Agencias
Este lunes el papa Francisco llegará a Chile, donde visitará Santiago y las ciudades de Temuco e Iquique, en medio de ataques a cuatro iglesias católicas y amenazas contra el sumo pontífice.
Cuatro iglesias fueron atacadas con artefactos explosivos en la región Metropolitana de Chile desde el pasado viernes, los atacantes han dejado mensajes contra el sumo sacerdote. «Papa Francisco las próximas bombas serán en tu sotana», decía uno de los panfletos hallado por funcionarios de la policía y Fiscalía chilena, quienes investigan el hecho, reseñan medios chilenos.
Según un estudio de opinión pública de Latinobarómetro en 18 países de América Latina, Chile es el país que peor evalúa al Papa, cuenta con menos católicos y confía menos en la Iglesia católica.
Mientras que el promedio de los habitantes latinoamericanos califica al Papa con una nota 6,8 de 0 a 10, en Chile le pusieron la nota más baja de la región con un 5,3. Como referencia, en Argentina le otorgan un 6,6 y en Perú con un 6,8, cita el portal chileno ADNradio.
El Papa estará desde el 15 hasta el 18 de enero, de ahí partirá a Perú en donde estará hasta el 21 del mes en curso.
Después de 30 años, el papa Francisco es el segundo líder de la Iglesia Católica en visitar Chile.
El martes, Francisco iniciará una muy intensa actividad que comenzará con una visita a la presidenta Michelle Bachelet en el Palacio de La Moneda. A media mañana oficiará una misa en el Parque O’Higgins -que se prevé multitudinaria-, el mismo sitio donde la celebró hace casi 31 años Juan Pablo II y durante la que se produjeron incidentes entre manifestantes que protestaban contra la dictadura de Augusto Pinochet y los carabineros.
Por la tarde, visitará una cárcel de mujeres y luego estará con obispos, religiosas y seminaristas en la catedral y más tarde, en el santuario del Padre Hurtado, con sacerdotes jesuitas y con carecientes.
Entre sus actividades el Papa también se reunirá con la comunidad Mapuche, quienes confían en visibilizar la lucha de esta comunidad primigenia por su tierra y lograr que se reconozca como justa.