La «epidemia sistémica» de 2014
 
Miguel Ángel Adame Cerón
Rebelión

1. El ébola en los inicios del siglo XXI

El primer brote del siglo XXI fue detectado en Uganda, en el distrito de Gulu, al norte del país, donde la variedad ébola-Sudán infectó en el año 2000 a 425 personas, de las que fallecieron 224. Entre 2001 y 2002 se confirmó un nuevo brote en Gabón, que posteriormente se extendió a la vecina República del Congo. El balance de la OMS fue de 65 casos con 53 muertos en Gabón, y de 59 casos y 44 muertos en Congo. En 2003 se contabilizaron en Congo 143 personas afectadas por la variedad ébola-Zaire. Murieron 128 (el 90%). Y en 2007 la enfermedad reapareció en la República Democrática del Congo, donde afectó a 264 personas y mató a 187. También en 2007 Uganda registró un brote en el distrito occidental de Bundibugyo, con 149 infectados y 37 muertos.

2. Inicios del brote en 2013 y de la epidemia 2014

Los estallidos epidémicos de la “peste roja”, fiebre hemorrágica africana o más comúnmente ébola desde el primer brote en 1976 hasta el inicio de este de 2013-2014 sucedieron más de 30 (prácticamente uno cada año siendo los más importantes los de 1976, 1995, 2000, 2007 y 2014), en donde más de una persona se ha infectado y donde han estado implicados más de diez países – principalmente en África ecuatorial y más recientemente África Occidental.

Una de la peculiaridaes de este fuerte y relativamente prolongado estallido es que por primera vez la epidemia se ha abierto camino hacia centros urbanos importantes como Conakry (Guinea), Monrovia (Liberia) y Freetown (Sierra Leona). Es decir, en ciudades donde la densidad de población, el trasiego de gentes y el tráfico de movimientos internos, externos e internacionales es muy grande y se presta a la expansión. Cabe resaltar que esas ciudades, además, están sobrepobladas, son muy pobres y sus sistemas de salud y de sanidad públicas son altamente deficientes e insuficientes.

El foco del brote de ébola 2013-2014, asociado al subtipo o cepa Zaire (el más mortal de los cinco hasta ahora clasificados por la bio-medicina oficial hegemónica) se desplazó varios kilómetros al oeste en relación a los brotes del último cuarto del siglo XX y los primeros 10 años del siglo XXI (que fueron en África central y nororiental principalmente: Sudán, el Congo, Gabón) pero dentro del mismo continente africano, además creció en cantidad de infectados y finados, y en repercusiones bio-médicas y geopolíticas. Hasta el inicio de estos brotes de 2013 y 2014, según analistas se reconocen oficialmente entre 28 y 36 de ellos. Según el análisis del articulista Javier Flores (La Jornada, 7 de octubre de 2’14):

Aunque algunas personas piensan que el actual brote de la enfermedad producida por el virus del ébola se ha magnificado, y que hay otras patologías (como la malaria) que cobran un mayor número de vidas en el continente africano y se quedan sin los recursos que ahora se invierten en la contención de la patología que aquí se comenta, lo cierto es que se trata de una enfermedad que tiene características especiales y es difícil observarla sólo como un fenómeno mediático.

Es una enfermedad emergente, que surgió relativamente hace muy pocos años (1976) y eso la convierte en un reto, pues apenas se están conociendo sus cualidades y el riesgo que representa ahora y en el futuro. A diferencia de otros padecimientos, no hay métodos de prevención ni tratamientos, lo cual es un gran desafío para la medicina. Desde su surgimiento en la región central de África hasta el actual brote en 2014, el virus ha sufrido más de 300 mutaciones, lo que muestra que es un agente cambiante. También ha dado lugar a fenómenos novedosos. Uno de ellos es que ante la falta de tratamientos efectivos se ensayan en humanos algunas drogas experimentales con el aval de la comunidad internacional, algo impensable en otras condiciones (p.3a).

También planteó en otro artículo posterior este analista que dicha epidemia podría hipotéticamente convertirse en “la segunda pandemia de este siglo” [1].

Veamos, según algunas fuentes, el brote actual inició en la aldea Meliandou, en Guéckédou de Guinea (zona cero), en diciembre de 2013, siendo los primeros afectados los miembros de una familia (niño de 2 años, niña de 3 años, madre y abuela) que sucumbieron rápidamente en diciembre y enero de 2014. Respecto a este niño, llamado Emile Ouamouno, de acuerdo con un estudio del instituto epidemiológico alemán Robert Koch que realizó una investigación en noviembre de 2014, se tiene la hipótesis –según Fabián Leendertzz líder de la investigación– que se contagió por murciélagos de la especie Mops condylurus, considerados huéspedes naturales de la fiebre hemorrágica en epidemias anteriores y que pueden sobrevivir al virus. Esto porque “los niños de la aldea solían jugar en el tronco hueco de un árbol” donde habita esta especie de murciélagos. (DPA, AP y AFP, La Jornada, 31 de diciembre de 2014, p. 35). El niño cuyos síntomas fueron fiebre, heces negras y vómito, murió a los días de contagiado.

En febrero también hubo casos registrados, pero fue en marzo de este año cuando inició un primer brote propiamente dicho en áreas colindantes a dicha aldea llegando a la capital Conakry, al tiempo que se reportaron contagiados en el país Vecino de Sierra Leona, y después en Liberia.

A partir del brote de marzo se plantea una re-continuación del mismo, pero con nuevas consecuencias. Este segundo re-brote inicia a finales de julio y principios de agosto en Liberia donde reportaron el mayor número de casos, tanto de contagiados como de muertes [2].

3. Condicionantes ecológico-económicas

La trasmisión cada vez más cercana a las personas del filovirus del ébola (y sus cepas, en este caso la llamada Zaire) , que hasta antes del periodo 1976 y específicamente hasta antes de 2013 se encontraba confinado o relativamente confinado a la fauna salvaje o semi-salvaje , tiene una de sus explicaciones más destacadas –según el investigador Jean Batou (Rebelión, 18-10-2014)– en el contexto de la explotación económica cada vez más intensa de la sabana africana, una amplia zona de 400 millones de hectáreas que va desde el Senegal a África del Sur y que la FAO y el Banco Mundial han presentado como el nuevo “El dorado agrícola mundial”. Sus consecuencias más conocidas son el retroceso de la agricultura campesina de pequeña escala en beneficio de la agroindustria exportadora, el desarraigo de millones de pequeños productores empobrecidos y la concentración/acaparamiento de tierras por parte de compañías extranjeras.  

Estas manifestaciones de acumulación capitalista por desposesión han estado en los años recientes y están en plena ebullición en los países afectados por el virus del Ébola en 2014. Se traducen en el desbrozamiento de amplias zonas, lo que hace que las comunidades precarizadas de los alrededores entren en contacto con animales para alimentación potencialmente peligrosos, al ir a buscarlos cada vez más lejos en el interior de los bosques tropicales. Cada vez más, la carencia en proteínas les empuja a consumir «carne de la sabana» –monos, pequeños roedores, murciélagos, etc.– que les expone a nuevos agentes patógenos. La deforestación y, puede ser, el recalentamiento climático global, parecen haber acentuado también la aridez y la dureza de la estación seca; dos factores favorables que parecen ser favorables al desencadenamiento de la epidemia . Factores que también han podido favorecer la migración y la dispersión de los murciélagos portadores del virus .

Los países afectados por la epidemia actual han estado particularmente afectados por los inversores internacionales desde hace varios años –continúa denunciando la perspectiva de Batou– en función de la gran disponibilidad de tierras cultivables, de la vulnerabilidad del pequeño campesinado dedicado a la agricultura de subsistencia y de condiciones políticas favorables (promoción de la libre empresa y repliegue del Estado). Fue así –por citar algunos ejemplos– como los grandes inversores italianos (Nuove Iniziative Industriali) y estadunidenses (Farm Land of Guinea) pusieron el ojo sobre Guinea Conakry. También nos encontramos con intereses malasios en Liberia (Sime Darby) y suizos (Addax) y chino-vietnamitas en Sierra Leona, que controlan la producción de agrocarburantes en plena expansión.

4. Cantidades de infectados y muertos

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) hasta el 19 de octubre oficialmente se han infectado más de 9 mil 936 personas y han muerto 4 mil 877, lo que indica una mortalidad que ronda en el 50%, sin embargo se plantea que las cifras son mucho mayores, quizá el doble o el triple por los casos no reportados, no reconocidos y no detectados por los organismos encargados de contabilizar los casos en estos estallido epidémicos. Por ello el encabezado de una nota del 23 de octubre señala que la mortalidad ha sido de 70 por ciento en infectados de ébola. Aparte de los ciudadanos infectados y muertos también se contabilizan los trabajadores de la salud, dándose la cifra de 443 trabajadores infectados y 244 fallecidos [3].

Liberia encabeza la lista de países golpeados por la enfermedad con la mitad de infectados 4, 665 y mil 279 víctimas mortales.

El 25 de octubre la OMS anunció que de número de infectados había rebasado los diez mil, concretamente 10 mil 141 con 4 mil 922 muertos. Además precisó que las cifras reales podrían ser 3 veces más debido a que muchos enfermos “no reciben la atención médica adecuada o están muy asustados (¡sic!) y se rehúsan a pedir ayuda!” (26 de octubre).

Hasta el 18 de noviembre las cifras eran las siguientes: 15 mil 351 infectados y 5 mil 459 muertos en ocho países.

Hasta el 22 de diciembre, según cifras oficiales de la OMS, el ébola mató a 7 mil 518 de 19 mil 340 casos confirmados en Liberia, Sierra Leona y Guinea Conakry, países más afectados. Sierra Leona registró la mayoría de los casos (11,495), con 2 mil 556 muertos de 8 mil 939, mientras, en segundo sitio Liberia (11,206) tuvo 3 mil 376 muertos de 7 mil 830 y Guinea Conakry (4,157) tuvo mil 586 muertos de 2 mil 571 casos. Sin embargo, la cifra de muertos de Sierra Leona es mucho menor (cerca de mil menos a pesar de que tiene casi 300 casos más) que la de fallecidos de Liberia, lo que ha llevado a algunos expertos en salud a cuestionar la credibilidad de los números informados por el gobierno sierraleonés (Reuters y AFP, 23 de diciembre de 2014:39). A escala internacional, la cifra redondea 7 mil 533, ya que fuera de los anteriores países, el balance es el siguiente (según OMS): seis en Malí, ocho en Nigeria y uno en Estados Unidos. En España y Senegal, que se han declarado libres de ébola, tuvieron un caso cada uno aunque ninguno de ellos mortal.

