Agencias
La canciller alemana Ángela Merkel describió el domingo 10 de junio la conflictiva cumbre del Grupo de los Siete con el presidente estadounidense Donald Trump como una experiencia “preocupante” y “deprimente”, y advirtió que los gobernantes europeos no “permitirán abusos” en el comercio.
En entrevista con la televisión pública alemana, la gobernante reconoció que el resultado de la reunión “no fue la gran cosa”. “He hablado de una experiencia preocupante, que para mí es mucho”, agregó.
Merkel, el presidente francés Emmanuel Macron y los otros gobernantes que integran el G-7 chocaron con Trump debido a los aranceles al acero y el aluminio, así como la decisión del mandatario de retirar a Estados Unidos del acuerdo con Irán que restringe el programa nuclear de Teherán.
Los miembros del grupo lograron concertar una declaración común en la que reconocieron estar en desacuerdo en algunos puntos, pero Trump rechazó el documento en un tuit después de retirarse de la cumbre.
Merkel señaló que “rechazarlo en un tuit fue, por supuesto, preocupante y también un poco deprimente”. Dijo que la Unión Europea “actuará” contra las medidas comerciales estadounidenses, que según los gobernantes del bloque contravienen las normas de la Organización Mundial de Comercio.