Martin Shkreli alcanzó la fama en 2015 cuando la empresa farmacéutica que lideraba subió más de 5.000% el precio de un medicamento para personas con el sistema inmune debilitado.
En aquel entonces, fue apodado el “hombre más odiado de Estados Unidos” y se convirtió en el rostro de lo que muchos denuncian es “la tiranía farmacéutica”.

Luego de un mes de juicio en Nueva York, este viernes Shkreli fue declarado culpable de tres de ocho cargos.
El mediático juicio culminó con el empresario de 34 años condenado por defraudar a inversores con su fondo de alto riesgo y por robar a la compañía farmacéutica que supo dirigir, Retrophin Inc, para pagarle a dichos inversionistas.
Tras salir de los tribunales, Shkreli dijo: “Esto fue una cacería de brujas de proporciones épicas”.

“Capaz que encontrar uno o dos palos de escoba, pero al final del día nos absolvieron de los cargos más importantes del caso y estoy encantado de informárselos”.

El juicio no está relacionado con la espectacular suba del fármaco Daraprim, el mejor tratamiento para una infección parasítica relativamente rara conocida como toxoplasmosis.

Personas con sistemas inmunes debilitados, como los pacientes con sida, dependen de este medicamento que pasó de costar US$13,50 a US$750 por pastilla cuando la compañía de Shkreli compró los derechos.