Hasta el 24 de diciembre, informó la OMS, el número de muertos causados por la epidemia fue de 7 mil 708, de 19 mil 695 infectados (7 mil 693 en Sierra Leona, Liberia y Guinea Conakry). La OMS agregó que 666 médicos y empleados sanitarios se contagiaron, de los cuales 366 fallecieron.

Hasta el 29 de diciembre más de 7 mil 842 muertes y los casos en Sierra Leona, Liberia y Guinea suman 20,081 (OMS).

Cabe observar que la mayoría de los infectados (no se sabe con exactitud las cifras oficiales pues no existen tales) son mujeres, pues son ellas las que más se hacen cargo a nivel doméstico y comunitario tanto de los enfermos como de los fallecidos.

5. Países con casos de ébola reconocidos (patriados y repatriados)

Guinea Conakry, Sierra Leona, Liberia, Nigeria, Senegal, Malí (una niña muerta y 43 en posible infección 24 de octubre), España, Estados Unidos, Alemania y Reino Unido.

6. Casos de ébola del personal médico en África, repatriados y fuera de África.

A mediados de julio de 2014 muere el Dr. Sam Motooro Muhumuza en la lucha contra el ébola por tener el virus.

El 26 del mismo mes fallece el médico Samuel Brisbane tras dos semanas aislado por poseer el virus en Liberia.

El 29 de julio de 2014 muere el médico jefe Umar Khan el mayor especialista en la cura de ébola en Sierra Leona, había tratado a más de 100 pacientes que padecían la infección.

El español médico misionero Miguel Pajares fue el primer europeo contagiado y falleció el 12 de agosto en el hospital Carlos III pocos día después de haber sido trasladado desde Liberia. Otro contagiado Manuel García Viejo murió en el mismo hospital.

La doctora Olivet Buck murió el 13 de septiembre en Freetown, Sierra Leona.

El sacerdote español Manuel García Viejo, director médico del Hospital San Juan de Dios en Lunsar, Sierra Leona (diagnosticado el 20 de septiembre).

Enfermera francesa que contrajo el ébola cuando se encontraba en Liberia donde atendía a pacientes del virus como parte de una misión de Médicos sin Fronteras; recuperada en Francia (5 de octubre).

Científico de Senegal infectado cuando trabajaba en Sierra Leona en un Laboratorio de la OMS, se dio de alta en el Centro Médico Universitario Hamburg-Eppendorf, en Alemania (5 de octubre).

El liberiano Thomas Eric Duncan en Dallas, Texas, EUA. Primer caso de ébola diagnosticado en el país: fallecido el 8 de octubre. Fue tratado experimentalmente (no se dice si con o sin su consentimiento) con el fármaco antiviral no probado nunca antes en humanos ni en animales. Vigilaron a 48 personas que estuvieron contacto con él.

Teresa Romero enfermera española infectada. El 8 de octubre sacrificaron a su perro excalibur. Y hospitalizaron a 14 personas que podrían estar contagiadas. La trataron en el hospital Carlos III con 3 tratamientos experimentales, el último con el Zmaap, importado de Bélgica. Entre el 9 y 11 de octubre en sólo 48 horas pasó de estar al borde de la muerte a experimentar una estabilización, hasta el punto que recuperó la conciencia y comenzó a hablar con el personal médico; se planteó” entonces que “comenzó a generar anticuerpos para combatir el virus” (12 de octubre). Para el 1º de noviembre le hicieron una prueba y no encontraron “rastro de virus” por lo que salió de su aislamiento. Su esposo Javier Limón también estuvo en cuarentena y no presentó síntomas de la enfermedad.

Un empleado sudanés de la ONU que se contagió de ébola en Liberia, murió el 14 de octubre en Alemania, donde fue trasladado el 9 de octubre para recibir tratamiento.

En Francia una mujer que viajó a África fue hospitalizada el 10 de octubre en el Centro Bichat de París. En esas mismas fechas (7-9 de octubre) se hospitalizó al guineano de 47 años en Río de Janeiro, Brasil, pero finalmente fue descartado como caso de ébola.

Varios sospechosos entre el 9 y 12 de octubre fueron hospitalizados en varios países, en Alemania en dos ciudades: Fráncfurt y Leipzig y en Santiago de Chile tras presentar primeros síntomas similares al ébola.

Hasta el 14 de octubre murieron 9 de 16 trabajadores de la organización Médicos sin Fronteras contagiados por el virus en los países de África occidental.

La enfermera Amber Vinson de 29 años fue la segunda que resultó infectada a mediados de octubre y que atendió a Duncan: sobrevivió a la enfermedad en el Hospital de Emory, en Atlanta. Salió el 24 de octubre.

Craig Spencer, quien trabaja para Médicos Sin Fronteras se convirtió en el primer diagnosticado de este mal en Nueva York el 25 de octubre, luego de contraer la enfermedad en Liberia o Guinea, se internó en el hospital Belleveue de Nueva York.

Nina Pham primera enfermera de 26 años que resultó infectada el 12 de octubre por atender a Thomas E. Duncan, fue tratada con transfusión de plasma de un médico que sobrevivió al virus y finalmente superó la enfermedad. Su perro Bentley permaneció 21 días en aislamiento sin presentar contagio, el 1º de noviembre ambos se reunieron.

También una trabajadora de la ONU se infectó en Sierra Leona e ingresó a fines de octubre en el hospital militar de Saint-Mandé cerca de París.

El 24 de noviembre el Ministerio de Salud de Italia informó que un médico italiano de la organización no gubernamental Emergency se infectó con el virus en Sierra Leona. La cancillería italiana y el Ministerio de Defesa dispusieron su traslado al instituto especializado en enfermedades contagiosas de Roma Lazzaro Spallanzani. El médico de 50 años fue tratado con plasma proveniente de España y de Alemania, lo cual agravó su salud, a principios de diciembre tuvo que estar conectado a un respirador artificial, pero en las siguientes dos semanas comenzó a mejorar y para finales de ese mes pudo respirar sin aparatos, comer y caminar solo.

Según datos de la OMS del 3 de diciembre de 138 trabajadores de la salud que contrajeron el ébola en Sierra Leona, 106 murieron, lo que significa una tasa de mortalidad mucho más alta que entre trabajadores de la salud en las vecinas Guinea y Liberia.

El médico cubano Félix Báez mientras atendía pacientes en Sierra Leona dio positivo a finales de noviembre y mediante la OMS (quien asumió los gastos de hospitalización y tratamiento) se trasladó al Hospital Cantonal de Ginebra (HUG); a principios de diciembre fue dado de alta y el 6 de diciembre regresó a Cuba. Pretende regresar a África en enero de 2015.

Un técnico sanitario que trabajaba en Sierra Leona fue diagnosticado de ébola el 29 de diciembre en un hospital de Glascow, Escocia.

7. Protocolos de detección de viajeros y otras medidas de prevención

El 8 de octubre la Casa Blanca anunció que en los aeropuertos Kennedy, de Nueva York; Newark, de Nueva Jersey; Washington, Chicago y Atlanta se tomaría la temperatura de los pasajeros que lleguen de Liberia, Guinea Conacry y Sierra Leona.

El 9 de octubre 23 legisladores republicanos y 3 demócratas firmaron una carta para que el presidente Obama , pida al Departamento de Estado que imponga una prohibición de viajes y restrinja visas emitidas a ciudadano de Guinea Conacry, Liberia y Sierra Leona.

El 11 de octubre en Reino Unido, realizaron un simulacro nacional de ocho horas de brote de ébola en el que participaron los ministros del Gobierno que dirige el conservador David Cameron, profesionales médicos de hospitales y el servicio de ambulancias del Departamento de Salud Público de Inglaterra. También participaron actores y actrices que fingieron padecer los síntomas del ébola, al tiempo que personal sanitario especializado puso a prueba los trajes de alta protección contra el virus.

El ministro inglés Cameron anunció que «se aumentarán los controles» en aeropuertos y en la terminal del tren del Canal de la Mancha para detectar posibles casos de ébola en pasajeros procedentes de Liberia, Sierra Leona y Guinea. Estos controles, que se aplicarán en los aeropuertos de Heathrow y Gatwick y en las estaciones del Eurostar, conllevarán analizar el historial de viaje de estos pasajeros de regiones afectadas y, en algunos casos, pueden implicar exámenes médicos (12 de octubre).

USA capturó al personal médico, que llegaba de asistir enfermos en las zonas de alta incidencia en África, en las entradas de sus aeropuertos y los aislaba inmediatamente para ponerlos en cuarentena; además de interrogarlos durante varias horas y no informales de sus planes, como si fueran prisioneros o criminales; esto a pesar de que daban negativo a la prueba preliminar de ébola (20 de octubre).

El 25 de octubre se realizó el primer simulacro dentro del Plan Nacional de respuesta al ébola, desde la 9 a las 12:30 en el aeropuerto internacional Mariscal Sucre de Quito, el ensayo e efectuó con el objetivo de evaluar el funcionamiento adecuado de los protocolos de atención frente al ingreso de algún caso sospechoso de este virus .

El 21 de diciembre el profesor Youseph Yazdi, director del Centro de Innovación y Diseño en Bioenergía de la Universidad John Hopkins en Maryland Estados Unidos explicó que varios investigadores de esa institución desarrollaron un nuevo traje sanitario para los médicos que luchan contra el virus del ébola y que servirá para “salvar vidas”, señaló que pronto estarán en el terreno. Es un traje mucho más cómodo y con menos probabilidad de infectar accidentalmente a los usuarios y está financiado por La Agencia Internacional para el Desarrollo (USAID por sus siglas en inglés) de los USA.

8. Instituciones, organismos y organizaciones internacionales y trasnacionales protagonistas

Organización Mundial de la Salud (OMS [4] ) de la ONU. Directora General Dra. Margaret Chan. Sede Ginebra con 6 oficinas regionales: África las Américas, Asia sudoriental, Europa, Mediterráneo Oriental y Pacífico.

Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades en Estados Unidos (CDC-USA por sus siglas en inglés). Director: Thomas Frieden.

