AVN
California, Nuevo México, Oregon, Hawai y
Minesota, son los cinco estados de EEUU que evalúan la posibilidad de
demandar al presidente estadounidense Donald Trump por su criticada
decisión de declarar una emergencia nacional para financiar un muro en
la frontera con México, según publicó la Agencia Informativa
Latinoamericana, Prensa Latina.
‘Definitivamente es inminente. Estamos preparados, sabíamos que algo
como esto podría suceder’, afirmó el fiscal general de California,
Xavier Becerra, en el programa dominical This Week al informar que junto
a su estado se sumarán otros cuatro.
Al ser consultado por la anfitriona del programa el fiscal Becerra advirtió que Trump no saldrá inmune de este trance.
La agencia consideró que las críticas al gobernante por este tema se produjeron desde el mismo momento en que anunció la medida.
Es de destacar que nueve miembros del Congreso que representan distritos
a lo largo de la frontera sur, ocho demócratas y un republicano,
ninguno apoya la declaración del presidente, según This Week,
En el Capitolio, mientras tanto, la formación azul está preparando una
resolución para revocar la orden, y un número creciente de republicanos
desafían a Trump, al plantear que no hay crisis que justifique violar la
Constitución.
La Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU), expresó el pasado
jueves, que el anhelo del presidente Trump por un muro en la frontera
sur no se puede justificar llamando a una emergencia nacional.
El director ejecutivo de la citada unión, Anthony Romero, comentó que ‘Esto sería un claro abuso del poder presidencial’.
Recuerda la agencia que, a los fines de evitar otro cierre parcial del
gobierno, el jefe de Estado firmó la ley de gastos a partir de un
proyecto legislativo bipartidista y bicameral negociado que solo le
asignaba para la cuestión fronteriza mil 375 millones de dólares para
levantar barreras físicas y no una pared de concreto.
Recoge finalmente la comunicación que Trump ya había amenazado durante
semanas que recurriría a la emergencia nacional si el Congreso no
aprobaba los cinco mil 700 millones de dólares en fondos para el muro
que él exige, pasando por encima a consecuencias políticas, legales y el
Congreso.