Según un asesor de la primer ministra de Reino Unido, Theresa May, el mandatario estadounidense le notificó a través de una llamada telefónica a May que no quería viajar al país «si el pueblo británico se opone».
La decisión de Trump resultó «sorpresiva» para la primera ministra.
May invitó a Trump el pasado enero al país, en nombre de la reina, y el mandatario estadounidense había aceptado «encantado». El viaje estaría pautado para el último trimestre de este año. Sin embargo, la imagen del presidente estadounidense se ha visto envuelta en críticas de los británicos tras una disputa con el alcalde de Londres, Sadiq Khan.
Trump criticó la gestión del alcalde con respecto a los últimos atentados en el país, por esto más de 1.800.000 personas han rechazado a través de las web del Parlamento británico la visita del jefe de Estado estadounidense.