Prensa YVKE
 

8 de agosto de 2015.- Tal día como hoy, hace 136 años, nació en San Miguel Anenecuilco, estado de Morelos, México, Emiliano Zapata, uno de los líderes militares más importantes durante la Revolución mexicana y un símbolo de la resistencia campesina en México.

Quien sería también conocido como el «Caudillo del Sur» fue hijo de una familia campesina, siendo sus padres Gabriel Zapata y Cleofas Salazar.

Emiliano Zapata fue un joven inquieto, interesado desde muy niño por la historia de su país, que siempre le preguntaba a sus maestros acerca de los hechos de la independencia y todo lo que tuviera relación con las luchas que se realizaban en México. Tras quedar huérfano de padre, a los 17 años, se dedicó a trabajar como domador de caballos para mantener a su madre y a sus nueve hermanos.

Al estallar la revolución mexicana, Zapata se incorporó a las fuerzas maderistas, atraído por las demandas agrarias del Plan de San Luis, para lo cual formó el Ejército Libertador del Sur. Pero una vez que triunfó aquel movimiento, el reparto de la tierra no se llevó a cabo, el Presidente Madero no cumplió sus promesas de reivindicación popular y los hacendados presionaron para que las fuerzas campesinas fueran desarmadas y traicionaran a Zapata, quien reorganizó su ejército y tomó Yautepec, Cuautla y Cuernavaca.

Zapata se negó a deponer las armas mientras no se hiciera efectivo el reparto de tierras y, junto con sus seguidores proclamó el Plan de Ayala, defendiendo con arrojo su posturas contra los gobiernos de Madero, Victoriano Huerta y Venustiano Carranza, para los cuales los zapatistas se tornaron incómodos, pues repartieron la tierra, confiscaron los ingenios y los pusieron a trabajar en beneficio de la población más humilde; fundaron un banco agrícola y abrieron numerosas escuelas primarias, incluso para adultos. Reorganizaron la vida política de los municipios e impulsaron la organización tradicional de los campesinos.

El 10 de abril de 1919, víctima de una celada preparada por los emisarios de Carranza, Zapata fue asesinado en la hacienda de Chinameca, con lo cual el movimiento zapatista fue derrotado militarmente, aunque no sus ideales de justicia. Zapata tuvo clara conciencia de lo difícil que era hacer frente a la dominación, y en una carta dirigida a Pancho Villa, había escrito que «la ignorancia y el oscurantismo de los tiempos no han producido más que rebaños de esclavos para la tiranía».

En México fue conocido como «el Atila del Sur». Para muchos, Zapata es el mártir del agrarismo, el símbolo de la redención social en México, un luchador que defendió con coraje y valentía la propiedad de la tierra. «Tierra y Libertad» fue su lema, y aún hoy gran parte de la sociedad mexicana proclama que «La tierra es para quien la trabaja”.

Datos curiosos de Emiliano Zapata

1. A los 17 años, Zapata tuvo su primer enfrentamiento con las autoridades, por lo que tuvo que dejar su estado natal de Morelos y vivió algunos meses en el rancho de unos amigos de su familia.

2. Su gran pasión eran los caballos, por lo que se dedicaba al comercio de estos animales en las épocas en que el trabajo en el campo disminuía. A los 30 años era el mejor domador de caballos de la comarca y muchas haciendas se lo disputaban.

3. Según los habitantes de Cuautla, a Zapata le faltaba el dedo meñique de la mano derecha supuestamente porque lo perdió en una corrida de toros.

4. La silla donde fueron retratados Emiliano Zapata y Francisco Villa, no era la silla presidencial sino un sillón del viejo régimen dictatorial de México.

5. Se cree que utilizaba un doble para algunos eventos públicos debido al constante asedio del Gobierno. Sin embargo, las personas lo reconocían porque era más alto que su doble.

6. Siempre andaba de traje charro, armado y acompañado de su caballo.

7. Antes del estallido de la Revolución en 1910, trabajó en una de las haciendas de Ignacio de la Torre, el yerno del dictador Porfirio Díaz.

8. Tras ser asesinado, la gente buscaba el lunar que tenía en la parte superior de su ojo para comprobar que realmente era su cadáver.