Agencias

 

22-04-15.- La pretensión de Monsanto de fiscalizar toda la producción de soja en la argentina, y de obligar a retener compulsivamente un canon en su beneficio, constituye un sistema contrario al régimen legal argentino, afirmó la Confederación Intercooperativa Agropecuaria (Coninagro).

 

En un parte de prensa enviado a AIM, la entidad afirmó que no está de acuerdo que una empresa privada como Monsanto “se crea con potestad de fiscalización que es propia del estado”.

Coninagro instó a los productores a no suscribir compromisos ajenos a los usos y costumbres que rigen el comercio de granos, y les aconsejó a tener presente que ni los exportadores ni los demás actores de la cadena “tienen derecho a tomar muestras, informar a un tercero o realizar retenciones en forma compulsiva, vulnerando así el artículo 83 de la ley de patentes 24481, el derecho de autodeterminación informativa y el Inc. 2 del artículo 173 del Código Penal, respectivamente”.

También solicitó a las empresas exportadoras y demás actores de la cadena comercial, se abstengan de aplicar la metodología pretendida por Monsanto y exigió a las autoridades nacionales de manera urgente a tomar cartas en el asunto, y evitar que la multinacional o cualquier empresa privada, “imponga un régimen, inaplicable, arbitrario e constitucional”.

“Como entidades del agro, alentamos la incorporación de tecnologías que puedan ser aplicadas a la producción pero no aceptamos un sistema que avasalle derechos de los productores y que someta a  las demás empresas de la cadena, a la inseguridad jurídica que el mismo conlleva”.