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30 de marzo de 2017.- México es el tercer país más peligroso para los periodistas tras Siria y Afganistán, en marzo ha vivido un incremento dramático de la violencia, con el cuarto ataque contra un periodista en un mes, a lo que activistas atribuyen a una creciente “impunidad” en ese país.

El jefe de redacción de un diario del estado de Veracruz, en el este del país, fue tiroteado “casi a quemarropa” cuando regresaba a su domicilio de madrugada y se encuentra hospitalizado en estado muy grave, informó Jorge Morales, secretario ejecutivo de la Comisión Estatal para la Atención y Protección de Periodistas.

Armando Arrieta, de 51 años, trabaja desde hace más de dos décadas en el diario La Opinión de la ciudad de Poza Rica. No se encontraba todavía bajo ningún sistema de defensa a periodistas amenazados, aunque “estaba en proceso de valoración de ingresar a un mecanismo de protección federal”, precisó Morales.

La fiscalía de Veracruz anunció que abrió una investigación que “concluirá hasta llevar al culpable de estos hechos ante las autoridades”. Refiere la agencia AFP.

La Procuraduría General, a través de su fiscalía para la atención de delitos contra la Libertad de Expresión (FEADLE), también participa en las indagatorias y desplazó a personal a Veracruz.

Pero estas investigaciones en contadas ocasiones logran identificar a los responsables y la fiscalía que atiende los delitos contra periodistas sólo ha conseguido castigo para los responsables en dos de 802 casos que ha llevado.