Diego Olivera
Barómetro Internacional

 

Violación del espacio aéreo una nueva mentira de Santos

En artículos anteriores hablábamos de que solo el dialogo y la paz, son los mecanismos para desactivar los conflictos en la frontera colombo-venezolana, dos naciones con un pasado histórico en la creación de la Gran Colombia, sueño del Libertador Simón Bolívar, que sucumbieron ante las ambiciones de las oligarquías de la época, donde la poderosas familias bogotanas, con Santander a la cabeza, apostaban a una nación guerreristas y abortaban cualquier propuesta de una América Latina unida.

Hoy a 200 años de la independencia de nuestro continente, se amplía un conflicto entre Colombia y Venezuela, en las áreas fronterizas, entre ambas naciones por los efectos del contrabando de extracción, el narcotráfico y el paramilitarismo, la necesidad de frenar estos efectos nocivos, para la economía y la seguridad de los venezolanos, se aplica el cierre de fronteras, con la repatriación de colombianos indocumentados. Estos hechos generaron una campaña de mentiras, de los medios de prensa colombianos, sobre violación de derechos humanos, destrucción de viviendas y deportaciones inhumanas, para crear nuevas tensiones entre ambas naciones, lo que vuelve a demostrar el carácter agresivo del gobierno del presidente Manuel Santos, quien rehúye al dialogo y se escuda en la geopolítica militarista de su estado.

Cuando hablamos de que se activa el Plan Colombia, hablamos de la estrategia global de EEUU, para Sudamérica, un proyecto militarista conformado por 9 bases militares, con militares estadounidenses, que conforman un grupo acción rápida, para intervenir en nuestro continente, sustentados en la Carta Democrática de la Organización de Estados Americanos (OEA), mecanismo que permitió invasiones en América Central, Caribe y el Cono Sur dictaduras en el marco del Plan Cóndor. Los planes de contingencia del Ejército de Colombia, crearon un modelo de ocupación permanente, en sus conflictos con las guerrillas, pero que generalmente atacaban a los campesinos, que en 60 años de conflicto, han enlutado a miles de familias colombianas.

Santos acusa a Venezuela y asesinan a 69 defensores de derechos humanos

Una historia de nunca acabar la violencia de un estado Paramilitar-Narco, que ha generado, que 69 defensores de derechos humanos y líderes políticos o comunales han sido asesinados en Colombia en lo que va de 2015, informó este miércoles un representante de la Organización de Naciones Unidas (ONU) en el país, quien consideró esta cifra «muy alarmante».

«Nosotros llevamos un registro de 69 asesinados hasta la fecha este año. Eso es muy alarmante», dijo el coordinador residente de la ONU en Colombia, Fabrizio Hochschild, al detallar la cantidad de defensores de derechos humanos y dirigentes sociales y políticos que perdieron la vida en estos ocho meses. Hace algunos meses, fue divulgado el informe anual del programa no gubernamental Somos Defensores, en el que se afirma que la situación de los defensores de los derechos humanos en Colombia está más cerca del infierno que del paraíso, con un aumento en los asesinatos de activistas del 71 % en 2014.

El documento muestra que el año pasado fueron asesinados en el país 55 defensores de los derechos humanos, seis de ellos mujeres, y que las agresiones de diferente tipo alcanzaron su cota más alta desde 2002 con 626 casos, un incremento del 71 % frente a 2013. «Durante el 2014, en promedio cada siete días fue asesinado un defensor o defensora de derechos humanos en Colombia», señala el informe, y agrega que «cada día fueron agredidos dos defensores», con base en el registro del Sistema de Información sobre Agresiones contra Defensores y Defensoras de Derechos Humanos (Siaddhh).

El documento recurre a un símil con «La Divina Comedia» para mostrar este panorama y con ese propósito el informe está dividido en los capítulos de «El Infierno», «El Purgatorio» y «El Paraíso», como el poema de Dante Alighieri. Los datos sobre asesinatos y agresiones en general están en el capítulo de «El Purgatorio», que muestra que en 2013 los defensores de derechos humanos fueron «víctimas de una andanada de amenazas jamás registradas en Colombia», que incluyen asesinatos, atentados, amenazas, detenciones arbitrarias, desapariciones, robos de información y uso arbitrario del sistema penal.

Pero el documento va más allá y advierte de que quienes defienden los derechos humanos viven «un verdadero infierno» porque la protección que deberían tener por parte del Estado colombiano está muy lejos de ser la adecuada.