Centro Nacional para Enfermedades Infecciosas Emergentes y Zoonóticas. Pertenece a los CDC. Directora Beth Bell. Directora General Dr. Margaret Chan. Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos (NIH-USA, por sus siglas en inglés).

Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas de Estados Unidos (NIAID-USA). Pertenece a los NIH. Director: Anthony Fauci.

Centro para el Desarrollo de Vacunas de la Universidad de Maryand. Reponsable: Myron Levine.

Cruz Roja Internacional. Presidente Peter Maurer.

Médicos sin Fronteras (MSF). Médecins Sans Frontiéres. Presidenta: Joanne Liu.

Clinton Global Initiative (CGI), director: Bill Clinton.

Organizaciones Humanitarias.

Misioneros de la Salud.

Grupo de ayuda Direct Relief, presidente ejecutivo Thomas Tighe

El Pentágono: portavoz: John Kirby.

UNICEF Fondo para la Infancia de las Naciones Unidas. Director Ejecutivo Anthony Lake.

Centro de Investigación/producción de Vacunas. Instituto Finlay. Cuba, presidente Francisco Domínguez.

Organizaciones civiles de salud (alternativas).

Movimiento de Salud de los Pueblos. People’s Health Movement/PHM (organización alternativa).

9. Estrategias oficiales

Obama declaró planes para   construir 17 centros de tratamiento , entrenar a miles de trabajadores de la salud y establecer un centro de control militar” para   coordinar los esfuerzos , dijeron funcionarios (16 de septiembre).

La Organización Mundial de la Salud (OMS) dijo que necesita equipos médicos extranjeros con 500-600 expertos, así como al menos 10 mil trabajadores sanitarios locales, cifras que podrían aumentar si se incrementan los casos, como se espera que suceda. (15 de septiembre).

El portavoz oficial del pentágono John Kirby anunció que unos 200 soldados estadunidenses se encuentran en Liberia para instalar un centro de comando militar desde donde coordinarán la respuesta a la epidemia en toda la región (3 octubre).

Los trajes anti-contagios están clasificados dependiendo del material y la confección del uno a 4 sobre la base de niveles de riesgo, de los más inseguros a los más seguros.

En una nota del 15 de octubre, el Unmmer (instancia de emergencia instalada por la ONU) declaró que en un plazo de 60 días el 70% de las personas contagiadas reciben un tratamiento en los centros de atención y la mayoría de los entierros se lleven a cabo con las medidas de seguridad necesarias, además para enfrentar la epidemia se necesitan 2 mil 700 camas, 16 laboratorios de diagnóstico, 450 equipos para tratar el cuerpo de la víctimas y mil vehículos.

En otra nota se plantea que el objetivo de la ONU para detener el crecimiento de la epidemia en los 3 países de África occidental es aislar en hospitales y centros de atención al 70 por ciento de pacientes antes del primero de diciembre, para ello se necesitan 4 mil 700 camas, cuando hasta estos días llevan mil 126 (23 de octubre). También se propuso que el 70 por ciento de víctimas mortales fueran enterradas en condiciones seguras. Además señaló que se necesitaban laboratorios especializados capaces de manejar muestras de sangre de personas contagiadas (26 de octubre).

Por parte del Programa Mundial de Alimentos se pide a organizaciones y empresarios de la región colectar la mitad que hace falta de 93 millones de dólares para el programa de emergencia que ayudaría a reducir los “retos socioeconómicos provocados” por la epidemia del ébola (25 de octubre).

Cinco días antes de finalizar diciembre la Misión de Respuesta de Emergencia de la ONU anunció que incumplirá su meta del primero de diciembre de contener la expansión del virus en 70 por ciento (en atención a contagiados y en entierros seguros) debido al aumento de casos en Sierra Leona, por lo que sólo se cumplirá en objetivo propuesto en septiembre en algunas áreas.

10. Donaciones anunciadas:

El FMI aprobó una entrega adicional de 130 millones de dólares de ayuda a Guinea Conakry, Liberia y Sierra Leona en la lucha contra el ébola (23 de septiembre)

Venezuela: Cinco millones de dólares a la OMS (11 de octubre)

Mark Zuckerberg, fundador y mayor accionista de Facebook, donó 25 millones de dólares a los CDC-USA (15 de octubre)

Bolivia: Un millón de dólares a la ONU (23 de octubre)

México: Un millón de dólares a la OMS para equipamiento especializado de las brigadas de médicos y enfermeras que cuba enviará a Liberia, Sierra Leona y Guinea (25 de octubre).

11. Ayudas logísticas

Estados Unidos envió 3 mil militares para dar “apoyo médico y logístico” en África Occidental (17 de septiembre).

Pekín está enviando un laboratorio móvil con 59 expertos para acelerar los análisis de la enfermedad. Ya tiene 115 personas y un hospital financiado por China allí. (16 de septiembre).

La asociación Clinton Global Initiative (CGI) y otras organizaciones humanitarias como Direct Relief enviaron a Sierra Leona 100 toneladas de ayuda médica de emergencia integrada por 170 plataformas con guantes, batas quirúrgicas y otro tipo de equipo de protección para los trabajadores médicos (21 de septiembre).

Cuba envió 62 médicos y 103 enfermeros a Sierra Leona (2… de septiembre).

El Pentágono envió 800 efectivos, entre ellos ingenieros y especialistas médicos y de aviación (8 de octubre).

El secretario de Estado de USA John Kerry, planteó la necesidad de colaboración internacional con unidades de tratamiento personal, equipos de telecomunicaciones e incineradores para combatir la enfermedad.

El pentágono anunció (9 de octubre) que enviará 100 oficiales de la Marina y seis aviones a territorio liberiano. Por su lado la Cámara de Representantes aprobó 700 millones de dólares adicionales para financiar una misión militar que tiene por objetivo “ayudar a combatir el brote en África occidental”.

Del 6 al 10 de octubre Reino Unido envío a Sierra Leona de 750 soldados, un barco hospital y tres helicópteros.

El Programa Mundial de alimentos ha suministrado más de 13 mil toneladas de alimentos a unas 776 mil personas en los tres países más afectado de África occidental (25 de octubre)

China ha enviado más de 35 millones de dólares en ayuda médica a los países más afectados por el ébola (26 de octubre).

El presidente francés François Hollande prometió el 28 de noviembre que donará 100 millones de euros a Guinea Conakry para la lucha contra el ébola; además firmará un acuerdo de cooperación para crear un Instituto Pasteur en la capital guineana para finales de 2016, que se enfocará en las enfermedades con alto potencial epidémico, “responsables de varios episodios graves y severos” (29 de noviembre).

12. Aspectos económicos

El 18 de septiembre el Banco Mundial calculó en 800 millones de dólares el impacto económico del ébola para 2015 en las tres naciones principalmente afectadas (Liberia, Sierra leona y Guinea Conacry), así como riesgos de recesión en ellas.

Las previsiones de crecimiento en los tres países más afectados se vinieron abajo e incluso se prevé recesión. Para Liberia la caída será de 11.7. Sierra Leona 8.9 y Guinea pérdida de 2.3 puntos porcentuales del PIB. Además de la suspensión de gran cantidad de proyectos de desarrollo, agricultura, minería, turismo, construcción, comercio y transporte (29 de septiembre).

El 9 de octubre el Banco Mundial advirtió que el costo económico del ébola para África occidental podría superar los 32 mil millones de dólares a fines de 2015 si el brote se ébola se sigue expandiendo más allá de Liberia, Sierra Leona y Guinea Conakry.

La situación de los tres países más golpeados por la epidemia sufrió (según un reporte del 13 de octubre) los siguientes cambios:

En Sierra Leona hubo una guerra civil de 1991 a 2002 la cual cobró 70 mil vidas y dejó 26 millones de personas sin hogar, la economía repunto 15% durante 2012 y 20% en 2013. Para 2014 se pronostica que crecerá 8% frente al pronóstico previo de 11.3%.

En Liberia murieron 250 mil personas en guerras civiles de 1989 a 2003, registró crecimiento de 2 dígitos en 4 de los pasados 5 años. Para 2014 se pronosticó que crecerá 2.5% en comparación con el pronóstico previo de 11.3%.

En Guinea con una historia de golpes de Estados sangrientos y antagonismos políticos, ha crecido lentamente con 3.9% durante 2012 y 2.6% durante 2013. Para 2014 se prevé 2.4% frente al pronóstico de 4.5%.

El Programa Mundial de Alimentos (PMA), con sede en Ginebra anunció que la epidemia podría convertirse en una crisis alimentaria en África occidental en África occidental, donde la enfermedad provocó grandes pérdidas de cosechas. Éstas pueden hacer aumentar los precios de los alimentos básicos y colapsar los mercados. “Si la epidemia dura entre cuatro y cinco meses más, se teme además que peligren las siembra y el cultivo para el próximo año” ( 25 de octubre).

13. Declaraciones relevantes

Expertos de la OMS reiteraron la advertencia de que más de 20 mil personas podrían estar infectadas por la fiebre hemorrágica en noviembre si no se refuerzan las medidas de control en África occidental (23 de septiembre).

Según declaración de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades en Estados Unidos (CDC por sus siglas en inglés) para enero del 2015 podrían estar afectados por el virus “mortal” del ébola un millón 400 mil personas (24 de septiembre).

El ministro del exterior de Sierra Leona, Samura Kamara dijo en la Asamblea General de la ONU que “Queremos recordar al mundo que la lucha contra la enfermedad que causa el virus del ébola en África occidental es un asunto de vida o muerte para toda la humanidad. África occidental y el mundo estuvieron ‘extremadamente mal’ preparados para la epidemia” (30 de septiembre).

Fidel Castro escribió en un artículo: “Es dura la tarea de los que marchan al combate contra el ébola y por la supervivencia de otros seres humanos, aun a riesgo de su propia vida. Hay suficientes médicos en el planeta para que nadie tenga que morir por falta de asistencia…Ojalá el ejemplo de los cubanos que marchan al África prenda también en la mente y el corazón de otros médicos en el mundo, especialmente de aquellos que poseen más recursos» «Honor y gloria para nuestros valerosos combatientes por la salud y la vida” (4 de octubre).

El 9 de octubre Thomas Frieden director de los Centros de Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC) declaró que “La Epidemia del ébola es el mayor reto sanitario global desde la emergencia del sida […] En los 30 años que llevo trabajando en la salud pública lo único comparable (a la actual epidemia de ébola) ha sido el sida […] Ahora tenemos que trabajar para que no se convierta en el próximo sida”.

