El presidente electo de EE.UU. Donald Trump ya casi ha llenado todas las carteras de su gabinete. Las nominaciones han causado controversia y preocupación, especialmente en algunas secretarías y agencias que están ligadas al quehacer laboral y medio ambiental, tales los casos de la Secretaría de Trabajo como la agencia de protección del medio ambiente.
Ha generado reacciones de oposición la nominación de Scott Pruitt y Andy Puzder a la agencia de Protección del Medio Ambiente y al Departamento de Trabajo, respectivamente.
Puzder, ejecutivo de la industria de comida rápida, se opone al incremento del salario mínimo y a extender beneficios laborales, entre otros antecedentes.
Por otra parte Scott Pruitt, vinculado a la industria de combustibles fósiles, rechaza fervientemente las recomendaciones científicas sobre el calentamiento global y ha desatado la indignación de sectores medioambientalistas.
Scott Pruitt también ha demandado a la misma agencia de la cual será director, por regulaciones que limitan la emisión de carbono. Su nominación deja la duda sobre si la administración Trump cumplirá los acuerdos de París sobre los gases de efecto invernadero.
Hasta el momento se han llenado catorce puestos de gabinete, además de las tres carteras más cercanas al presidente. A diferencia de la administración Barack Obama, existe un vacío de representación latina.
Ambos nominados deben pasar por el proceso de confirmación en el senado; dada la mayoría republicana en esa instancia congresal, se da por descontada su ratificación.