eldestapewebEl ministro de Defensa Oscar Aguad junto al presidente Mauricio Macri, el jefe de Gabinete Marcos Peña y el canciller Jorge Faurie habían presentado hace tan solo 3 meses un pedido especial al Senado de la Nación para realizar un ejercicio en conjunto entre la Armada nacional y la Marina de Brasil, el cual consistía en «la simulación de una emergencia de un submarino posado en el fondo del mar» e «imposibilitado de salir a la superficie».

El Destape tuvo acceso al expediente que ingresó al Senado el martes 25 de julio, y que contó con su aprobación, pero no el de la Cámara de Diputados, luego que la sesión en la que se trataría el proyecto fuera suspendida por un escándalo protagonizado entre Elisa Carrió y Margarita Stolbizer.

En el mismo, el ministro de Defensa solicitaba un permiso especial al Congreso para realizar un «ejercicio combinado de adiestramiento en el mar, junto a la marina de la República Federativa de Brasil», para el cual se utilizaría un submarino «tipo ARA Santa Cruz», gemelo del ARA San Juan, actualmente desaparecido con 44 tripulantes a bordo.

Además, allí se detallaba que el lugar del ejercicio sería en «aguas de la zona económica exclusiva de la República de Brasil o aguas de la zona económica exclusiva de la República Argentina», lugar donde se reportó por última vez la embarcación.

El objetivo del ejercicio se basaba en la simulación de una emergencia de un submarino posado en el fondo del mar, imposibilitado de salir a superficie: «Debe ser buscado, localizado y auxiliado por el resto de las unidades navales participantes», y contaba con una duración de entre 7 y 14 días, según lo solicitado por el ministro de Defensa, Oscar Aguad.

Además, en el mismo pedido, la Armada también solicitaba emplear un buque de salvamiento de submarino, y buzos para la evacuación del personal de la nave siniestrada. «El costo será cubierto con fondos presupuestarios de la Armada Argentina y era de $2.043.144», detallaba el pedido realizado al Senado en julio pasado.