El 10 de octubre David Nabarro, enviado especial de la ONU para tratar la epidemia, sostuvo ante la Asamblea General que “sin una movilización masiva internacional para apoyar a los países infectados (¡sic!) en África occidental será imposible poner bajo control esta enfermedad y el mundo tendrá que vivir (sic!) con el virus para siempre (sic¡) […]. La ONU sabe lo que se debe llevar a cabo para frenar el rápido avance del ébola […]. Nuestro compromiso con todos ustedes es detener la epidemia en pocos meses”.

Kaifala Marah, ministro de Finanzas de Sierra Leona, afirmó el 11 de octubre que la crisis del virus hemorrágico produce los mismos efectos que un “embargo económico”.

Hay que “aislar ébola, no a los países. Debemos manejarnos con extrema prudencia para no aterrorizar el mundo”, declaró la directora del FMI, Christine Lagarde el 11 de octubre en una reunión con el BM.

El 14 de octubre el investigador de la Facultad de Medicina de la Universidad Autónoma de México, Malaquías López Cervantes declaró que en algunos lugares de México existen condiciones de pobreza similares a las de África, por lo que en el hipotético caso de que en alguna de las regiones se presentara un caso de ébola “estaríamos en problemas, pues debido a esa miseria y a la falta de infraestructura médica la enfermedad se propagaría en niveles similares a los de las naciones africanas afectadas”. Añadió que “se debe reconocer que en México hay muchas zonas donde la pobreza, la marginación y la carencia de recursos no permiten que las autoridades sanitarias puedan tener una capacidad de reconocimiento y respuesta rápida ante una posible contingencia”.

El presidente de Estados Unidos Barack Obama dijo a la población de su país debe guiarse por la ciencia y no por el miedo respecto dl virus hemorrágico. “Hemos examinado los protocolos para la protección de nuestros valientes trabajadores de la salud y, guiados por la ciencia (sic!) vamos a trabajar con los funcionarios estatales y locales para tomar las medidas necesarias para garantizar la seguridad y la salud del pueblo estadunidense” (25 de octubre).

También el 25 de octubre la OMS dijo que no hay planes para comenzar un programa de vacunación masiva hasta al menos en junio de 2015 y eso sólo si el crecimiento de la epidemia lo justifica.

Alexander Kentikelenis, sicólogo de la Universidad de Cambridge y principal autor de un artículo publicado en la revista científica The Lancet Global Health declaró que “Una razón importante por la cual el brote de ébola se extendió rápido fue la debilidad de los sistemas sanitarios en la región. Las políticas preconizadas por el FMI han contribuido a los sistemas de salud con financiamiento insuficiente, dotadas de poco personal y mal preparados en los países con brotes de ébola” (22 de diciembre de 2014).

14. Comportamientos de pánico y conflictos en los países afectados

Entre el 16 y 19 de septiembre un grupo de hombres armados mató en Guinea Conakry a siete personas que formaban parte de una misión para sensibilizar a la población sobre el peligro de la fiebre hemorrágica. Igualmente al sudeste de este país “motivados por la idea de que el ébola es una invención de los blancos para matar a los negros”, habitantes de un poblado protestaron y agredieron con palos y piedras a una delegación de asistencia que viajó para informar sobre los peligros del virus (21 de septiembre).

Durante los días 19, 20 y 21 de septiembre hubo encierro nacional en Sierra Leona y 300 mil trabajadores de salud y voluntarios desplegados en todo el país recorrieron todo el país llevando información sobre el ébola a las poblaciones. Sin embargo muchos habitantes protestaron y se quejaron por la escasez de alimentos pues las raciones de arroz que repartieron fueron insuficientes e inequitativas para muchas familias por lo que tuvieron que salir a las calles en busca de alimentos exponiéndose a los “contagios”. También se desató una ola de rumores sobre la distribución de jabones supuestamente envenenados que entregaban los activistas durante las operaciones de prevención.

Se reportó que en Liberia, el país más afectado por el virus de ébola muchas personas arrojan los cadáveres de los muertos por la enfermedad en los ríos (24 de septiembre).

Debido a la lenta reacción para controlar el virus gobierno de Liberia alertó que tanto su país como Sierra Leona y Guinea Conakry podrían caer de nuevo en una guerra civil (24 de septiembre).

En Veracruz, México, se dio una falsa alarma de que un hombre procedente de Dallas Texas era el primer caso de ébola, a partir de que el portal primerimpacto.net publicara la noticia. Se señaló ahí que el enfermo presentó síntomas del contagio cuando después de 8 años regresó a Nopaltepec y su familia lo llevó a Veracruz y que allí se encontraba internado y asilado, al igual que su familia había sido puesto en cuarentena A partir de entonces (9 de octubre) se desató una ola de rumores y de paranoia entre la población del Estado y también cundió la noticia entre medios noticiosos del país, en la redes sociales y entre pobladores mexicanos de otras entidades.

El 13 de octubre se da el siguiente reporte: En toda la zona del ébola, las tiendas se cerraron, los hoteles están vacíos, se han cancelado vuelos y se han abandonado campos de cultivo, además que se detuvieron las inversiones. Y respecto a la ciudad Conakry, capital Guinea, se describió lo siguiente: “perros, cabras y borregos vagabundos están desplomándose junto a pesebres vacíos en calles comerciales sin presencia de compradores. Lo único que la gente -compra como ‘pan caliente’- son productos que protejan contra el ébola, como gel antiséptico y dispositivos que se colocan en los grifos y agregan cloro en el agua”.

Mel Robbins de CNN cita (16 de octubre) una encuesta del Washington Post que señala que dos tercios de estadunidenses sufren de “miedo al ébola”. Lo cual califica como una epidemia, así lo dice textualmente: “El miedo al ébola es una enfermedad transmitida por el aire que se propaga a través de las conversaciones, y entra a tu cerebro a través de tus oídos. El miedo al ébola es una enfermedad tan contagiosa que algunas de las víctimas la han contraído simplemente por ver imágenes y videos acerca del ébola […]. Una vez ha entrado a tu cuerpo, el miedo al ébola ataca la parte del cerebro responsable del pensamiento racional. El miedo al ébola es peligroso porque da lugar a confusión en la toma de decisiones y a ilusiones. Las personas que están a favor de la prohibición de los viajes, por ejemplo, sufren de miedo al ébola. Cualquiera que esté convencido de que el ébola es un virus transmitido por el aire padece la enfermedad. El miedo al ébola también puede afectar a las instituciones. Navarro College una pequeña universidad comunitaria a las afueras de dallas, contrajo el miedo al ébola y ha prohibido el ingreso de estudiantes provenientes de países con casos confirmados de ébola, según The Daily Beast”.

15. Medicamentos y vacunas

En 1998, el farmacólogo nigeriano Maurice Iwu anunció en el Congreso Internacional de Botánica que el extracto de la fruta de Garcinia kola, un árbol de África Occidental, utilizado por curanderos locales en otras dolencias, detenía el crecimiento del virus en pruebas de laboratorio. No obstante, aún no se han realizado pruebas concluyentes con animales o seres humanos.

Uno de los supuestos avances más importantes tuvo lugar en 2012, cuando científicos del National Microbiology Laboratory (Canadá) administraron el compuesto llamado ZMaap o ZMAb a cuatro monos, 24 horas después de ser infectados con el virus. El ZMaap consta de tres anticuerpos que se obtuvieron de ratones a los que previamente se había vacunado con fragmentos del virus. Los monos que recibieron el suero ZMaap sanaron sin sufrir efectos secundarios. Un quinto simio al que no se le había administrado el fármaco murió a los cinco días. Según explicaron los investigadores, los anticuerpos del ZMaap atacan y neutralizan una glicoproteína en la superficie del virus que le permite entrar e infectar las células. Dicho medicamento se aplicó en septiembre a un médico y una misionera estadunidenses contagiados también en África que fueron dados de alta. Igualmente se administró, importado de Bélgica, experimentalmente durante la convalecencia de la enfermera española infectada Teresa Romero entre el 6 y 10 de octubre en el hospital Carlos III de Madrid.

Los científicos del Laboratorio canadiense anunciaron entonces su intención de desarrollar un anticuerpo más potente llamado Defyrus, que permitiría, junto a una terapia de genes antivirales, dar con la una cura definitiva. Sus previsiones apuntaban a 2014 para empezar a trabajar con humanos.

En septiembre de 2013, un estudio dirigido por Robert Stahelin, de la Escuela de Medicina de la Universidad de Indiana (EE UU) reveló cómo la proteína más abundante que compone el virus del ébola, VP40, le permite dejar células huésped y diseminar la infección a otras células en el cuerpo humano, un hallazgo que podría sentar las bases para el desarrollo de nuevos fármacos y estrategias de lucha. Antes, en febrero de 2013, el equipo de investigadores del Servicio de Microbiología del Hospital 12 de Octubre de Madrid logró dar un primer paso en el bloqueo de la entrada de los virus del VIH y el ébola en las células del sistema inmunitario para impedir que se diseminen por el organismo. El trabajo, que comenzó hace diez años y se encuentra aún en sus primeras fases, se está realizando en colaboración con la Universidad de Oxford y con el Centro Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) en Sevilla [5] .

Solo existen cinco laboratorios en el mundo equipados para trabajar directamente con este tipo de virus, concretamente, en Estados Unidos, Canadá, Rusia, Francia y Alemania. Los más conocidos son el laboratorio del CDC (Center for Disease Control, Centro para el Control de Enfermedades), en Atlanta (Georgia, EE UU), y el USAMRIID (United States Army Medical Research Institute for Infectious Diseases, Instituto de Investigación Médica del Ejército de los Estados Unidos para Enfermedades Infecciosas).

El 14 de enero de 2014, la compañía farmacéutica canadiense Tekmira, con sede central en Vancouver, anunció que había realizado la primera prueba en seres humanos de su antídoto contra el ébola, conocido como TKM-Ebola, dentro de las investigaciones que realiza bajo un contrato con el Departamento de Defensa de Estados Unidos. El 5 de marzo la empresa hizo público que había recibido una ayuda especial (denominada fast-track, y cuyo objetivo es «facilitar el desarrollo y acelerar la revisión de medicamentos para una necesidad médica insatisfecha», dentro de un contrato de 140 millones de dólares, para acelerar su investigación. Días después, el 22 de marzo, se confirmó el brote de ébola en Guinea. El presidente de Tekmira, Mark J. Murray, afirmó que «los nuevos datos demuestran la supervivencia en primates tras haberles inyectado dosis letales», y que «la plataforma antiviral aplicada incluye el antídoto antiébola». Como resultado de esta información, durante los meses de febrero a la fecha las acciones de Tekmira en Nasdaq se han disparado.

