Agencias
La madre de Osama bin Laden, Alia Ghanem, aseguró que su hijo, presunto autor intelectual del ataque a las Torres Gemelas de Nueva York, hace casi 17 años, era «muy buen muchacho» hasta que conoció en la juventud a gente «que le lavó el cerebro».
En una entrevista con el diario británico The Guardian, Ghanem reconoció que ha tenido «una vida muy difícil» y describió a Osama como «un niño tímido, pero bondadoso», que la quería mucho.
«La gente en la universidad lo cambió. Se convirtió en una persona totalmente diferente. La verdad es que era un niño muy bueno hasta que conoció a una gente que, cuando tenía 20 años, le lavó el cerebro», explicó Ghanem en su casa en Yeda (Arabia Saudita), sentada junto a los hermanos de Osama, Ahmad y Hassan, y su segundo marido, Mohammed al-Attas.
«Se podría decir que estaba prácticamente en una secta. Yo le decía que no se juntara con ellos y él nunca me admitía lo que hacían realmente, porque me amaba mucho», añadió la madre.
Bin Laden se radicalizó mientras estudiaba economía en la Universidad Rey Abdulaziz de Yeda, donde conoció a Abdullah Azzam, un miembro de la Hermandad Musulmana que más tarde fue exiliado de Arabia Saudita.
«Nunca podría haberme llegado a imaginar que se convertiría en yihadista. No quería que sucediera nada de esto. ¿Por qué lo tiraría todo por la borda así?», se preguntó la madre, quien creció en la ciudad siria de Latakia y se trasladó a Arabia Saudita a mitad de la década de 1950. Alia se divorció del padre de Osama en 1960, tres años después del nacimiento de su primer hijo, y más tarde se casó con Mohammed al-Attas. La familia afirma que la última vez que vieron a Osama fue en las inmediaciones de la ciudad afgana de Kandahar en 1999, año en el que lo visitaron en dos ocasiones. «Su base estaba cerca del aeropuerto que capturaron de los rusos. Estaba feliz de recibirnos y de enseñarnos todo. Incluso hicimos una fiesta e invitamos a todo el mundo», recordó Ghanem.
Uno de los hermanos de Bin Laden, Ahmad, aseguró, por su parte, que su madre «se niega a culpar» a Osama del ataque terrorista a las Torres Gemelas, del que responsabiliza a su círculo cercano. «Lo amaba tanto que no es capaz de culparlo. Echa la culpa, sin embargo, a su círculo cercano. Ella sólo conoció a Osama de niño, el que todos vimos, y no llegó a ver su lado yihadista», comentó.