La provincia de San Luis, decretó a través de su gobernador, Alberto Rodríguez Saá, tres días de duelo provincial por la muerte del líder de la Revolución Cubana, Fidel Castro, por lo que las banderas nacionales y provinciales se mantienen a media asta.
La decisión fue adoptada a través del decreto 7734, en el que se resaltó que «el gobierno de la provincia de San Luis mantiene estrechos vínculos de cooperación con la República de Cuba».
La decisión responde a unas estrechas relaciones que mantuvieron los hermanos Rodríguez Saá con el histórico dirigente cubano a lo largo de las últimas tres décadas. De hecho, según informó la Agencia de Noticias de San Luis, el gobernador de la provincia se puso en contacto por teléfono con el embajador cubano en la Argentina, Orestes Pérez, donde expresaron sus condolencias.
«Recordaron los vínculos que unieron a lo largo del tiempo a San Luis y Cuba, desde la VIII Conferencia Cumbre del Movimiento de Países no Alineados, celebrada en Harare, capital de Zimbabwe, en septiembre de 1986, cuando la delegación argentina estuvo encabezada por el entonces presidente Raúl Alfonsín y a la que Rodríguez Saá asistió en carácter de senador nacional (…) En aquella ocasión, Rodríguez Saá y Castro mantuvieron una reunión privada», explicó la agencia de noticias puntana.