Mohamed Mondher Lahouaiej-Bouhlel, que reside en Túnez, reveló que en el 2004 llevó a su hijo al psiquiatra porque siempre estaba solo y deprimido.
Agencias
17-07-16.- El padre del autor de la masacre de Niza, que la noche del jueves provocó al menos 84 víctimas mortales, aseguró este viernes a la emisora “RTL” que su hijo, Mohamed Boulhel, tenía una grave enfermedad psiquiátrica, era inestable y a veces violento. En la entrevista realizada en su casa de Msaken, en Túnez, el hombre mostró la fotocopia de una receta médica que se remonta a 2004.
Fue al psiquiatra. “Pasó períodos difíciles. Le llevé a un psiquiatra, tomó los medicamentos y dijo que tenía una enfermedad verdaderamente muy grave”, indicó Mohamed Mondher Lahouaiej-Bouhlel a la emisora gala, aunque no especificó qué le diagnosticaron.
Inestable y violento. Mohamed, según su padre, era inestable, a veces violento, y desde que se mudó a Francia estaba poco en contacto con ellos y no les había visto en cuatro años. En tanto a declaraciones a la agencia de noticias AFP recordó que “de 2002 a 2004 tuvo problemas que le provocaron una depresión nerviosa. Se volvía colérico, gritaba, rompía todo lo que se encontraba por delante”. También contó que por aquel entonces la familia lo llevó al médico, que le recetó medicamentos contra los ataques de nervios y que estaba “siempre solo, siempre deprimido” y no quería hablar.
No era religioso. Según Mohamed Mondher su hijo no tenía “ningún vínculo con la religión”. “No rezaba, ni ayunaba, bebía alcohol y hasta se drogaba”, dijo. “Nosotros también estamos conmocionados” con lo ocurrido, añadió el padre.
El último contacto. La última vez que les llamó, la semana pasada, fue con motivo del final del ramadán. “Saludó a todo el mundo, eso es todo. No notamos nada extraño. Todo lo que decía era normal”, concluyó el padre, al que le cuesta creer que sea realmente el autor del atentado.
El atentado. El terrorista arrolló con un camión a decenas de personas que habían asistido a los fuegos artificiales de la Fiesta Nacional francesa en Niza y disparó contra unos policías que intentaron detener su vehículo, y que finalmente lograron abatirlo. Boulhel, que no estaba fichado como sospechoso de terrorismo o radicalización, tenía varios procedimientos judiciales abiertos, pero solo había sido condenado una vez, el pasado marzo a seis meses de cárcel exentos de cumplimiento, por una disputa de tráfico.