El 5 de septiembre, en los momentos que la epidemia del ébola crecía con rapidez la OMS anunció que podría acelerar el uso de ciertos “productos experimentales”, incluidas vacunas experimentales

El 8 de septiembre los Institutos Nacionales de Salud (NIH, por sus siglas en inglés) anunciaron pruebas relativamente exitosas en monos para sus variantes de vacunas hechas con partes del gen del ébola combinadas con virus de la gripe de un chimpancé y con poxvirus que se usa para crear vacunas contra la viruela. La OMS avaló lo experimentos y anunció que esperará los resultados definitivos en noviembre para determinar si se pueden probar en trabajadores del sector salud en África occidental.

En el caso de ébola del liberiano Thomas E. Duncan, desde el día 28 septiembre fue diagnosticado e ingresado en un hospital de Dallas Texas, se le administró un fármaco experimental llamado brincidofovir , antiviral fabricado por la farmacéutica Chimerix, con sede en Carolina del Norte y que no se había probado en humanos, ni animales para combatir el ébola. Murió el 8 de octubre en ese hospital.

El 10 de octubre anunció Myron Levine responsable del Centro para el Desarrollo de Vacunas (CDV por sus siglas en inglés) que tres trabajadores sanitarios de Mali (país que hasta ese día no presentaba casos de infectados) recibieron una vacuna experimental y 37 más lo harán las próximas semanas como parte de las primeras pruebas de sueros en África occidental humanos. La vacuna fue creada por la trasnacional biofarmacéutica Glaxo-Smith-Kline y CVD.

Javier Flores en un artículo del 12 de octubre habló de esta vacuna y dijo que se llama cAd3-ZEBOV, y que utiliza como vector un adenovirus de chimpancé al que se ha insertado un gen del virus del ébola. Mencionó otra vacuna más que igual que la primera está en fase 1 de prueba (estudios realizados en primates no humanos). Esta segunda llamada rVSV-EBOV desarrollada por la Agencia de Salud Pública de Canadá, y cuenta con la colaboración de la empresa biotecnológica estadunidense NewLink Genetics, emplea un virus de la estomatitis vesicular al que se ha remplazado uno de sus genes con otro de ébola. Ambas estarán listas hasta el primer semestre de 2015 si todo va bien [6] .El 24 de noviembre el grupo farmacéutico estadunidense Merck anunció un acuerdo con NewLink Genetics que otorga a Merck los derechos exclusivos para desarrollar y comercializar la vacuna y los posibles eventuales productos derivados, así como la investigación, fabricación y distribución del medicamento.

El 13 de octubre se anunció que empresa NewLinkGenetics comenzará a aplicar la vacuna en humanos en un laboratorio en Maryland, EU, y espera dar resultados certeros para diciembre. La empresa detalló que la vacuna será aplicada a individuos saludables para determinar cómo funciona, la dosis adecuada y los efectos secundarios. Rona Ambrose, ministra de Salud de Canadá, dijo que “la vacuna canadiense, rVSV-EBOV, suministra grandes esperanzas y promesa debido a que ha demostrado ser ciento por ciento efectiva para prevenir la propagación del virus del ébola en pruebas con animales».

El 22 de octubre se anunció que los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos empezaron un segundo ensayo clínico en humanos de una vacuna fabricada en Canadá al aplicarla en 39 adultos sanos de entre 18 y 65 años.

La farmacéutica china con vínculos militares con la Academia de Ciencias Médicas Militares (AMMS por sus siglas en inglés) Sihuan Pharmaceutical Holdings Group Ltd (en parte es propiedad del banco de inversión estadunidense Morgan Stanley) ha suministrado varias miles de dosis de su medicamento JK-05 a la región, para usarlo en caso de que surja un caso entre los trabajadores de ayuda que ha enviado China. No se descarta usarlo a nivel experimental de ensayos clínicos en pacientes africanos (y en caso necesario en pacientes chinos o asiáticos si se extendiera la epidemia a esa regiones), aun cuando el fármaco no está aprobado oficialmente debido a que sólo se ha experimentado en ratones. Sin embargo buscan “acelerar las fechas de salida del producto al mercado” (16 de octubre).

Un equipo de científicos de los Urales rusos, del centro de tecnologías biofarmacéuticas, anunció a finales de octubre que obtuvo un fármaco antiviral (vacuna) llamado “tiazavirin” que será probado en algunos países de África con el fin de verificar su “efectividad” en la curación de la enfermedad causada por el virus del ébola (Buscarón, 2014:5). Según esto, esta vacuna ha mostrado alta eficiencia (70-90%) contra varios tipos de fiebres hemorrágicas, incluyendo la fiebre marburgo que tiene semejanza con la del ébola.

El médico cubano Félix Báez contagiado por el virus ébola en Sierra Leona fue tratado en su recuperación en el Hospital Cantonal de Ginebra con doble tratamiento experimental a base de ZMab, similar a la primera generación de ZMapp, y de Favipiravir, fármaco japonés utilizado normalmente contra la gripe (7 de diciembre).

En suma, el papel de las vacunas, sueros, fármacos, etc., para tratar, curar, superar o prevenir el enfermedad del ébola está pendiente y la totalidad de ellos está actualmente en proceso de experimentación y de ensayo porque no han habido resultados seguros y contundentes ante un virusque podría evolucionar resistencia a la vacuna y sueros rápidamente; por ejemplo el uso de plasmas y de medicamentos como ZMapp o de vacunas que han pasado una o dos fases del protocolo para ser aprobadas y producidas, tienen efectos inciertos, contradictorios, asistemáticos o posiblemente adversos. Y si la mayoría de las compañías, laboratorios o centros que están acelerando sus investigaciones para sacar al mercado sus “productos salvadores” o “contenedores”, con sus declaraciones mediáticas intentan (con respaldo de instituciones cómplices) convencer que pronto habrá soluciones con sus medicamentos farmacéuticos caen en irresponsabilidades sospechosas y potencialmente peligrosas para la salud pública y personal de los infectados actuales y del futuro inmediato. Igualmente en este rubro están las declaraciones como las de Jeremy Farrar de la fundación “altruista” mundial Wellcome Trust y la de Peter Piot, director de la Escuela de Higiene y Medicina Tropical de Londres (LHTM por sus siglas en inglés) y co-decubridor del ébola en su primer brote, quienes aceptan y “recomiendan” experimentar las vacunas con los infectados de la epidemia de 2014, pues es un “momento perfecto para probarlo” (Senthilingam, CNN, 28 de julio de 2014).

Fararr dijo: «No sería ético no reconocer que los nuevos tratamientos potenciales podrían salvar vidas y reducir la transmisión en este y en futuros brotes”, Farrar recientemente pidió que se utilizaran nuevos enfoques en el control del brote ya que ninguna otra oportunidad permitirá el desarrollo futuro de nuevos tratamientos o vacunas.»Cualquier intervención nueva debe tener seguridad preclínica y datos de eficiencia, y datos de eficiencia en la Fase I en voluntarios saludables”, dice al describir el progreso lento de las fases involucradas en el desarrollo farmacéutico. “Pero, a final de cuentas no puede haber datos de la Fase II (eficacia de la vacuna) del ébola más que los adquiridos durante una epidemia”.

Peter Piot concuerda con Farrar. “En general creo que este brote continuo es una oportunidad rara para evaluar la efectividad de los medicamentos experimentales”, dice, pero señala, “siempre y cuando todos los estándares éticos sean respetados, y siempre y cuando no cree más problemas para controlar el brote, debido a que los experimentos médicos pueden disminuir la confianza en las autoridades de la salud y añadir hostilidad a los trabajadores de la salud” (Senthilingam, ídem).

Ahora bien, hay que tomar en consideración, como ha señalado la experta Allyson Pollock (en entrevista con Tariq Ali), que esos desarrollos de vacunas están ahora en manos de grandes fundaciones muy poderosas, de ONG, como GAVI (siglas en inglés de Alianza Global para la Iniciativas de Vacunas), que junto con grandes firmas como GSK y Merck, etc., están dispuestas a imponer patentes y la razón por la que les gustan las vacunas es porque ellas significan inmunización masiva, lo que implica grandes cifras y esos cifras entrañan dinero. Y sí, el dinero lo están poniendo los gobiernos occidentales capitalistas poderosos, entonces hay que desconfiar. Así pues estamos de acuerdo en que: “De verdad que lo que esos países necesitan no son vacunas, sino medidas adecuadas de redistribución y sanidad pública. No aprendemos nada de la historia, eso es lo realmente desesperante. Todas las grandes reformas, todo el gran colapso de epidemias de enfermedades infecciosas no se redujeron con medicinas y vacunas, sino con medidas redistributivas, que incluyen saneamiento, nutrición, vivienda digna y, sobre todo, una verdadera democratización. Y con eso llega la educación y todo el resto de medidas que necesitamos” (Ali y Pollock, Rebelión en línea, 13 de octubre de 2014).

16. La pobreza imperante y la debilidad de los sistemas de salud en los países africanos

Según varios enfoques y opiniones fundadas, el ébola o “ebolanomics” es una manifestación y resultado principalmente de dos condiciones entrelazadas o que se retroalimentan mutuamente. En primer lugar la pobreza y miseria de los principales países afectados por la epidemia de 2014, como ya hemos visto vienen de guerras civiles y de situaciones de conflictos político-sociales donde ha habido desplazados y refugiados y donde le PIB y la economía han quedado gravemente afectados. Además, en segundo lugar, han sido países explotados y oprimidos neo-colonialmente que han sido obligados y presionados -marcadamente desde la llegada del neoliberalismo mundial- a adoptar políticas que han precarizado la vida de sus pobladores; concretamente el principal responsable el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial (BM) con sus políticas de decremento del gasto público en programas sociales y médicos (calificados de “superfluos”). Tenemos que según el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo, Liberia se ubica en el lugar 175 de una lista de 187 naciones analizadas, Guinea Conakry ocupa la posición 179 y Sierra Leona es el país 183. Liberia se ubica en 65 por cierto de pobreza extrema, Guinea Conakry en 55 por ciento y Sierra Leona en 53 por ciento de pobreza extrema.

