumenthal (@MaxBlumenthal) 24 de febrero de 2019
4) Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa (SNTP) (Unión Nacional de Trabajadores de la Prensa)
Sin proporcionar ninguna evidencia, el SNTP comparte un mensaje que
implica al gobierno venezolano en el grave delito de secuestro del
periodista Daniel Garrido.
Graves acusaciones de violencia financiada por el Estado están siendo
hechas por medios antigubernamentales, con referencia también a los
paramilitares. Es importante señalar que hay muchos grupos paramilitares
colombianos en Venezuela y hay una historia de oposición de derecha que utiliza a los paramilitares para sus fines políticos.
Noticias Telemundo repudia el secuestro y el robo del que fue víctima el periodista Daniel Garrido este #26Feb
Exige a Nicolás Maduro respeto por los reporteros en ejercicio dentro de #Venezuela y asegura que el «régimen político quiere silenciar a quienes informan». pic.twitter.com/6uE3JMgVWK
— SNTP (@sntpvenezuela) 27 de febrero de 2019
El apoyo del SNTP a Guaido es bastante claro en este post donde pide a
la gente que vea el concierto de Venezuela Live Aid del multimillonario
británico Richard Branson, y que derrote la censura de la prensa
impuesta por la «dictadura» de Maduro:
#AlertaSNTP | Para vencer la censura de la dictadura de Nicolás Maduro, entra a este link y sigue viendo el concierto #VenezuelaAidLive, en la frontera colombo-venezolana #CensuraEsDictadura#22Febhttps://t.co/M4BJygDuk9
— SNTP (@sntpvenezuela) 22 de febrero de 2019
5) Instituto Radiofónico Fe y Alegría.
El Instituto Radiofónico Fe y Alegría
es una red de educación que administra cursos de radio y medios, y
también tiene medios online. Este replica «operaciones de medios de
oposición» lanzadas por los Estados Unidos, Francia y el Reino Unido
contra Siria, incluida BBC Media Action en Siria.
El 23 de febrero publicó un hilo de tweets tras los eventos
y la erupción de violencia en torno a los camiones. Los tweets
sugirieron que las fuerzas gubernamentales estaban llevando a cabo
ataques innecesarios contra personas que esperaban ayuda humanitaria. No
mencionaron los grupos violentos que intentaron cruzar desde el lado
colombiano, o la lluvia de rocas y los cócteles Molotov lanzados contra la guardia nacional venezolana que protegía la frontera. Además, un artículo de Alegría y Fe sobre los sucesos del 23 de febrero
sugiere que los ataques violentos y los asesinatos cometidos en Ureña y
Santa Elena de Uairen fueron cometidos por matones encapuchados
seguidores Maduro. Termina con la idea de que Maduro bailaba en el
charco de sangre. Este es solo uno de los muchos ejemplos.
Violencia en la frontera fue “fundamentalmente” responsabilidad del Estado, según el Observatorio Venezolano de Violencia https://t.co/Xh0Pudtisepic.twitter.com/3QUK3dp2Z4
— Radio Fe y Alegría (@radiofeyalegria) 26 de febrero de 2019
Conclusiones
Hasta el momento, parece que la ayuda del Reino Unido a Venezuela está
diseñada para proteger el interés corporativo, dirigido a organizaciones
neoliberales. También está dirigida a individuos y grupos del aparato
liberal que se oponen ideológicamente a la revolución bolivariana y al
chavismo, lo que permite al Reino Unido establecer redes dentro de
Venezuela para servir a los intereses de las corporaciones británicas.
La ayuda del Reino Unido a Venezuela tiene todas las características de un kit de herramientas de ‘poder suave’,
diseñado para acelerar lo que ahora es una desnuda agenda imperialista.
Una simple mirada a la ayuda del Reino Unido destinada a Venezuela
expone los dobles estándares del gobierno del Reino Unido. Podríamos
siquiera imaginarnos que Rusia se estableciese en medio mundo, o incluso
dentro del Parlamento del Reino Unido con el pretexto de «ayudar al
Partido Laborista» con legislación, o que Irán pudiera financiar al
Morning Star y que luego apoyase el intento de China de derrocar al
gobierno de May e instalará a un actor político desconocido y no elegido
para que se convirtiera en Primer Ministro – se considerará una crisis
internacional. Sin embargo, el Ministerio de Asuntos Exteriores
británico está haciendo exactamente eso; inmiscuirse con impunidad en
Venezuela, demostrando una vez más que su «sistema internacional basado
en reglas» es un concepto relativo, o peor aún, una ficción y una
fantasía que solo existe para un pequeño grupo privilegiado en
posiciones de poder; simplemente un eufemismo para la supremacía.