El servicio postal privatizado dejó de pagar el canon obligatorio en 2000 por aducir que las otras compañías hacían que el negocio pierda rentabilidad.
«El 8 de noviembre pasado, presenté ante el fiscal Federico Delgado la octava ampliación de mi denuncia contra Mauricio Macri por evasión y lavado de dinero. Allí aporte la información que figura en el Informe final de la Comisión Especial Investigadora sobre Fuga de Divisas de la Cámara de Diputados», narró el legislador nacional Darío Martínez a Tiempo Argentino. Entre las empresas que fugaron divisas en 2001 antes del corralito figura el grupo Macri con U$S 58 millones.
La empresa madre, Socma Inversora SA remitió al extranjero U$S 9.316.000, la misma cifra que apareció en la offshore bahameña Fleg Trading Ltd y que luego ingresó en el circuito formal en Brasil. Por esta operación que se configura como lavado de dinero, el Presidente está investigado por Delgado y el juez Sebastián Casanello.
El resto de las filiales de la familia Macri también envió dinero al exterior. Yacylec transfirió U$S 10.821.000. «Esta empresa de energía era del propio Mauricio, pero quiso hacer un pase mágico para desprenderse de ella y así evitar un conflicto de interés, al venderla en febrero del año pasado. Sin embargo, el truco se descubre fácil ya que se la vendió a la firma Sideco Americana SA; o sea que se la se vendió a sí mismo, ya que él es accionista de la sociedad compradora», explicó Martínez.
Además, Socma Americana SA fugó U$S 6.415.314 y Sideco Americana U$S 27.128.913. Mauricio Macri era el vicepresidente de Socma en aquella época, por lo que el diputado sostiene que no pudo no haberse enterado de las operaciones.