HispanTV
24-12-14.-El número de familias que no pueden permitirse gastos de calefacción ha aumentado en el Reino Unido durante los últimos diez años hasta situarse por encima del millón de hogares, según un informe oficial publicado por la representante del Valle del Don (centro de Inglaterra), Caroline Flint, responsable de Energía y Cambio Climático de la oposición laborista.
“A los hogares con un solo progenitor los afectan con más dureza los aumentos en los precios del combustible, por ser mayor la proporción de sus recursos, que debe destinarse a cosas básicas como facturas de energía y comida”, ha descrito la situación la gerente de la organización caritativa Gingerbread (“pan de jengibre”), Fiona Weir.
La cifra de familias afectadas por esta “pobreza de combustible” se eleva a 1.027.000, de las que 348.000 (el 33,9 %) son hogares monoparentales, según el informe.
Esto supone un 18 % de las familias con hijos en situación de pobreza de combustible. La brecha entre la factura energética y lo que las familias pueden pagar alcanza cada año, de media, las 400 libras (unos 620 dólares estadounidenses).
En Escocia es el 25 % de los hogares los afectados y en Gales el 29 %, según cifras de 2011.
Flint ha lanzado ya antes numerosas advertencias sobre la crisis energética que sufre el Reino Unido, retomadas por parte de la oposición, que critica al Gobierno del primer ministro, David Cameron, por no ayudar a las familias que sufren estas carencias de combustible.
Los recortes presupuestarios adoptados por la Administración británica para hacer frente a la crisis financiera iniciada en 2008 hacen así aún más duro para esas familias soportar los incrementos en los precios de la energía, denuncian activistas implicados en la lucha contra la pobreza.
El Gobierno británico proporciona ayudas para pago de combustible, pero éstas solo se entregan a jubilados, dejando fuera a muchas familias con pocos ingresos.
Algunos diputados, informa la cadena iraní en lengua inglesa ‘PressTV’, han reclamado al Gobierno que amplíe esas ayudas a las familias pobres, ante la inminente llegada de los fríos invernales.