Quito, – El vicepresidente de Ecuador, Jorge Glas, alertó hoy sobre un golpe de Estado en marcha y ataques contra colaboradores cercanos, bajo el pretexto de querer vincularlo con la corrupción y desacreditar así su imagen.
En entrevista con la emisora Radio Ciudadana, Glas aseguró que ‘sus manos están limpias’ de cualquier acción ilícita y señaló que la constructora brasileña Odebrecht, investigada por pagos de coimas, tiene claras intenciones de afectar a la administración nacional.
A su juicio, existe una estrategia en marcha en su contra y un claro proceso de destrucción de imagen.
Según precisó, ‘Glas para Odebrecht representa un perjuicio probablemente de 400 millones de dólares’. Eso debido a proyectos que le quitaron a la empresa, la detención de pagos por 100 millones de dólares, un contrato adjudicado y luego no firmado por tener valor muy alto de unos 200 millones y por hacerlos pagar otros 80 millones, entre otras razones.
Asimismo, recordó el vicemandatario que pidió ser recibido por la Asamblea Nacional (Parlamento) para aclarar cualquier situación, pero no lo llamaron porque no existe ninguna prueba en su contra, dijo.
Al respecto, acotó Glas que la justicia debe investigar a profundidad y actuar, algo que puede ser doloroso para su familia, pero su responsabilidad es con 16 millones de ecuatorianos y la obligación es de respaldar la pesquisa.
En ese sentido, pidió al sector judicial actuar con todo la fuerza requerida.
Al mismo tiempo, confirmó que acudirá a la Comisión de Fiscalización del máximo órgano legislativo por iniciativa propia para exponer el caso, tras rechazar acusaciones de presunta responsabilidad política, lo cual, aseveró, solo responde a que los detractores de la Revolución Ciudadana no han encontrado nada en su contra.
‘Mi responsabilidad política es haber cambiado la matriz energética y haber comenzado la matriz productiva, tener ocho hidroeléctricas y soberanía energética’, enfatizó.