Así lo ha expresado el antropólogo Paul Farmer cuando señala la vivencia en estos países (y todos los pobres del planeta) de la «violencia estructural» y el «terrorismo de la pobreza» del consistente en condiciones históricas, coloniales y vigentes, explotadoras, discriminatorias, prejuiciosas y racistas. En segundo lugar la fragilidad de los sistemas de salud convencionales, pues según Farmer, el ébola (como otras enfermedades infecciosas de la pobreza) podría controlarse con unas condiciones sanitarias mínimas, de las cuales carecen los tres países más afectados (Liberia, Sierra Leona y Guinea). Se trata de las «cuatro S» (por sus siglas en inglés): Staff (personal médico suficiente, capacitado y bien pagado); Stuff (contener la epidemia con el material apropiado; mascarillas, guantes, aparatos de diagnóstico); System (sistema de salud moderno, ambulancias e intervención rápida, generadores, diésel, electricidad); Space (hospitales, clínicas, camas, lugares para la cuarentena) [7] .

Así en tercer lugar, tenemos, también, que el Banco Mundial y otras grandes “fundaciones neofilantrópicas” han impuesto programas focalizados y verticales para enfermedades específicas pero con malos resultados, ya que la tuberculosis, el paludismo, el sida y las enfermedades prevenibles con vacunas básicas siguen siendo las principales causas de muerte en esos paíse africanos. Así los datos por otras enfermedades infecciosas comunes son mucho más altos que los reportados por ébola en 2014: en Sierra Leona son anualmente de 68 mil, de los cuales 10 mil son por enfermedades prevenibles con vacunas básicas; en Guinea Conakry los datos correspondientes de 57 mil y 9 mil 400, y en Liberia de 20 mil y 9 mil 500 (Laurell, La Jornada, 12-12-2014: 3a).

En cuarto lugar y como perspectiva crítica a esta situación de pobrezas y de precariedades sanitarias, recuperamos la postura de la experta Allyson Pollock (2014: 2/3) que señala que la importancia del factor estructural y social de la sanidad pública, y los principios de toda la salud pública se halla en soluciones muy sencillas y básicas. Se trata de disponer de agua potable, saneamiento, buena nutrición, es decir, que hay que luchar contra los males de la pobreza. Y, junto con estos elementos estructurales, se necesitan sistemas sanitarios competentes que dispongan de médicos y enfermeras bien formados e instalaciones donde, por ejemlo en estos casos, se puedan aislar a la gente y puedas también hacer lo que se denomina “rastreo de contactos”: volver a la comunidad para averiguar con quien han estado en contacto las personas afectadas para que entonces se pueda ponerlas en cuarentena y aislarlas hasta estar seguros de que realmente no se han contagiado de la enfermedad ni no la han trasmitido durante el período de incubación.

Así pues en la situación de los 3 países de África occidental más dañados todas esas posibilidades enunciadas en este apartado prácticamente desaparecieron como posibilidad de defensa y respuesta de los propios países, es decir, de sus gobiernos y de sus pobladores.

17. Ébola como arma biológica y sospechas geoestratégicas

Según un artículo de Brian Cloughley (27-11-2014), el diario norteamericano Washington Post (WP) en su edición del 25 de octubre hace un reportaje de denuncia sobre la existencia de laboratorios militares clandestinos en Rusia donde se ha experimentado sobre la enfermedad del ébola, como parte del programa de armas biológicas, dice el diario estadunidense que hay una historia de 35 años de interés soviético y ruso sobre el virus del ébola. Según Cloughley el WP insinúa que Rusia podría estar atrás de la propagación del virus del ébola en esta epidemia de 2014, pues el reportaje del WP menciona “accidentes” de laboratorio sucedidos en 1996 y en 2004. En su artículo B. Cloughley revira que en varios países del mundo existen laboratorios de investigación secretos y se pregunta: “¿Cuántos laboratorios militares de investigación de EE. UU. Están abiertos a la inspección exterior? ¿O incluso a la inspección interior?” (Cloughley, 2014:2/3).

En efecto en Estados Unidos existen muchos bio-laboratorios que experimentan con bio-quimio-armas, entre ellos destaca el de Fort Detrick ubicado en Maryland que desde hace más de 50 años se dedica a detectar enfermedades mediante una “manipulada ingeniería de infección”, este laboratorio fue asesorado después de la segunda guerra mundial por el nazi EricTroub experto en enfermedades víricas (pues investigó las 40 cepas más virulentas conocidas en esa época). Se sospecha que desde allí se inocularon en varios países y lugares virus de VIH, ébola, peste bubónica, ántrax, virus del Nilo occidental, dengue hemorrágico y otros que afectaron sembradíos de vegetales como la caña en Cuba durante los 70. En estos años el Fort Detrick cambió de nombre, ahora se llama instalaciones Frederick para investigación sobre el cáncer y es supervisado por el Departamento de Defensa, el Departamento de Seguridad Interna, la CIA y el Instituto del Cáncer de los EE.UU. Se sabe que Estados Unidos mantiene los mayores arsenales de bio-quimio-armas; desde el año 2011 ha gastado unos 50,000 millones de dólares en este tipo de armas; antes de partir el expresidente George Bush asignó para el año fiscal 2009, casi 9, 000 millones de dólares más respecto del año anterior. Y con Obama el presupuesto se ha mantenido.

Se ha mencionado que en el estallido inicial de ébola de 2014 hubo una pugna entre algunas ONG´s como “Médicos sin fronteras (que tiene un peso político marcadamente tendencioso a favor de intereses trasnacionales) y la OMS, respecto a la declaración desde abril de si el estallido estaba fuera de control o no. La OMS se resistió en voz de uno de sus voceros Glenn Thomas (que posteriormente murió en la sospechosa caída sobre Ucrania del avión MH17 Boeing 777 de Malasya Airlines: ¿asesinato?) pues se cuidaba que la criticaran por exagerar la situación (como en la gripe A/H1N1 de 2009). Sin embargo, la OMS fue cediendo y para en julio el Director de la Escuela de Higiene y Medicina Tropical de Londres Peter Piot declaró el estado de emergencia y se aceptó que “operaciones militares” fueran desplegadas. De esta manera fue hasta agosto que la OMS declaró la emergencia (coincidiendo con el accidente aéreo de Thomas) [8] .

Otra sospecha geoestratégica destacable en torno al desarrollo de la epidemia ébola 2014 es la intervención de un plan programado para incrementar las ganancias fabulosas de las farmacéuticas, que recuerdan el papel del medicamento Tamiflú en la pandemia A/H1N1, fármaco de la empresa estadunidense Gilead Science, copropiedad de Donald Rumsfeld /exsecretario de defensa de Bush Jr.). Se plantea, pues, que la historia quiere repetirse pues la alarma y el pánico sobre la epidemia del ébola son impulsados por grandes empresas farmacéuticas que dicen tener la cura y sólo con ese anuncio ya han logrado incrementar sus acciones en la bolsa. Veamos una versión al respecto: según esto la cura del ébola existe desde hace ya prácticamente un lustro: en el año 2010 el equipo de la Universidad de Boston liderado por Thomas Geisbert aprovechó la secuenciación del ADN del ébola (1983) para usar la técnica “interferencia del ADN” y encontrar su cura. Pues el ébola solo tiene 8 genes y sólo uno de ellos, la proteína L, es el responsable de su replicación. Otros dos, llamados VP24 y VP35, interfieren con la respuesta inmune del ser humano, dificultándola. Geisbert y sus colegas (algunos de ellos de la empresa Tekmira y la gubernamental USAMRIID) diseñaron y secuenciaron secuencias del ARN que se “pegarían” a estos genes usando su misma manera de actuar, su mismo código. Este conocimiento llevó a Geisbert y sus colegas a crear 10 piezas de ARN a las que llamaron “pequeñas interferencias del ARN” (en inglés, por siglas, siRNA) con la precaución de que no perjudicara ningún otro material genético humano. Finalmente, lo “empaquetaron” para su consumo en nanopartículas de entre 81 y 85 nanómetros. El test llegó cuando infectaron monos con una dosis de ébola 30.000 veces la mortal; inyectaron la cura “siRNA” 30 minutos después y así durante 6 días. Los monos sobrevivieron sin efecto secundario alguno.

Así los dueños de farmacéuticas deben estar frotándose las manos mientras los laboratorios fabrican en secreto millones de dosis de una vacuna que le harán ganar en su momento unos beneficios absolutamente astronómicos [9] .

Otra dimensión geoestratégica se refiere a la disputa, control y despojo de recursos naturales (minerales, biológicos y otros) de los países arrollados por el desaroollo que se convierten en focos de los estallidos epidémicos. Así diversos analistas de izquierda (como Ruben Ramos, en Rebelión) aseguran que en la epidemia de ébola de 2014 se trata de: “ asegurar las reservas de petróleo en Nigeria y Benin; de diamantes en Sierra Leona y Costa de Marfil; de fosfatos en Togo y Senegal; de caucho, oro y diamantes en Liberia; de oro y diamantes en Guinea y Ghana; de bauxita en Guinea; de maderas preciosas y de tierras fértiles para el cultivo de cacao, piña, maní y algodón en todo el área”. Igualmente este autor asocia el ébola con la chikungunya porque: “curiosamente aparecen en las mismas naciones de África para extenderse por el resto del mundo, incluyendo El Caribe y América latina, se han convertido en armas biológicas estratégicas para usurpar territorios ricos en recursos naturales, enfrentar la relación de China con los países pobres y despoblar territorios de importancia geopolítica, militar y económica para la expansión sionista imperial” (1 de octubre de 2014: 2).

Así el territorio y sus riquezas ha sido uno de los factores geoestratégicos principales que están implicados en la epidemia del ébola de 2014, y que tiene sus antecedentes en el acaparamiento de tierras por compañías extranjeras que se viene dando desde hace varias décadas de ajuste estructural que, literalmente, han destruido las infraestructuras públicas (sobre todo la escolar y sanitaria) de los países más pobres del África subsahariana y occidental.

