Este domingo 22 de noviembre, Argentina vivió una jornada democrática para elegir al Presidente que asumirá la dirección de la República en el período 2016 – 2020.

Sobre ese proceso democrático (que esperamos no sea el último que se viva en democracia), hay que realizar un análisis a nivel regional, porque indudablemente afecta el proceso de integración latinoamericano y sobre todo suramericano.

Indudablemente la victoria del candidato de la oposición Macri sobre el oficialista Scioli es un golpe duro a la región por la importancia de ésta nación en los organismos de integración regional.

Scioli que intentaba proseguir con la política iniciada por Nestor Kirschner y continuada por la Presidenta Cristina Kirschner, perdió las elecciones por un margen que supera los 700.000 votos según los datos suministrados por los medios de comunicación nacional e internacional, ante el candidato de los Estados Unidos de Norteamérica, léase bien, “norteamérica”, más allá que su denominación oficial y sus siglas hagan referencia al continente americano en su totalidad, ya que americanos somos todos los que hemos nacido en ésta plataforma continental con las variantes reconocidas por el derecho interno de cada nación americana, sin embargo, tal denominación oficial data de la misma Independencia de los Estados Unidos de Norteamérica, donde ya se avizoraba la expansión norteamericana hacia las fronteras de México y otras regiones de nuestra América. Pero ese no es el objeto de éste artículo.

Sean 700.000 votos, un poco menos o un poco más a éstas alturas del proceso no es de gran importancia, pero si lo es, que la mayoría del pueblo democrático argentino optó por confiar su destino al candidato opositor y sus aliados transnacionales, aspecto que debe encender las alarmas en la mayoría de nuestros países.

Debe llamar nuestra atención no sólo por los resultados, porque es es pueblo argentino soberano para elegir sus gobernantes, sino porque además considero que tal vez pudo afectar los aires de triunfalismos e incluso de indiferencia como medio de castigo por las diferencias que puedan existir en los asuntos de interés público, aunque me atrevo a reconocer que hoy en día nuestros pueblos se han interesado más en ser sujetos activos de los procesos políticos de sus naciones y sobre todo de la integración regional, que sin lugar ha dudas a propiciado un desarrollo a nivel general, a pesar de las presiones y las maniobras orquestadas desde los imperios por intentar borrarnos la memoria y arrodillarnos nuevamente a sus intereses.

Cuando me refiero a que debe llamar nuestra atención, lo digo porque pudiese representar el retorno al poder de la extrema derecha no sólo en Argentina. El retorno de aquellos apátridas que le han vendido el sueño nacionalista a las transnacionales y gobiernos imperiales que durante varias décadas protegieron a dictadores y gobernantes corruptos que humillaban a nuestros pueblos y desangraban nuestras naciones en beneficio propio pero con un elevado índice de enriquecimiento de otras naciones, es así como se han formado y empoderado esos imperios, a través del saqueo, del bloqueo, de la violación de la dignidad humana; porque hay que decirlo, detrás de ese llamado “sueño americano” que mas de un incauto e ignorante ciudadano recurre en busca de riqueza y estabilidad, se practican las más aberrantes violaciones a la dignidad humana, visibles hoy día, gracias a las señales de televisoras como TELESUR, y quien diga lo contrario es porque no investiga, no se actualiza o como se dice en popular “la ignorancia no le permite ver más allá de sus narices”, ya que basta con verificar por ejemplo la supuesta lucha por el reconocimiento de los Derechos Humanos de los EEUU en varios países ricos en materias primas, en contraste con la ausencia de garantías humanas de sus propios ciudadanos por negarse a reconocer los numerosos tratado internacionales que sobre Derechos Humanos la mayoría de los países del mundo han acogido en sus ordenamientos jurídicos y lo han materializado en sus políticas públicas. Eso es parte de las noticias diarias del acontecer mundial.

En ese sentido, Argentina pudiese estar experimentando un retroceso ya anunciado hace algunos días por el líder brasileño Lula DaSilva, que podría afectar a otros gobiernos nacionalistas, progresistas, humanistas y socialistas de la región, repito, por la importancia que representa Argentina en los organismos de integración como el MERCOSUR, la CELAC, la UNASUR.

Debemos estar conscientes del peligro que representa Macri y la derecha internacional para la unión suramericana, derecha que a nivel mundial si se encuentra muy bien relacionada e incluso financiada, en ese aspecto, una analista argentina declaraba a TELESUR, que al parecer en la celebración de Macri luego de conocerse los resultados, estaba presente la esposa de Leopoldo Lopez, la señora Lilian Tintori.

Debemos elevar nuestro nivel de conciencia y erradicar la práctica del voto castigo porque más allá del ejercicio inconsciente las consecuencias resultan ser peores que las diferencias que nos llevaron a obrar de esa manera, la patria necesita el ejercicio consciente y razonado de sus ciudadanos que sin olvidar sus raíces, su historia y sus luchas, coloquen en una balanza de forma objetiva, consciente, con amor y sentimiento patrio, las opciones que se le presentan en el escenario electoral en función del interés colectivo.

A través del voto, somos los verdaderos protagonistas de los procesos políticos que hoy en día se dan en América latina, de nosotros depende seguir viviendo en una zona de paz, cuya única mancha reciente es el conflicto armado que se vive en Colombia, pero que también se encuentra encauzado en la búsqueda de la paz.

De nosotros depende la unión suramericana y el progreso conjunto de nuestros pueblos. No podemos permitir que lo sucedido en Argentina produzca un efecto dominó en nuestras repúblicas, afectadas hoy en día por la baja popularidad de Dilma en Brasil y la guerra económica que intenta asfixiar a nuestra sociedad venezolana y a nuestro gobierno legítimo y popular.

Tal vez, la ausencia física de Chávez y Kirschner y la poco actividad política de Lula, tres grandes líderes suramericanos, haya afectado los procesos de integración y haya restado apoyo popular a nuestros gobiernos, eso tal vez, deberíamos reconocerlo; pero también debemos estar conscientes que la patria no puede depender de una sola persona, que todos nosotros debemos continuar la lucha por preservar la independencia nacional y regional de los intereses mezquinos de los gobiernos imperiales y sus súbditos regionales; somos nosoros los que debemos garantizar la patria grande porque somos los que vivimos éstos tiempos y los que construimos ésta historia de independencia, pese a la caída de Argentina, somos nosotros los elegidos para vencer.

No hagamos del 22N argentino un 6D venezolano; luchemos por nuestra independencia.

PUEBLO CONSCIENTE NO SE ARRODILLA

 

@Gonzalez_om

gonzalezom15@gmail.com