Se activa el Plan Colombia contra el gobierno del presidente Maduro

Hemos analizado la estrategia militarista de la Oligarquía colombiana, en sus vínculos con EEUU y el Pentágono, quienes han legalizado los grupo de autodefensa, quienes “desmovilizados” por el gobierno de Uribe, ahora son paramilitares, los cuales con la venia del estado narco-paramilitar, tiene las manos libres para agredir a sus connacionales y al estado de Venezuela. Pero no podemos quedarnos en el efecto, de solo un conflicto fronterizo, porque los miles de litros de gasolina, pasados por frontera terrestre y mar son legalizados en Colombia, a través de una Ley pirata, para luego venderla como Ecopetrol la empresa de Colombia, apareciendo en el mercado como productor de gasolina, producto del robo y la complicidad del gobierno de Santos.

La actitud negativa a un dialogo del presidente Santos, con el presidente Maduro, es parte de la estrategia de EEUU, una escalada del presidente Barak Obama, que con un doble discurso establece una apertura con Cuba, para agredir a Venezuela con el Decreto presidencial, acusando a esta nación, de un “peligro para la seguridad de EEUU”. Cuando realmente la seguridad y el petróleo, son los objetivos principales de esta nueva escalada de agresiones, junto al gobierno de Guyana, que habla de restablecer relaciones con una nueva embajadora, y el Canciller hace una andana de ataque e insultos, contra el gobierno venezolano, lo que determino que por ahora no habrá intercambios diplomáticos, solo el dialogo y la paz real, permitirá una apertura y negociaciones con la ONU, con participación del Caricom.

Violación del espacio aéreo una nueva mentira de Santos

Muchas persona pensaban que la política de asesinato selectivos, como masivos contra los campesinos, vestidos como guerrilleros, para crear falsos positivos eran parte de la mente criminal y fascista de Senador y ex presidente Álvaro Uribe, pero su compañero de ruta Santos, ha mostrado su verdadera faceta de oligarca, al hablar de derechos humanos en la frontera, y asesinar a decenas de luchadores sociales en el 2015, esta es la verdad de su gobierno.

Ahora una nueva mentira se une a su discurso, armar un nuevo falso positivo sobre una supuesta violación del espacio aéreo de Colombia, otro intento para agravar la tensión, algo muy similar a la violación de la fronteras de Ecuador, violadas por Santos, cuando era Ministro de Defensa, asesinado a guerrilleros y estudiantes con el apoyo de militares de EEUU.

Ante esta nueva farsa la canciller Delcy Rodríguez aseguró que “no existe evidencia alguna” sobre la denuncia de Colombia por supuesta violación del espacio aéreo del vecino país; considerando dicho reclamo de Santos “una invención para frustrar reunión” con su homólogo Nicolás Maduro. A lo que agrego que “ve con preocupación “la sistemática tendencia del gobierno colombiano para inventar incidentes que no existen a fin de afectar relaciones”.

Por su parte el ministro para la Defensa, Vladimir Padrino López, afirma que “no hay ninguna violación del espacio aéreo colombiano”. En efecto, asegura, durante el día sábado se realizó un “patrón de reconocimiento desde Castillete por toda la frontera con aviones de clase K-8″. “Nuestro pilotos tienen una sólida formación profesional para evitar este tipo de incidentes”. A lo que agrego que “se trasladó hasta el Comando de Defensa Aeroespacial a verificar las trazas de los vuelos y confirmó que no hubo ninguna violación del espacio aéreo colombiano”.

Estos hechos deja al descubierto nuevamente, el carácter bélico e intervencionista del gobierno de Colombia, que renuncia a las negociaciones directas con Venezuela, que no confía en UNASUR, ni la CELAC que busca la OEA, como mecanismo de coerción, y ante su derrota, se va su Canciller a Ginebra y la ONU. Un show de mentiras, una novela, por otra parte la canciller Holguín se reúne con el Canciller de Ecuador, con Venezuela y Uruguay, se abre una agenda de trabajo, entre Santos y Maduro, y nuevamente el mandatario colombiano, se lava las manos como Pilatos, en espera de la orientaciones del Departamento de Estado, de la CIA y seguramente del Pentágono, para ver como desestabilizar y querer derrocar al presidente Maduro.

diegojolivera@gmail.com