Recordemos que nuestra oposición afirmaba que el atroz crimen del Fiscal Anderson lo había ordenado el Gobierno

 

Es bien interesante leer estos fragmentos que hemos seleccionado de la extensa carta que publicó ayer la Presidente argentina, Cristina Fernández de Kirchner, frente a la inesperada muerte por suicidio del Fiscal Alberto Nisman, quien días antes afirmaba tener pruebas que la comprometían a ella en intentar liberar de toda culpa a los iraníes en el caso del atentado de la Amia, sucedido hace ya varias varios atrás (julio/94) y en donde murieron calcinados 85 personas y resultaron heridos 300 miembros todos de la comunidad judía argentina.

Vale la pena leer estas líneas de la señora Presidenta, en donde ella se hace algunas preguntas bien interesantes que la justicia deberá clarificar, pues, al parecer, detrás de esta muerte se mueven muchos intereses que colocan en tela de juicio a sectores de la derecha más extrema del país austral, en perfecta sintonía con el diario Clarín de Buenos Aires.

Recordemos que cuando se colocó la bomba que acabó con la vida del Fiscal Danilo Anderson aquí en nuestro país (18/11/04), la derecha de inmediato lanzó sus dardos acusatorios al Gobierno de nuestro Comandante Hugo Chávez, asegurando su directa responsabilidad en la ejecución de ese atroz crimen. Finalmente, como sabemos, los directos responsables del hecho abominable están en la cárcel, pagando la mayor pena prevista en nuestra leyes (30 Años), pero para los factores opositores, esos sujetos no son otra cosa que perseguidos políticos del chavismo.

Leamos, pues estos extractos de esa carta (*):

La Presidente Fernández sobre la muerte del fiscal Nisman: «Su suicidio genera estupor e interrogantes»

20 de Enero de 2015

La presidenta Argentina, Cristina Fernandez de Kirchner -una de las investigadas por el fiscal fallecido Alberto Nisman, publicó una extensa carta en su cuenta oficial de Facebook refiriéndose al tema.

La jefa de Estado argentino sostiene en el primer párrafo de la misiva que «la muerte de una persona siempre causa dolor y pérdida entre sus seres queridos, y consternación en el resto. El suicidio provoca, además, en todos los casos, primero: estupor, y después: interrogantes. ¿Qué fue lo que llevó a una persona a tomar la terrible decisión de quitarse la vida? En el caso del ¿suicidio? del Fiscal a cargo de la causa AMIA, Alberto Nisman, no sólo hay estupor e interrogantes, sino que además una historia demasiado larga, demasiado pesada, demasiado dura, y por sobre todas las cosas, muy sórdida. La tragedia del atentado terrorista más grande que se produjo en la Argentina».

¿Quién fue el que ordenó volver al país al fiscal Nisman el día 12 de enero, dejando inclusive a su pequeña hija sola en el aeropuerto de Barajas, interrumpiendo vacaciones familiares y licencia en el trabajo que habían comenzado el 1º de enero y debían finalizar más allá del 20?

¿Quién puede creer que alguien que tenía tan grave denuncia institucional contra la Presidenta, su Canciller, que profesa la fe judía, o contra el secretario general de una organización juvenil que cuando ocurrió el atentado estaba en 5º año del secundario, se fue de vacaciones y de repente las interrumpe y en plena feria judicial, sin avisarle al juez de la causa, presenta una denuncia de 350 fojas que evidentemente debía tener preparadas con anterioridad?

¿O será que alguien se las dio cuando volvió? Que por una de esas raras casualidades es al día siguiente de la marcha en Francia por los actos terroristas en París.

¿Es casualidad también que ese mismo día 12, que el fiscal regresa imprevistamente al país, el diario Clarín titula: «Más de 4 millones, de pie contra el terror en Francia».?

¿Es casualidad que al día siguiente, martes 13, y casi secuencialmente, el mismo diario titule en su tapa: «Timerman recibió orden de no asistir a la gran marcha en París»? Desmentida por la presencia del Canciller y nuestra Embajadora en la marcha.

¿Es casualidad que el miércoles 14 el fiscal presenta ¿su? escrito de 350 páginas sin avisarle a Canicoba Corral, juez de la causa principal, y directamente las remita al juez Lijo? Sí, el mismo que sobreseyó a Corach por encubrimiento.

¿Es casualidad que la tercera tapa secuencial de Clarín sea precisamente este hecho?

¿Cómo pueden decir que el fiscal volvió porque temía que la Procuradora lo removiera de su cargo si el propio Nisman admitió, nada más ni nada menos que en TN (el cable del monopolio y feroz detractor de la Procuración), que la Dra. Gils Carbó lo llamó para ofrecerle más protección y si necesitaba más custodia?

Como decía al principio: interrogantes que el Poder Judicial DEBE investigar, como también el hecho de que sea un empleado de la fiscalía el que le suministra el día sábado el arma calibre 22 que le provoca la muerte. ¿Para defensa? ¿Un arma calibre 22? Cuando el fiscal vivía en la Torre Le Parc de Puerto Madero, con sistemas de vigilancia inteligentes, con códigos de ingreso, monitoreo de cámaras y custodia constante de Prefectura, y contaba además con custodia propia de 10 agentes de la Policía Federal.

Hoy más que nunca, no se debe permitir que una vez más se intente hacer con el juicio de encubrimiento lo que ya se hizo con la causa principal. Porque se descubrirá a los autores del atentado cuando se sepa quiénes los encubrieron. En Argentina todavía debemos remarcar lo más obvio y simple.

Creo que los argentinos nos merecemos no ser tan subestimados en nuestra inteligencia y mucho menos cuando 85 víctimas y sus familiares todavía esperan justicia después de 21 años.»

(*) Quien desee leer completo el texto de la carta, hacer clic aquí: CFK: «AMIA: otra vez tragedia, confusión, mentira e …