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Los informes de un presunto ataque con gas en la ciudad siria de Duma son “noticias falsas” destinadas a justificar posibles ataques contra Siria, dijo Moscú. Advirtió sobre “consecuencias nefastas” en caso de cualquier interferencia militar.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia denunció los últimos informes sobre un ataque químico que supuestamente afectó a decenas de civiles en la ciudad de Duma controlada por militantes. Él dijo que los informes eran otro ejemplo de una “serie continua de noticias falsas sobre el uso de cloro y otros agentes químicos por parte de las fuerzas gubernamentales”.
El ministerio señaló que la fuente de los informes fue el notorio grupo de “defensa civil”, los Cascos Blancos, que ha sido acusado repetidamente de tener vínculos con terroristas, así como otros grupos con base en EEUU y el Reino Unido.
Rusia ha advertido sobre un ataque químico de falsa bandera que se está preparando en los últimos meses, dijo el ministerio. Aquellos que no están interesados en un arreglo político genuino de la crisis siria están tratando de complicar la situación sobre el terreno, agregó.
“El objetivo de esta … especulación sin fundamento es proteger a los terroristas y … a la oposición radical que se niega a participar en un [proceso] de asentamiento político, así como a justificar potenciales ataques militares desde el exterior”, dijo el comunicado. Luego advirtió que cualquier interferencia militar en Siria bajo “pretextos extravagantes o fabricados” sería “absolutamente inaceptable” y podría llevar a “consecuencias nefastas”.
Mientras tanto, los informes de varios activistas vinculados a los militantes sobre el supuesto incidente químico en Duma parecen haber provocado una nueva ola de histeria en Occidente. El presidente de los EEUU, Donald Trump, se apresuró a denunciar el ataque no confirmado como una atrocidad “sin sentido” y un “desastre humanitario sin ningún motivo”. También advirtió que los responsables del presunto ataque “pagarán un alto precio”.