Agencias

Brasilia, 31 demarzo 2016. – Por seis votos a dos la más alta corte del país avaló la decisión que había sido adoptada en forma individual por el relator del proceso, Teori Zavascki, quien cuestionó además la decisión de Moro de divulgar escuchas telefónicas entre el ex presidente y su sucesora, Dilma Rousseff, y otros políticos con fueros.

La decisión no resuelve sobre la designación del expresidente Lula como jefe de ministros del gabinete de Rousseff, sobre la cual pesa una medida cautelar que mantiene suspendido la asunción hecha por el juez de la corte Gilmar Mendes, quien participa en Lisboa de un seminario.
 

El Supremo Tribunal Federal deberá analizar el expediente en la que se investigan si constructoras vinculadas al caso Petrobras tienen nexos con dos propiedades, un apartamento en la playa de Guarujá y una quinta en la ciudad de Atibaia, ambos en el estado de Sao Paulo.

Zavascki fustigó al juez Moro por haber divulgado conversaciones telefónicas de Lula con personas con fueros, algo que no debe revelar ninguna instancia, salvo la máxima corte.

La presidenta Rousseff fue interceptada y su conversación con Lula divulgada.

«Eso incendió el país» dijo el pasado 16 de marzo otro juez, el ministro Marco Aurelio Mello, en otra crítica al magistrado, que es reivindicado por las manifestaciones opositoras debido a que descubrió la mayor red de corrupción encontrada en una empresa pública como Petrobras y un cartel de constructoras que pagaban sobornos para pagar contratos y financiar la política.

La conversación de Lula con Rousseff puede ser invalidada como prueba, según Zavascki,porque la conversación fue grabada después de que el propio Moro decidió el fin de las investigaciones.