«La política de EEUU en los últimos 10 o 15 años demuestra que las así llamadas ‘revoluciones de colores’ se han convertido en un elemento clave de su política exterior. Raúl Castro debería estar en guardia», opinó Igor Morózov, miembro del comité de relaciones internacionales del Senado ruso.
El senador expresó en una entrevista con el medio ruso NSN su opinión sobre el futuro de Cuba después de la muerte de Fidel Castro Ruz.
Preguntado sobre la perspectiva de las relaciones entre Rusia y la isla tras la muerte del líder cubano, Morózov señaló que la actitud de Rusia sigue siendo la misma, es decir, el país eslavo continuará desarrollando la cooperación en un amplio abanico de esferas.
«Rusia seguirá fortaleciendo sus relaciones con la Isla de la Libertad [como se conoce a Cuba en Rusia]. Vamos a desarrollar relaciones económico-comerciales. Esperamos que las autoridades cubanas, por su parte, continúen promoviendo estas relaciones, incluyendo la cooperación técnico-militar», subrayó el político ruso. Partidarios de la integración europea de Ucrania, en enfrentamientos con unidades de policía, en el centro de Kíev, © Sputnik/ Andrei Stenin La verdad que oculta Kiev sobre los sucesos que cambiaron el rumbo de Ucrania en 2014 En cuanto a la política de EEUU hacia Cuba, el senador ruso advirtió a la nación isleña de la influencia norteamericana en los acontecimientos que sacudieron Ucrania en 2014, durante el Maidán.
«Sin duda, los estadounidenses intentarán utilizar los métodos del Maidán ucraniano [en referencia a los disturbios que llevaron al violento cambio de poder en Ucrania] para aplicar esta experiencia en Cuba», destacó.
«Con Trump en el poder, las relaciones Cuba-EEUU podrían experimentar un nuevo encontronazo. Todo depende de la dirección de la política exterior que va a elegir Trump. Ahora está formando un equipo muy contradictorio», concluyó el senador.