Asistencia a la marcha de París
Agencias- Telam
Buenos Aires, 14-01-15.- El Canciller, Héctor Timeman, ofreció una conferencia de prensa en la que leyó un comunicado en el que desmiente lo publicado por el diario respecto a su participación en la Marcha Republicana el domingo pasado en París.
“El domingo fui a la marcha. Participé, con un grupo de amigos y familiares, junto al pueblo francés como muchas veces a lo largo de mi vida lo hice en Buenos Aires, en Israel, en Venezuela, en Chile, en Italia y otros países”, dijo hoy Timerman a través de un comunicado.”Preferí estar con el ciudadano común. Fue mi decisión. No me arrepiento”, reveló el canciller.
El comunicado de la cartera de Exteriores argentina salió al paso de la supuesta negativa de la presidenta, Cristina Fernández, a autorizar la participación de Timerman en la manifestación como representante oficial de Argentina, tal y como publica el diario Clarín en su portada de hoy.
“Es falso que consulté con la presidenta sobre la participación en la marcha de París”, dijo Timerman, quien afirmó que no habló con la presidenta durante el pasado fin de semana.
Tras su visita oficial a China, el ministro de Exteriores argentino hizo escala en París para pasar el fin de semana junto a su hija y firmó el libro de condolencias por los atentados que causaron la muerte de 17 personas la semana pasada.
Frente a la versión oficial, Clarín publicó que Timerman fue invitado por las autoridades francesas a participar en la marcha y al consultar a Buenos Aires recibió la orden de “que no formara parte de la marcha, a la que asistieron al menos 45 líderes y jefes de estado mundiales”.
La embajadora argentina en París, María del Carmen Squeff, encabezó la representación del país suramericano en la multitudinaria manifestación en apoyo a las víctimas de los atentados yihadistas.
El comunicadoleído por el canciller argentino es por demás revelador y elocuente:
Una vez más Clarín miente
Para evitar tener que publicar desmentidas semanales sobre la falsa información decidí, hace varios meses, sólo desmentir o contestar aquella información que afectaba al gobierno y mantener silencio sobre los ataques personales. Ataques tan ridículos como decir, falsamente, que cené en uno de los restaurantes más caros de París o criticar algo tan banal como que participé en un acto de la Embajada argentina con una corbata anaranjada.
Volviendo a lo importante. Es falso que consulté con la Presidenta sobre la participación en la marcha de París. Recién el domingo a la tarde le envié el comunicado de la Cancillería sobre el atentado en Nigeria. Tampoco en ese momento hablé con la Presidenta.
Llama la atención que quien firma la nota, María Laura Avignolo, corresponsal de Clarín en París, no estaba en París ya que se encontraba asistiendo a fiestas en Punta del Este tal como lo atestiguan los medios que cubren ese tipo de noticias.
Cuando aterricé en París de regreso de la República Popular China la embajadora argentina me avisó que la Cancillería francesa preguntó si deseaba firmar el libro de condolencias por los atentados de París. Por supuesto que fui como lo hubiese hecho con cualquier gobierno que atraviese una situación similar.
El domingo fui a la marcha. Participé, con un grupo de amigos y familiares, junto al pueblo francés como muchas veces a lo largo de mi vida lo hice en Buenos Aires, en Israel, en Venezuela, en Chile, en Italia y otros países. Siempre a favor de la vida y la libertad. Jamás haciendo diferencias, todas las víctimas son víctimas. Preferí estar con el ciudadano común. Fue mi decisión. No me arrepiento.
Francia siempre fue solidaria con los argentinos perseguidos por la dictadura. Nadie olvida ese gesto. Como tampoco es posible olvidar que mientras Clarín se apropiaba de Papel Prensa en sociedad con la dictadura ocultaba, en lo posible, los secuestros y desapariciones de periodistas, entre ellos mi padre.
A tal punto llega Clarín en sus ataques a mi persona que no duda en publicar a cualquiera que quiera denigrarme. Desde falsas denuncias hasta comentarios de ex ex-diplomáticos enojados por no recibir tratos preferenciales. Como por ejemplo, Roberto García Moritán, hoy habitual columnista de Clarín quien el 14 de julio del 2011 me envió el siguiente correo electrónico:
“Querido Héctor, estoy muy embolado porque hoy Clarín me involucra con mala leche en algo que no es cierto sobre una cuenta que tenia de mis tiempos en el exterior y anterior a cuando era vicecanciller. Realmente tenés razón cada vez que decís que son una gente de mierda. Abrazos”.
Clarín no cree en la libertad de expresión. Utiliza la libertad de expresión como la mejor arma para obtener prebendas de todos y cada uno de los gobiernos a los que extorsionó desde sus tapas. Todos los gobiernos fueron víctimas de los intereses comerciales de los dueños de Clarín.
¡Qué problema para la libertad de expresión si la defensa la encabeza un medio cuyo dueño, Héctor Magnetto, está involucrado en un juicio por delitos de lesa humanidad!
Héctor Timerman