almanar.com.lb.- El Ejército sirio y sus aliados han lanzado una campaña militar destinada a liberar el desierto de Este del país del grupo terrorista wahabí EI.
Bautizada como operación Al Fayr al Kubra, ésta es la campaña más importante. Ella busca destruir las capacidades ofensivas y defensivas del EI en el centro y sureste del país.
En la noche del jueves al viernes, el Ejército sirio bombardeó un enorme convoy formado por varias decenas de vehículos del grupo wahabí EI en la región del triángulo de Zaza, en el Este de la provincia de Homs.
En estos últimos días, las fuerzas regulares han logrado liberar todo el Sur de la provincia de Homs. También han llevado a cabo un avance muy importante en el Este de la misma.
Según Medios de Guerra, son casi 5.000 km2 los que han sido liberados en la región que une Sabea Biar con la ruta Damasco-Bagdad. De ahora en adelante, todo el centro de Siria está al abrigo de los ataques del EI.
La ruta que une Palmira con Damasco ha quedado también completamente asegurada.
El Ejército sirio ha aislado asimismo a las milicias atrapadas en el Qalamún oriental, incluyendo entre otros al grupo Yaish al Islam, apoyado por Arabia Saudí. Esto ha cortado sus comunicaciones con el desierto del Levante y el desierto de Homs.
La mina de fosfatos situada en el pueblo de Janaifis ha sido también liberada.
Según AFP, el Ejército sirio progresa en el desierto no sólo frente a los grupos takfiris sino también frente a los grupos rebeldes apoyados por EEUU.
El desierto sirio cubre un territorio de cerca de 90.000 km2 y se ha convertido desde el principio del mes pasado el principal campo de batalla de la guerra.