Otro aspecto geoestratégico es el militar imperialista que se usa como un buen pretexto para desplegar tropas, como las estadunidenses en el continente africano. Así, por ejemplo a inicios de la epidemia de ébola de 2014, se informó que a “pedido” del gobierno liberiano, Estados Unidos establecerá un puesto de mando militar en Liberia. Y durante todo el estallido de la ébola en 2014 este país ha enviado cerca de cuatro mil soldados, decenas de oficiales de su Marina, aviones, equipos de telecomunicaciones, ingenieros, etc.; de la misma manera Reino Unido envió cerca de mil soldados, barcos y helicópteros: Lo mismo que otras naciones como China que envió cerca de 100 expertos y otros implementos; países como Francia, Japón, Alemania y la misma Cuba que han enviado a especialistas y profesionales médicos que seguramente no sólo se han dedicado a labores médicas sino seguramente informativas. Cabe destacar que varios analistas han elogiado este tipo de acciones como “humanistas”, altruistas”, “solidarias”, “éticos”. etc.

Especialmente cabe destacar el caso de Cuba que, en efecto, tiene un historial de este tipo desde 1963 (con cerca de 132 mil profesionales en varios países del mundo; Vera, Orbe, noviembre de 2014: 2), y que en este caso han enviado a los países africanos más afectados cerca de 300 miembros de su personal médico, cosa que le sirvió el reconocimiento del gobierno estadunidense (de John Kerry y del presidente Obama) y que finalmente el hecho influyó en el restablecimiento de relaciones diplomáticas entre ambos países (anunciada en diciembre).

Estas ayudas y solidaridades militares y “civiles” tienen que ser contextuadas en el entendido de que las epidemias y pandemias más virulentas han sido y son monitoreadas por unidades militares de los países más poderosos (especialmente por cada uno de los diez “Comandos Militares Estadunidenses”, distribuidos en los seis continentes, incluyendo la Antártida). Y de que cualquier foco de crisis local se convierte en foco de crisis global bajo la lógica de lo glocal, y que en este sentido se transforma inmediatamente (por omisión, provocación y/o acción) en objeto de competencias, reacomodos, acuerdos, alianzas, etc., geoestrátegicas en las disputas por recursos, territorios, poderes y dineros, por parte de los gobiernos, empresas, organismos e instituciones internacionales. 

En fin, t odos estos aspectos mencionados en este apartado llevan a la necesidad de mencionar la hipótesis de que la epidemia ébola 2014 en realidad tiene que ver con una o varias “operaciones ébola” por parte de potencias trasnacionales capitalistas que se disputan, confrontan y/o coordinan situaciones provechosas a sus intereses con objetivos económicos, políticos, militares y geoestratégicos y que, de alguna manera o finalmente, refuerzan el reacomodo o el re-mantenimiento del orden mundial del capital o sea la subordinación del planeta y sus recursos humanos, materiales y bioquímicos bajo el capitalismo.

18. Ejemplos de visiones alternativas

El agricultor y sanador español Josep Páimes en un video informal de cerca de 20 minutos hace señalamientos cuestionadores, incluso con el adjetivo de “genocidas”, respecto a las actitudes y medidas que las organizaciones de la salud mundiales como la OMS han implementado para resolver las crisis epidémicas, específicamente sobre uso de fármacos químicos en asociación con la industria farmacéutica y las fundaciones “filantrópicas” (entre otras la de los Gates, Unilever, Coca Cola, Monsanto). Pues éstas mismas financian mayormente a la OMS con 77% de sus menguados recursos, mientras los gobiernos de las naciones miembros sólo aportan el 23% (y eso a cuentagotas y con grandes retrasos que en el caso de los países más ricos y principalmente los EUA, particularmente este gobierno desde hace años, se convierten claramente en cómplices de las epidemias y de las intervenciones extra OMS).

Páimes plantea que en el caso de las enfermedades epidémicas más comunes en África como la malaria, cólera y la propia ébola, ha habido curanderos locales y regionales que han manejado medicamentos no alopáticos de los cuales tienen experiencia pero los organismos interventores hegemónicos no han permitido que se apliquen masivamente, lo mismo sucede con medicamentos o remedios que se han desarrollado en otros enfoques médicos como los fitoterapéuticos, que son sencillos, baratos “casi gratuitos” y que han mostrado ser efectivos como antibacterianos y anti víricos, señala concretamente a los siguientes: Garcinia kola, artemisa, árbol de Nim, agua de mar, dióxido de cloro y plata coloidal; dice textualmente “no se han podido probar porque no dan dinero a la mafia”. Pone como ejemplo el caso de la epidemia de gripe AN1H1, de la cual hubo mucha exageración o invención para vender el tamiflú de la compañía Rochester (propiedad e Rumsfeld, funcionario de la Casa blanca). Y en la caso del ébola actual está pasando algo semejante pero con otras empresa como Glaxxo, etcétera. También denuncia que Estados Unidos, que como vimos en el capítulo anterior ya tiene una patente del virus ébola [10] .

Por su parte la nueva medicina germánica (NMG) plantea que las enfermedades son programas biológicos de la naturaleza que actúan independientemente y que los microorganismos que acuden en el momento en que la enfermedad empieza a sanarse solo están presentes como comensales y a veces ayudadores para el acto de sanación que es una potestad que sólo la naturaleza posee. Para la NMG el ébola es una enfermedad que ocurre por la asociación de al menos cuatro conflictos biológicos que se desarrollan simultáneamente, algunos en fase de conflicto activo y otros en fase de conflicto resuelto.

Para el tratamiento la NMG advierte que el médico debe estar altamente capacitado para la interpretación correcta de las transformaciones y conforme eso sucede tomar las decisiones terapéuticas correctas para atravesar la crisis con un mínimo de contratiempos y luego lograr la recuperación, también debe tener un buen conocimiento de medicina de urgencias y contar con la disponibilidad de insumos médicos y equipo a mano. Al principio y no hay hemorragias, el tratamiento debe centrarse en resolver el conflicto de los colectores del riñón, llamado también conflicto existencial. Esto se logra de una manera que puede parecer paradójica a quien no entiende la dinámica de la NMG. Para esto el paciente debe ser sacado de la cuarentena y del aislamiento y si es posible regresar a su casa. Si esto no es posible entonces los miembros de su familia y sus amigos deben acudir a verlo y a acompañarlo para que él pueda conectarse de nuevo con su realidad y recuperar el sentido de la vida. Si este conflicto por fin se resuelve el paciente empezará a orinar acentuadamente y las inflamaciones disminuirán muy pronto. En esta fase los electrolitos decaerán rápidamente y para que el paciente no sufra contracciones y calambres debe administrársele suero electrolítico, o agua de mar o jugos de frutas, especialmente cítricos, para recuperar los minerales perdidos. La leucemia presente en el ébola tiene un curso que se puede pronosticar y sabiendo que es una fase de curación debe monitorearse cuidadosamente para mantener los niveles adecuados en sangre tanto del volumen de su componente sérico como del contenido de sus elementos constituyentes. La trombocitopenia debe ser tratada de manera especial para mantener el volumen de plaquetas y evitar en lo posible las hemorragias. Con un tratamiento cuidadoso y experto, en unas tres o cuatro semanas la hematología del paciente empieza a tomar sus valores normales. Por lo general, al hacer volver al paciente a su territorio, mejora y los síntomas que producen los conflictos que le han afectado disminuyen. Cuanto mejor si regresa al lado de su familia. Para la NMG, al contrario de lo que se publicita, el ébola no es contagioso . Es un mal que sucede raramente, porque deben concurrir varios conflictos para que aparezca como enfermedad en un humano. Además para la NMG lo que llaman dengue es lo mismo que el ébola pero sin el conflicto de contrariedad territorial. Es lo mismo para fiebre hemorrágica, chincunguyá, marburg, etc . (Aguilar, 2014: 1, 2 8 y 9, en http://www.nuevamedicinagermanica.com.mx/2014/10/el-ebola-explicado-por-la-nmg/)

19. Análisis histórico y bio-sociocultural

La historia de las epidemias, rama que se ha desarrollado en los últimos 50 años de manera importante en varias escuelas del mundo académico y con grandes y serios investigadores, ha aportado grandes e innumerables estudios del cual se han sacado muchas descripciones, lecciones y regularidades. Pero parece que para las organizaciones mundiales de la biomedicina dominante, como la multicitada Organización Mundial de la Salud (OMS), todo empezara casi de cero. En la historia real de las epidemias, a pesar de su diversidad y de su tamaño, éstas se han desplegado siguiendo patrones y tendencias similares, situaciones comunes, comportamientos colectivos similares. ¿Los organismos y dirigentes que impulsan intervenciones y acciones grupales y sistemáticas y los que diseñan políticas paliativas o de sofocamiento de los brotes no han leído y comprendido esas historias documentadas y analizadas en términos de historia bio-socio-cultural (desde la historia, la geo-demografía, la antropología, la sociología y la psicología social?)

En primer lugar en poblaciones fuertemente empobrecidas, clasificadas en situaciones de vulnerabilidad, susceptibilidad y debilidad económica y ecológico-social. Y que con la implantación de la globalización imperialista han aumentado en precariedad y en cantidad en África, Asia y América Latina principalmente (países arrollados por el desarrollo capitalista).

En segundo lugar en epidemias que los “expertos” o “especialistas” sabían perfectamente –por el contexto ecológico y sociocultural– que aparecen o se provocan en países con perfiles de miseria y con sistemas alimenticios y sanitarios deficientes e insuficientes para enfrentar catástrofes y situaciones extremas como guerras, huracanes, terremotos, y las epidemias mismas. Es decir que son situaciones de emergencia y de alerta previsibles o consideradas susceptibles o, en su caso, inminentes, de padecer esas catástrofes bio-socio-culturales.

La prevención es clave y fundamental en estos casos, los organismos que están para detectar y monitorear (en primer lugar la ONU, la OMS y sus agencias directas e indirectas) no hacen su labor adecuadamente o fingen hacerla pero con justificaciones de todo tipo (primordialmente falta de recursos) o participan activa y/o pasivamente de complicidades geopolíticas.

Escenas dramáticas se repiten casi puntualmente y se remiten no sólo a la época medieval, como ha señalado el The New Yorker (citado por Batou, 18 octubre de 2014) : “ Los hospitales de Monrovia, la capital, están sobrecargados con pacientes de Ébola y rechazan aceptar más gente […] en las calles se acumulan los cadáveres infectados: la epidemia está en camino de adquirir tintes medievales» . Sino que por su dureza y masividad se remiten a épocas del surgimiento del capitalismo como la peste negra y principalmente la extensión de lo que se conoce como la mundialización epidémica en las poblaciones donde llegaban los conquistadores, invasores y salvadores del mundo (siglos XVI a XVIII principalmente). Hospitales, clínicas y centros de atención saturados, rebasados en sus mínimas capacidades e instalaciones, con grandes insuficiencias materiales y de personal médico-sanitario. Ayuda retrasada, manipulada. Medidas de control mediatizado y/o represivo. Calles asestadas de cadáveres, hambrunas, crisis. Desnutrición, desmoralización, pánico contagioso, miedo psicológico; decaimiento vital, mortandades y manipulación sacra y profana de los difuntos. Apropiación de tierras y recursos, rapiña de los poderosos. Saqueadores y oportunistas de las desgracias. Todo esto se ha dado históricamente y ahora –a la vuelta del siglo-milenio– se da con fuerza globaliadora y “modernizada”, o mejor, la barbarie se combina con la civilización burguesa decadente y en crisis y nos regala cuadros de grandes sufrimientos y horror, pero también de teatros y montajes indistinguibles de lo real y lo mediático (y virtual). Las poblaciones más precarizadas ahora golpeadas hasta quedar atascadas en sus respuestas o reacciones médicas y socioculturales, es decir por ellas mismas. Países medicalizados y amenazadoramente farmaceutizados y en manos de invasores (glocales y directos-indirectos) de todo tipo: altruistas, protagonistas, misioneros cívicos y religiosos, ONG´s reputadas y no tanto, voluntarios y civiles, médicos, enfermeras, brigadistas, políticos, periodistas, paramilitares, marines y militares. Y como corolario, el blandir de las corporaciones lucradoras y las mafias de la salud de las fórmulas de la “salvación” ¿o de la “amenaza”?, de las vacunas, los sueros y los quimio-medicamentos “científico-prodigiosos”; pues consideramos –a partir de lo visto– que ellos son inciertos, inseguros, contradictorios, riesgosos y hasta contra producentes [11].

20. A modo de síntesis conclusiva

Así pues, el estallido epidémico del ébola de 2014, se puede considerar históricamente (y contradictoriamente) la más previsible, anunciada, intervenida, dramatizada y publicitada de todas las habidas hasta ahora. Quizás también la más comentada, cuestionada y debatida en foros y espacios mediáticos y públicos. No tanto una epidemia de “moda”, como ha dicho María C. Rosas (Etcétera, diciembre de 2014: 399), sino «sistémica», no sólo por sus manifestaciones de “letalidad” o “peligrosidad” vírica, sino principalmente por ser producto de sistema, el sistema capitalista y de quienes lo comandan y sacan provecho de ello con el dominio y la hegemonía. Recordemos el papel y las políticas de los organismos internacionales interventores y, podríamos decir, provocadores de ella (destacadamente el FMI, el BM, la OMS, etc.), además el rol de las trasnacionales agrícolas que han destruido la agricultura campesina de los países africanos más implicados y han generado acaparamiento, despojo y deforestación; es decir, la intervención ruda de los intereses geo-económicos y médico-políticos imperiales e internacionales en juego en estas circunstancias de subordinación del mundo al capital, o sea de crisis-restructuración multidimensional y específicamente ecológica-económica del sistema mundial capitalista.

Desgraciadamente los países africanos pauperizados vuelven a ser las víctimas de esta catástrofe que, como hemos revisado, tiene a países, líderes, organismos, empresas, laboratorios y ejércitos de los países hegemónicos como responsables en diversos grados; al mismo tiempo por acciones directas e indirectas, por omisiones más o menos calculadas como por reacciones tardías, provocadas, planeadas e invasivas. Y otra vez, ratificando-rectificando a María C. Rosas (íbidem, p. 36) no sólo se trata de “exacerbado afropesimismo”, sino de verdadero control/dominio histórico, actual y reactualizado sobre de ellos. Y precisamente esta epidemia del ébola ha sido una palpable prueba y una contundente evidencia (con todo su dramatismo y tragedia) de ello.

Así pues, desde nuestra perspectiva llaman poderosamente la atención las omisiones y acciones de dos tipos de actores y agentes gemelos y complementarios del sistema mundial capitalista actualmente dominante:

a) Los agentes y actores del modelo médico hegemónico mundializado. La OMS, MSF, Cruz Roja Internacional, personal médico y de sanidad de varios países interventores y participantes, farmacéuticas de varios países en disputas y arreglos médico-financieros, laboratorios secretos y públicos de investigación y experimentación de sueros, medicamentos y vacunas y empresas productoras de equipo y material médico: trajes, cascos, guantes, calzado especial, mascarillas y aditamentos hospitalarios como jeringas, camillas, ambulancias, material higiénico y quirúrgico, etc., etc.

b) Los actores y agentes geo-estratégicos y políticos que desde sus posicionamientos e intereses de nación, de clase, de elite, de grupo y privados declaran y toman iniciativas para “ayudar”, “colaborar”, “salir de la urgencia”, “salvar” a su nación, a las poblaciones victimizadas, a los enfermos, a los potenciales contagiados, a los muertos y sus familias, a la humanidad entera, etc., etc. No referimos a presidentes, jefes de Estado, parlamentarios, funcionarios, líderes de organismos, organizaciones y ONG´s, connotados médicos, epidemiólogos, banqueros y millonarios altruistas e inversores, etc., etc.

Hasta el Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (CS-ONU) realizó por primera vez una sesión urgente por un problema de salud pública. Fue unánime la aceptación de una resolución, presentada nada casualmente por el gobierno de Barak Obama, que calificó al ébola como «¡amenaza a la paz y a la seguridad internacional!».

En suma, todo parece apuntar a que con este tipo de epidemias glocalizadas y subordinadas al dominio del capitalismo, sus agentes y actores decisivos (dentro de la neo-mundialización epidémica), cuyo paradigma justamente es el ébola de 2014 (y cuyos antecedentes son el VIH/sida de los ochenta y la A/A1N1 de hace unos años), las poblaciones proletarias y pobres del mundo (80, 85, 90, 95% del total mundial poblacional) somos las potenciales y reales víctimas de las catástrofes epidémicas-pandémicas. A menos que como poblaciones subordinadas y centralmente afectadas tomemos conciencia activa a partir de –precisamente– sacar enseñanzas preventivas y reactivas alternativas ante los factores, intereses, comportamientos, situaciones y manejos que han estado enfáticamente implicados en esta epidemia-pandemia del ébola 2014 y estemos prevenidas y resistamos con recursos solidarios y propios las próximas que se avecinan. Este es el sentido contributivo que ha querido tener este recuento analítico que hemos hecho en este escrito.

Notas

[1] “Panorama global del ébola hoy”, La Jornada,  12 de octubre de 2014, p. 3a.

[2] “Ébola”, Wikipedia, http://es.wikipedia.org/wiki/Ebolavirus.

[3] La Jornada , “Mortalidad de 70 por ciento en infectados de ébola, dice OMS”, 23 de octubre de 2014, p. 42.

[4] Según declaraciones de la especialista Allyson Pollock (y Tarq Ali, en Rebelión, 13-10-2014), e l papel que juega la Organización Mundial de la Salud, que es la autoridad internacional mundial en materia sanitaria, ha sido el siguiente en los pasados años: “Tiene poderes para elaborar leyes pero desde hace más de veinte años se la viene privando sistemáticamente de fondos y esa financiación está vinculada a todo tipo de condiciones, y esas condiciones las están fijando las grandes ONG mundiales, como la Fundación de Bill & Melinda Gates, que no tienen base democrática, no rinden cuentas y además están haciendo un daño incalculable a través de sus programas verticales […]. EEUU se negó a financiar lo que le correspondía, y te encuentras con que cuando los gobiernos occidentales y EEUU entran en acción, imponen sus condiciones, que giran habitualmente alrededor de las prioridades de Bill & Melinda Gates y no alrededor de las prioridades esenciales de la sanidad pública, y la OMS se encuentra con las manos atadas. Y es realmente la OMS la que tiene poder para hacer leyes, y sin embargo nunca ha ejercido esas funciones de las que hablamos respecto a los déficits democráticos que se producen en el momento en que las grandes financiaciones globales, como el Fondo Gates o el Fondo Buffet, determinan de hecho cuáles son las prioridades mundiales, desvinculándolas de la sanidad pública porque las vinculan a lo económico, necesitan industrializar, necesitan medicalizar y necesitan farmaceutizar”.

[5] Ver “ Las claves del ébola: un virus que extiende su rastro mortal y cuya cura carece de financiación”, en 20 minutos el Microscopio internacional, http://www.20minutos.es/noticia/2106358/0/ebola/epidemia/claves/ . Consulta 20 de octubre de 2014.

[6] “Panorama global del ébola hoy”, ídem.

[7] Citado por Lagunas David (2014) “Ëbola y violencia estructural”, en Antropología implicada, en línea, 24 de octubre, pp. 1 y 2. Consultado 25 de octubre de 2014.

[8] Véase el documento en línea. “Pandemia no hay ninguna: ¡detengan La Vacuna!, 22 de octubre de 2014, consultado el 8 de noviembre de 2014.

[9] Véase Periodismo alternativo, “‘Operación ébola’ la excusa perfecta para la implantación del nuevo orden mundial”, 9 de octubre de 2014, pp. 5 y 6/9, en http://periodismo-alternativo.com/2014/10/09/operacion-ebola-la-excusa-perfecta-para-la-implantacion-del-nuevo-orden-mundial/, consultado 5 de noviembre de 2014.

[10] Véase el video “Ébola, la verdad oculta de supuesta epidemia vírica”, https://www.youtube.com/watch?v=nX_LXN4XpNE

[11] Pues hasta una investigación ordenada por el gobierno británico ha revelado que los medicamentos alopáticos antimicrobianos (antibióticos, antivirales, antifúngicos y otros medicamentos) están generando resistencias y que los países más pobres (en primer lugar los de África subsahariana) “sufrirán” más este fenómeno. Pero el colmo de ello es que el líder encargado del estudio ordenado por le primer ministro británico, Jim O´Neill, declaró que buscan nuevas drogas o fármacos (alopáticos) para combatir tales resistencias (Notimex en La Jornada de enmedio, 12 de diciembre de 2014:3a).